Los pacientes siguen sufriendo por la falta de equipo médico en el hospital Mario Rivas. La falta de ventiladores respiratorios aqueja al centro asistencial.
Conectada a un ventilador respiratorio se encuentra Argentina Rodríguez hace varios días en la sala de emergencia interna del Rivas.
La señora de la tercera edad padece de una enfermedad pulmonar que se transformó en neumonía y que estuvo a punto de llevarla a la muerte debido a
la falta de un ventilador, lo que obligó a los familiares a alquilar el aparato para salvarle su vida.
El costo por el alquiler de un ventilador es de al menos tres mil lempiras diarios, cifra que no todos los pacientes en esta situación pueden pagar, según los médicos.
José Samayoa, internista y
cardiólogo del Rivas, manifestó que la carencia de ventiladores viene arrastrándose desde que se abrió una unidad de cuidados intensivos en 1990, la cual se inauguró con cuatro camas, cifra que no se ha podido aumentar por el déficit de personal para atender a los pacientes que llegan a diario en busca de asistencia.
“La unidad tiene capacidad para ocho a diez personas, pero lo que no hay es aumento de personal en esa área. Hace 22 años hay una área con el mismo número de camas para una población que se ha triplicado; es inconcebible”.
El doctor indicó que 39 ventiladores repartidos en la emergencia de medicina interna, pediátrica y la sala de pediatría resultan insuficientes para atender la gran demanda.
“Es muy frecuente que uno o dos pacientes que caen en un paro respiratorio que podrían ser recuperados por un ventilador terminen muriendo, porque son atendidos con un ambú”.
Un ambú solamente es para trasladar a un paciente de un lado a otro, no para dar respiración permanente, además que es inhumano que esté el familiar dándole toda la noche con la mano al ambú, explicó el médico.
Pediatría
La emergencia pediátrica tiene al menos 20 camas que son insuficientes para atender a los más de 30 pacientes internos en esta área.
Susan Galo, internista, lamentó la calamitosa situación que se vive a diario en esta sala, donde al menos tres niños comparten una cama. “Tengo niños de once años en cunas, porque no tengo adonde ponerlos. Las mamás muchas veces duermen con los niños en brazos en una silla”.
La doctora agregó que a diario son asistidos 80 niños por problemas respiratorios en la consulta general y solo hay dos nebulizadores en el filtro de la emergencia, por eso los
niños deben esperar por horas para ser nebulizados.
En esta temporada, cuando las temperaturas descienden por la noche, los casos por problemas respiratorios han aumentado en un 50%. Actualmente el Rivas se encuentra en la zona de seguridad
en el canal endémico.
Las enfermedades respiratorias más frecuentes en los niños son las neumonías y diarreas.
El asma se agudiza en esta temporada del año en las personas que sufren este mal.
