Como si la crisis en el sector salud no fuera suficiente, ayer se dio a conocer que la empresa que abastece de oxígeno líquido al hospital Mario Rivas suspendió los suministros como medida de presión a las autoridades del Gobierno que deben una fuerte cantidad a la compañía.
Desde el domingo, varias cirugías programadas fueron canceladas por ese problema, y ayer ocurrió lo mismo, lo que viene a engrosar la mora quirúrgica que ya arrastraba el centro asistencial.
“Desde ayer -domingo- hemos tenido dificultades con la red de abastecimiento de oxígeno. Tenemos una planta central y de ahí se distribuye a toda la red, pero como no hay, estamos utilizando cilindros de oxígeno, que no es lo correcto; pero no podemos dejar de trabajar. Esperamos que pronto se resuelva el problema”, informó Víctor Hernández, director del Rivas.
Los afectados son todos los enfermos que por distintos motivos se mantienen vivos por el oxígeno. Solo las cirugías de emergencias se han estado practicando.“Para todos los pacientes utilizamos los cilindros. La reserva de la red es usada únicamente para neonatología y cuidados intensivos”.
Cada cilindro tiene 220 pies cúbicos, y tienen una duración aproximada de tres horas.
Víctimas de la huelga
Haciendo una pausa entre cada suspiro, obligada por el soplo que padece en el corazón, Mirtala Díaz (68) cuenta desilusionada que la cita que tenía programada con el cardiólogo para ayer fue suspendida por la huelga que mantienen los doctores en el Rivas y en los otros centros hospitalarios de la ciudad.
Doña Mirtala se levantó a las 3:30 de la mañana, preparó desayuno: tortillas untadas de frijoles y queso, lo que le serviría para saciar el hambre durante la espera, pues solo contaba con el dinero de los pasajes para regresar a Río Lindo, lugar adonde reside. Le llevó toda la mañana poder ser atendida, pues la sala de cardiología tiene una gran demanda de pacientes debido a que solo hay un especialista en todo el centro.
“Salí a las cinco de la mañana de mi casa para estar temprano. Cuando llegue aquí me dijeron que el doctor no estaba atendiendo. Es frustrante porque yo ando muy mal, me cuesta respirar, y el corazón me late muy rápido; me da miedo morir antes de que llegue la próxima cita que es hasta el 20 de enero”.
Más de mil pacientes de la consulta externa del Rivas diariamente son afectados por las asambleas informativas que unos 300 médicos de ese centro iniciaron el viernes pasado y que continuaron ayer.
“Nos duele decirles a los pacientes que no serán atendidos, la mayoría viene de zonas retiradas como Copán, Santa Bárbara, El Progreso, entre otros. Lamentablemente no podemos hacer más que cambiar la fecha de las visitas”, expresó una enfermera.
En la consulta externa las salas estaban despejadas, y en los pisos solo se observó la presencia de los estudiantes de medicina. Los doctores pasaron revisión a los enfermos a eso de las ocho de la mañana, luego se unieron a la huelga que se lleva acabo en el auditorio del centro.
“Estas medidas son las consecuencias del incumplimiento de los acuerdos que firmaron el 29 de diciembre del 2011, donde se establecía que todos los médicos
de contrato tendría su pago puntual. Que se divulgaría las nuevas plazas, pues aquí manos es lo que más se necesita; además el Gobierno se comprometió a brindar todos los materiales necesarios para poder trabajar. Nada de eso se ha cumplido”, dijo el cardiólogo José Enrique Samayoa.
Señaló que no hay suficientes materiales ni medicamentos para brindar atención de calidad a los enfermos. “Hemos pasado épocas cuando no hay gasas ni jeringas. Los pacientes tienen que ir a centros privados a hacerse los estudios porque hay deficiencia de equipos”.
Contó que como personal de salud se ven expuestos muchas veces a contagios de enfermedades, porque no se toman medidas de
prevención.
“Los pacientes asmáticos, tuberculosos, de enfermedades pulmonares, entre otros, comparten el mismo espacio físico, pues no hay un área de aislamiento. Hace poco murió una estudiante de enfermería
que se contagió de tuberculosis aquí en el hospital. Eso lo que significa es que esas áreas no son adecuadas, ni que se toman las medidas necesarias”, aseguró.
Samayoa explicó que el 40% de los doctores que trabajan en el Mario Rivas están por contrato.
“Un contrato es algo temporal, por mientras se resuelve el problema, pero aquí hay médicos que llevan 10 años y no se les ha arreglado su situación”.
José Naún Lemus, vicepresidente nacional del Colegio Médico, manifestó que la politización de los hospitales ha provocado la actual crisis.
El médico calificó de peor la situación que se vive en el hospital Leonardo Martínez, pues asegura que el 90% de los 150 médicos que hay están por contrato.
“Esta situación es preocupante porque no hay estabilidad laboral, ya que los médicos no cuentan con garantías”.
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