Tegucigalpa, Honduras
No es nada extraño que las figuras públicas o políticos se den un retoque con photoshop para verse más guapos y jóvenes durante su campaña electoral.
Sin embargo, a algunos se les va la mano con esta aplicación y su abuso con el afán de borrar arrugas o imperfecciones, los vuelven irreconocibles.
Haciendo una revisión de las pepeletas electorales es notorio el cambio en el aspecto físico de los candidatos.
Casi todos los presidenciables del Partido Liberal recurrieron a esta técnica y quien se ve un poco más real es Enrique Ortez Sequeira.
La economista y candidata presidencial Gabriela Núñez junto a su primer candidato a diputado Elvin Santos no gastaron su tiempo en tomarse nuevas fotografías y están utilizando las de procesos electorales anteriores.
Y qué decir de la periodista y precandidata a la alcaldía de Tegucigalpa Waldina Paz, quien se quitó varios años de encima.
Igualmente, el reconocido empresario Adolfo Facussé que ahora busca una curul en el Congreso también se dio su ayudita con el photoshop.
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Rejuvenecidos
La aspirante presidencial por el Partido Libertad y Refundación (Libre) Xiomara Castro se hizo unos cambios faciales que la hacen verse más joven.
El precandidato del Movimiento Renovación del Partido (MRP) de Libre, Rasel Tomé, no se complicó y usó la foto que ocupó para los comicios pasados, en la cual fue elegido como diputado por Francisco Morazán.
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Los irreconocibles
Pero quienes sí se “enamoraron” del photoshop fueron algunos cachurecos. El primer lugar lo tiene la precandidata a diputada Loreley Fernández, del Movimiento Juntos por más cambios, que no solo por su “abuso” al photoshop ha llamado la atención de los hondureños sino también por su peculiar “jingle”.
A la par están otros nacionalistas que buscan la reelección en el Congreso como Carmen Rivera, Oswaldo Ramos Soto y el actual presidente del Congreso, Mauricio Oliva, quienes se quitaron todas las arrugas.
De acuerdo con Mario (Chano) Rivera, analista y estratega político, el uso excesivo de esta aplicación no afecta la votación hacia los precandidatos.
Explicó que la foto de la papeleta es muy pequeña, por lo que no se notan lo cambios solo en vallas, afiches u otra forma publicitaria, ya que la foto es grande.
“La papeleta es una sábana que al final ni se notan los retoques. El uso del photoshop no afecta la votación”, afirmó.
Según el experto, las políticos solo buscan “verse más guapos o quitarse algunos años de encima”. Reconoció que los seguidores de cada uno de los aspirantes a cargos de elección popular votarán por ellos con o sin photoshop.
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