Tegucigalpa, Honduras.
Las tomas de carreteras, edificios universitarios, marchas, huelgas de hambre y reclamos de otro tipo obedecen a un “plan de zozobra nacional” que b usca desacreditar al Gobierno, dijo ayer el analista Fernando Anduray.
El fin de todo esto es crear las condiciones para que al término de su mandato, el presidente Juan Orlando Hernández termine desacreditado nacional e internacionalmente y no busque la reelección.
Según Anduray, miembro del Partido Nacional, el fondo no es tanto la lucha contra la corrupción, es evitar que Hernández haga un buen gobierno y no tenga argumentos para buscar la reelección.
Con las recientes tomas de carreteras, que incluyó el “rescate” del periodista David Romero mientras participaba en una audiencia en un tribunal de justicia, la oposición lo que buscaba era que el presidente Hernández ordenara la represión, pero no alcanzaron su objetivo, dijo el entrevistado.
“Estamos frente a la discusión de un plan estratégico de desestabilización nacional y de desacreditación de la imagen del presidente de la república, que fue ideado por los dirigentes del PAC, Libre y Partido Liberal”, expuso.
Las tomas de carreteras, edificios universitarios, marchas, huelgas de hambre y reclamos de otro tipo obedecen a un “plan de zozobra nacional” que b usca desacreditar al Gobierno, dijo ayer el analista Fernando Anduray.
El fin de todo esto es crear las condiciones para que al término de su mandato, el presidente Juan Orlando Hernández termine desacreditado nacional e internacionalmente y no busque la reelección.
Según Anduray, miembro del Partido Nacional, el fondo no es tanto la lucha contra la corrupción, es evitar que Hernández haga un buen gobierno y no tenga argumentos para buscar la reelección.
Con las recientes tomas de carreteras, que incluyó el “rescate” del periodista David Romero mientras participaba en una audiencia en un tribunal de justicia, la oposición lo que buscaba era que el presidente Hernández ordenara la represión, pero no alcanzaron su objetivo, dijo el entrevistado.
“Estamos frente a la discusión de un plan estratégico de desestabilización nacional y de desacreditación de la imagen del presidente de la república, que fue ideado por los dirigentes del PAC, Libre y Partido Liberal”, expuso.
