29/04/2024
09:55 PM

Militares custodian colegios en Honduras ante asedio de pandillas

  • 19 julio 2017 /

En las últimas semanas han aumentado los crímenes contra estudiantes en Tegucigalpa.

Tegucigalpa, Honduras

Policías militares armados vigilan la entrada y alrededores del Instituto Saúl Zelaya de la capital de Honduras, mientras otros desarmados circulan por los pasillos y conversan con los alumnos de este colegio asediado por pandillas.

En las últimas semanas han aumentado los crímenes contra estudiantes en Tegucigalpa y los pandilleros tratan sin cesar de reclutar a jóvenes o inducirlos al consumo de drogas.

Ante el peligro, muchos centros educativos se han visto obligados a tomar medidas extremas.

'Debería de haber otro tipo de instituciones haciendo este trabajo, pero es la única solución que nos han dado: la militarización', afirma a la AFP Hernán Fuentes, director del Saúl Zelaya, donde hay 1.700 estudiantes distribuidos en tres turnos, mañana, tarde y noche.

'Aquí estamos en un barrio caliente. Las pandillas Mara Salvatrucha (MS-13) y Barrio 18 querían posesionarse del colegio, hacer del colegio su centro de operaciones', reconoce el profesor Fuentes, ya a punto de jubilarse.

Los militares también están desplegados de forma permanente en el Central Vicente Cáceres, el colegio de secundaria más grande de la capital con más de 6.000 alumnos, según Mario Rivera, portavoz de esta unidad llamada Policía Militar de Orden Público (PMOP).

En otros institutos de secundaria, grupos de efectivos hacen rondas en autopatrullas para tratar de mantener a los pandilleros a raya, que quieren reclutar a los jóvenes o inducirlos al consumo de drogas.

- Guerra entre pandillas -

El pasado 27 de junio los restos de Olman Castillo (18), estudiante de último año del Central, fueron hallados en la vecina colonia Divanna, metidos en un saco a un lado de sus cuadernos y su mochila.

Una semana antes, en la colonia Quezada, aparecieron los restos de otra estudiante, Rebeca Abigail Torres (15).

El director del colegio Central, Cornelio Alejandro McCarthy, pidió la intervención de las autoridades policiales para investigar los crímenes y fortalecer la seguridad dentro y alrededor de la institución, ubicada al sur de la capital.

'Hemos pedido a las autoridades investigar estas muertes para que no queden en la impunidad, como ocurre con los periodistas y abogados asesinados', afirmó McCarthy a la AFP.

Ante los asesinatos, 'los directores de los colegios pidieron el apoyo de la Policía Militar', explicó Rivera. 'Se trata de dar protección a estudiantes, profesores y padres de familia', añadió.

Explicó que los crímenes no se han registrado en los colegios y en los alrededores, pero resulta difícil para la PMOP ir más allá del perímetro de los centros escolares, donde esa unidad militar-policial desarrolla un programa contra las drogas.

- Campaña antidrogas -

Vestido con pantalón de fatiga camuflado, una camiseta café con el monograma 'Sin drogas vivís mejor' en el pecho, el policía militar Franklin Ricardo Talavera daba una charla motivacional a 30 alumnos en un aula de ladrillos pintados de verde en el Saúl Zelaya.

Talavera presentaba un video con la historia de Nick Vujicic, un australiano sin brazos ni piernas que llegó a ser exitoso.

En el programa 'se está tratando de evitar que los jóvenes ingresen a pandillas o en el consumo de drogas, cultivarles valores y principios', dijo el militar a la AFP.

Según el Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional, 33 estudiantes fueron asesinados en el primer semestre del 2017.

Honduras es considerado uno de los países sin guerra más violentos del mundo, con una tasa de homicidios cercana a 60 por cada 100.000 habitantes, lejos del promedio mundial de 6,7 por 100.000 registrado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).