Muamar Gadafi, el tirano que murió a manos de los rebeldes
Muamar al Gadafi nació cerca del puerto libio de Sirte, en un campamento beduino, el 7 de junio de 1942, cuando el país aún se llamaba Noráfrica Italiana. Tras la II Guerra Mundial y la caída de Mussolini, las potencias dejaron el territorio desértico, arruinado y plagado de minas, al rey Idris.
Gadafi, tras su paso por un colegio militar, organizó un golpe con otros oficiales para derrocar al rey Idris. No era nadie en la jerarquía militar, solo un capitán del Cuerpo de Señales, pero tenía un nombre entre sus compañeros.
Así que antes de cumplir 28 años, el 1 de septiembre de 1969, se había constituido en el nuevo líder del país. Los principios que le inspiraban eran un beligerante anticolonialismo y las figuras del Che Guevara y el presidente egipcio Gamal Abdel Nasser. Durante su mandato, gracias a las inmensas reservas de petróleo recién halladas, levantó un régimen basado en los servicios sociales gratuitos, en el código moral islámico y en el nacionalismo panarabista.
Siguiendo a otro de sus faros intelectuales, Mao, publicó entre 1972 y 1975 los tres tomos del “Libro Verde”, donde defendía una “tercera teoría universal”, que rechazaba el capitalismo y el socialismo, por considerarlos ajenos al contexto social árabe.
Asimismo, exponía los principios teóricos de la “jamahiriya” (república de masas), que definía como “democracia perfecta”, con la que trató de dar voz al pueblo a través de la creación del Congreso General del Pueblo (foro legislativo que servía de intermediación entre los ciudadanos y el liderazgo del ejecutivo) y los llamados comités revolucionarios (organizaciones de base que controlaban la actividad política del país) en el nuevo Estado.
Durante sus años de mandato, intentó fusionar Libia con Egipto, Siria, Túnez y Sudán. Invadió Chad y dio su apoyo a los tres tiranos más sanguinarios del África poscolonial: Bocassa, en el Imperio Centroafricano; Idi Amin, en Uganda; y Mobutu, en Zaire.
Fue encuadrado por Occidente dentro de la órbita del terrorismo internacional, después de haber participado en casos de terrorismo de Estado en el extranjero como la destrucción de dos aviones de pasajeros (de la compañía UTA, en 1986, 170 personas muertas; y de la Pan Am, en 1988, 270 fallecidos) o en una discoteca de Berlín (1986, tres muertos y 200 heridos).
En abril de 1986, aviones norteamericanos bombardearon Trípoli y Bengasi, en un intento de acabar con las tensiones en la zona y por inspirar Libia numerosas acciones terroristas. En el ataque murieron 40 personas: entre ellas, Ana, de cuatro años, una de las hijas adoptivas de Gadafi.
Su excentricidad, a simple vista de las fotos en las que aparece, resultaba cómica. Su forma de vestir sobresalía por su singularidad, siempre adornado con sedas, con llamativos colores, con estrafalarias insignias y colgantes de juguete. El 20 de octubre el líder libio Muamar Gadafi murió, abatido por las fuerzas del Consejo Nacional de Transición, en su ciudad natal de Sirte. Y las primeras imágenes solo mostraban el cuerpo inerte de un hombre descamisado y con sangre en la cabeza, mientras, a su alrededor, un grupo de personas coreaba consignas. Su cuerpo fue exhibido por cinco días en el congelador de un mercado para luego ser sepultado en el desierto en un lugar desconocido.
Muamar al Gadafi nació cerca del puerto libio de Sirte, en un campamento beduino, el 7 de junio de 1942, cuando el país aún se llamaba Noráfrica Italiana. Tras la II Guerra Mundial y la caída de Mussolini, las potencias dejaron el territorio desértico, arruinado y plagado de minas, al rey Idris.
Gadafi, tras su paso por un colegio militar, organizó un golpe con otros oficiales para derrocar al rey Idris. No era nadie en la jerarquía militar, solo un capitán del Cuerpo de Señales, pero tenía un nombre entre sus compañeros.
Así que antes de cumplir 28 años, el 1 de septiembre de 1969, se había constituido en el nuevo líder del país. Los principios que le inspiraban eran un beligerante anticolonialismo y las figuras del Che Guevara y el presidente egipcio Gamal Abdel Nasser. Durante su mandato, gracias a las inmensas reservas de petróleo recién halladas, levantó un régimen basado en los servicios sociales gratuitos, en el código moral islámico y en el nacionalismo panarabista.
Siguiendo a otro de sus faros intelectuales, Mao, publicó entre 1972 y 1975 los tres tomos del “Libro Verde”, donde defendía una “tercera teoría universal”, que rechazaba el capitalismo y el socialismo, por considerarlos ajenos al contexto social árabe.
Asimismo, exponía los principios teóricos de la “jamahiriya” (república de masas), que definía como “democracia perfecta”, con la que trató de dar voz al pueblo a través de la creación del Congreso General del Pueblo (foro legislativo que servía de intermediación entre los ciudadanos y el liderazgo del ejecutivo) y los llamados comités revolucionarios (organizaciones de base que controlaban la actividad política del país) en el nuevo Estado.
Durante sus años de mandato, intentó fusionar Libia con Egipto, Siria, Túnez y Sudán. Invadió Chad y dio su apoyo a los tres tiranos más sanguinarios del África poscolonial: Bocassa, en el Imperio Centroafricano; Idi Amin, en Uganda; y Mobutu, en Zaire.
Fue encuadrado por Occidente dentro de la órbita del terrorismo internacional, después de haber participado en casos de terrorismo de Estado en el extranjero como la destrucción de dos aviones de pasajeros (de la compañía UTA, en 1986, 170 personas muertas; y de la Pan Am, en 1988, 270 fallecidos) o en una discoteca de Berlín (1986, tres muertos y 200 heridos).
En abril de 1986, aviones norteamericanos bombardearon Trípoli y Bengasi, en un intento de acabar con las tensiones en la zona y por inspirar Libia numerosas acciones terroristas. En el ataque murieron 40 personas: entre ellas, Ana, de cuatro años, una de las hijas adoptivas de Gadafi.
Su excentricidad, a simple vista de las fotos en las que aparece, resultaba cómica. Su forma de vestir sobresalía por su singularidad, siempre adornado con sedas, con llamativos colores, con estrafalarias insignias y colgantes de juguete. El 20 de octubre el líder libio Muamar Gadafi murió, abatido por las fuerzas del Consejo Nacional de Transición, en su ciudad natal de Sirte. Y las primeras imágenes solo mostraban el cuerpo inerte de un hombre descamisado y con sangre en la cabeza, mientras, a su alrededor, un grupo de personas coreaba consignas. Su cuerpo fue exhibido por cinco días en el congelador de un mercado para luego ser sepultado en el desierto en un lugar desconocido.
Chávez y el misterio de su enfermedad
La ola de sospechas resultaron ciertas: Hugo Chávez tiene cáncer. El presidente venezolano desde Cuba lo anuncio el 1 de julio al pueblo de venezolano. El mandatario había sido sometido a una operación de emergencia el 11 de junio en La Habana a causa de un “absceso pélvico”, “debido la existencia de un tumor abscesado con presencia de células cancerígenas, lo cual hizo necesaria la realización de una segunda intervención quirúrgica, que permitió la extracción total de dicho tumor”. A Chávez la noticia de su enfermedad se la dio el propio Fidel Castro. Ese fue el inicio de la reducción de sus apariciones públicas dentro y fuera de Venezuela e inició su tratamiento de quimioterapias en Cuba y posteriormente en Venezuela en el que se le pudo observar demacrado y delgado.
El misterio aún sin esclarecer es sobre qué tipo de cáncer y su ubicación padece el mandatario. Todo el país sigue de cerca la evolución de su salud debido a que el próximo año son la elecciones presidenciales y Chávez es candidato nuevamente por lo cual asegura que se presentará a los comicios.
Sorprendió cuando apareció en televisión con la cabeza rapada por la caída del cabello.
Desde su llegada al poder en 1999 por primera vez delegó poderes al vicepresidente Elías Jaua lo que aumentó más la preocupación de la enfermedad del presidente. Tras ser sometido a las quimioterapias, Chávez asegura estar plenamente recuperado, pero las dudas aún son latentes y para acallar rumores asistió a la Cumbre del Mercosur realizada recientemente en Uruguay en la que se le vio un mejor semblante y con mayor vitalidad.
Cristina Kirchner, se consolida en el poder tras ser reelegida
La presidenta argentina Cristina Kirchner fue reelegida el 23 de octubre para otro mandato de cuatro años, con un triunfo aplastante y así evitar un balotaje.
La victoria de Kirchner, una carismática abogada peronista de 58 años, representó la mayor diferencia entre el primero y el segundo en una presidencial desde la restauración de la democracia en 1983.
La mandataria tomó el timón del poder y del peronismo después de la muerte de su esposo, compañero de ruta y cogobernante de hecho, el 27 de octubre del año pasado.
Durante su campaña Kirchner hizo hincapié en la reducción de los niveles de pobreza, que en la actualidad llega a 8.3% unos 2 millones de personas en las 31 principales ciudades del país.
Casi 29 millones de argentinos estuvieron habilitados para votar en estos comicios, donde además se renueva la mitad de la Cámara de Diputados, un tercio de la del Senado y se eligen nueve gobernadores.
La popularidad de Kirchner está sustentada, en la dinámica de la economía, el consumo y las exportaciones récord que representan fabulosos ingresos en divisas para el país por venta agrícolas, con un promedio de 8% de crecimiento del producto interno bruto desde 2003.
La presidenta seleccionó como su compañero de fórmula a Amado Boudou, el joven ministro de Economía. Juntos han defendido el método de Argentina frente a la crisis financiera mundial: aumentar el gasto del gobierno en lugar de imponer medidas de austeridad.
Esta es una victoria agridulce para Fernández, la primera de su vida política sin su esposo y antecesor Néstor Kirchner, quien murió de un ataque al corazón el 27 de octubre del 2010, quien había estado junto a ella durante su carrera política.
Al obtener otro mandato de cuatro años, el kirchnerismo se convertirá, al término del segundo gobierno de Fernández, en la fuerza política con mayor permanencia en el poder de la historia moderna de Argentina.
En la noche, tras conocerse los resultados en la Plaza de Mayo reventaba de gente. Banderas de las agrupaciones kirchneristas “Movimiento Evita”, “La Cámpora”, “Juventud Peronista” y otros se fueron agrupando alrededor de recitales de música. El coro de la marcha peronista hacía referencias constantes al pingüino, como apodaban a Néstor Kirchner. “Oh, yo soy argentino, Soy de Cristina y del pingüino” era uno de los más escuchados.
Lula da Silva, un guerrero contra el cáncer de laringe
El 29 de octubre tras realizarse unos exámenes, Lula da Silva, de 66 años “fue diagnosticado con un tumor localizado en la laringe”, en el Hospital Sirio Libanés de San Pablo porque le encontraron cáncer de laringe. Los médicos luego de diversos exámenes dijeron que las posibilidades de que se cure son “excelentes”. La noticia sorprendió a todo el mundo y le enviaron saludos y palabras de fortaleza los principales dirigentes de la región. Lula había decidió ir al médico para que le fuera examinada la garganta debido a molestias en días anteriores.
Da Silva comenzó el lunes 31 con la quimioterapia, que será en forma ambulatoria y el tratamiento duraría 3 meses.
El brasileño gobernó el país de 2003 a 2010. A la fecha según fuentes médicas su enfermedad está reducida en un 75 por ciento. Su esposa Marisa Leticia ha estado a su lado cuidando su salud.
Daniel Ortega, otros cinco años más en la presidencia
Desde un principio se perfilaba como favorito y el 6 de noviembre día de las elecciones presidenciales en Nicaragua se cumplió lo pronosticado.
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, ganó con amplia ventaja los comicios para convertirse en el primer gobernante en ser reelegido consecutivamente en el país desde el fin de una dictadura en 1979.
El ex guerrillero marxista obtuvo un 62.6 por ciento de los sufragios, según datos el Consejo Supremo Electoral, CSE de Nicaragua. Para EUA y otras organizaciones las elecciones no fueron transparentes, debido a un larga serie de denuncias de irregularidades que a la fecha no han tenido una respuesta favorable.
Ortega llegó montado en una ola de popularidad construida en una serie de programas sociales financiados con apoyo de su aliado Hugo Chávez, presidente de Venezuela.
Ollanta Humala, un ex militar que toma las riendas de Perú
El 28 de julio el líder nacionalista y ex militar Ollanta Humala Tasso asumió la Presidencia en el Perú tras ganar las elecciones generales.
Humala asumirá su mandato por un período de cinco años, entre 2011 y 2016. Además es el líder fundador del Partido Nacionalista Peruano. Fue candidato a la presidencia de la República por la alianza electoral Gana Perú en las elecciones generales del Perú de 2011, realizadas el 10 de abril. Pasó a la segunda vuelta, realizada el 5 de junio, al no haber superado el 50%, lo mismo que la candidata fujimorista Keiko Fujimori y venció al conseguir el 51.449% de los votos válidos. Está casado con Nadine Heredia Alarcón con quien procreó tres hijos Illariy, Nayra y Samin. A últimas fechas su popularidad ha bajado a menos del 40 por ciento. Los padres de Humala le inculcaron el hábito por la lectura y en las vacaciones escolares solían viajar con toda la familia a los pueblos de la sierra, lo que le permitió desde muy pequeño ver de cerca la realidad del país.
Juan Manuel Santos, un luchador contra el narcotráfico
Desde que tomó posesión Juan Manuel Santos de la presidencia de Colombia una de sus tareas primordiales ha sido la lucha contra el narcotráfico y crimen organizado, este año se anotó una victoria al abatir las tropas colombianas al número uno de las Farc.
Sin revelar mayores detalles, el presidente Juan Manuel Santos, reveló que la ‘Operación Odiseo’ que se llevó acabo el 4 de noviembre, en la que se dio de baja a alias ‘Alfonso Cano’, máximo jefe de las Farc, contó con la colaboración de personal infiltrado en las Farc y que la operación fue planeada durante más de un año.
El Presidente destacó la perseverancia con la cual las tropas realizaron el operativo y reveló que la misma “tuvo inteligencia de diferentes fuentes”.
Reveló que llegar al escondite de Cano fue una ardua tarea, pero eso demuestra que “ningún miembro de las Farc está seguro en ningún rincón de nuestro territorio”.
Manifestó que los secuestrados no los “hemos olvidado un minuto y que haremos todo lo que esté a nuestro alcance para su liberación”, al mismo tiempo que reiteró que las puertas del diálogo no están cerradas.radiosantafe
Presidente Barack Obama se vuelve a lanzar al ruedo político
El presidente Barack Obama anunció el 4 de abril su intención de buscar un segundo mandato en la Casa Blanca, instando a sus seguidores a “proteger el progreso” realizado tras dos años difíciles y a continuar con su cruzada de cambio.
Obama, más canoso y casi irreconocible como el profeta de la esperanza que llegó al poder en 2008, inició el camino hacia las elecciones de noviembre de 2012, con un correo electrónico a sus partidarios y un vídeo que lanza su “última campaña” electoral. Ésta estrategia le permitirá recaudar fondos, lo que podría ser una elección de unos mil millones de dólares.
Obama prometió una campaña de mayor alcance, más centrada y más innovadora, y admitió que los últimos dos años de lucha por las reformas habían sido tal vez más difíciles de lo que muchos seguidores esperaban.
El logotipo de la campaña de Obama incluye la famosa imagen de un sol naciente utilizado en 2008, esta vez ubicado en el “0” de 2012.
Christine Lagarde, la cara fuerte del FMI
Christine Lagarde, abogada de 55 años, ministra de Finanzas de Francia, se convirtió el 28 de junio en la primera mujer directora gerente del Fondo Monetario Internacional, FMI, en sustitución del también francés Dominique Strauss-Kahn.
Lagarde consiguió el apoyo de casi 70% de los 187 países que integran el FMI, representados por 24 integrantes del Consejo Ejecutivo, para manejar la institución con fondos superiores a los 320 mil millones de dólares.
Lagarde logró imponerse a Agustín Carstens, gobernador del Banco de México, cuya campaña por varios países no consiguió ni siquiera el apoyo en bloque de las economías emergentes, para las que pedía más representación y participación en la toma de decisiones, mientras Lagarde recorrió el mundo, intercambiando promesas a cambio de votos.
José Luis Rodríguez Zapatero, el declive de un grande
El presidente del Gobierno saliente, José Luis Rodríguez Zapatero, ha conocido las caras del éxito y el fracaso durante sus dos legislaturas en La Moncloa.
Zapatero irrumpió con fuerza en la primera línea de la política y al frente del Ejecutivo con una primera legislatura marcada por las iniciativas de calado social, aunque se ahogó en la segunda, arrastrado por una crisis económica que aún amenaza con reventar las economías de la zona euro y con unas cifras de paro asfixiantes a casi cinco millones de parados en España. Aún así, también será recordado como el presidente que logró acabar con la violencia de ETA.
José Luis Rodríguez Zapatero, diputado por León desde 1986, dio un paso al frente en el año 2000 al encabezar la corriente reformadora “Nueva vía”, nacida con la idea de modernizar el PSOE tras la crisis de liderazgo en la que se veía sumido desde la dimisión de Felipe González en 1997.
Mariano Rajoy, la esperanza de cientos de miles de Españoles
Poco carismático pero tenaz, el conservador Mariano Rajoy, nuevo presidente del gobierno español, conquistó el 20 de noviembre el poder gracias a su imagen metódica y sobria, cualidades con las que los españoles esperan que logre sacarlos de la crisis.
Tras la aplastante victoria de su partido en las legislativas de noviembre, a Rajoy le espera la dura tarea de tranquilizar a sus socios europeos y a unos mercados financieros temerosos de que España, muy fragilizada por el estallido de su burbuja inmobiliaria, se vea arrastra por la crisis de la deuda.
Un exigente programa de austeridad y reformas, anunciado la semana pasada durante su discurso de investidura el 23 de diciembre, será la principal arma de este prudente político español.
Los españoles tienen la esperanza que Rajoy, puede sacar a flote al país del estancamiento en el que se encuentra para volver a ser una de las potencias mundiales.
Mahmud Abas, el defensor de Palestina
El presidente de la Autoridad Nacional Palestina, ANP, Mahmud Abas, habló el 23 de septiembre en la 66 Asamblea General de Naciones Unidas, ONU, la necesidad de que Palestina sea reconocida como país libre e independiente y el ingreso de la nación como miembro número 194 del organismo multilateral. “Esta es la hora de la verdad nuestro pueblo quiere escuchar la respuesta de ustedes” resaltó el líder palestino.
En la tercera jornada de sesiones de la ONU, Abas afirmó que “nadie con conciencia puede ignorar nuestra solicitud de afiliación plena a la ONU”. Abas es el presidente de la Autoridad Nacional Palestina desde el 9 de enero de 2005. Su lucha ha sido incansable y ardua, ha tenido fuertes diferencias con Israel. Su perseverancia para sacar al país adelante ha sido admirada y respetada. Su solicitud de adhesión a la ONU está en estudio, pero se espera tenga un final feliz para mediados del próximo año.
