Tegucigalpa, Honduras.
La directora de la Organización Panamericana de Salud (OPS), Carissa Etienne, se reunió ayer con las autoridades de Salud e hizo hincapié en la importancia de una nueva alimentación en los primeros años de vida de la población.
En Honduras hay unos 600,000 niños que sufren de desnutrición.
En su mensaje, la funcionaria puntualizó que la buena nutrición comienza desde el nacimiento, con la lactancia materna. “Los beneficios de la lactancia materna son tanto para la madre como para el bebé, los beneficios se extienden a lo largo del tiempo”.
Declaró que la lactancia materna está íntimamente relacionada con la incidencia de niños que sufren de problemas de desnutrición.
Sin embargo, menciona que la lucha contra la diabetes y sobrepeso se ha vuelto uno de los mayores desafíos de la salud pública y que requiere de un abordaje intersectorial.
“Sabemos que los beneficios de la lactancia materna son muchos; sin embargo, debemos entender que estamos lejos de tener una cobertura universal de la lactancia”, expresó. La leche materna es, según la OPS, el alimento más equilibrado y contiene todos los nutrientes necesarios para el correcto desarrollo del recién nacido.
Pero también tiene beneficios para su sistema inmunológico y su salud a largo plazo, por ejemplo, previene de la obesidad y favorece un mayor coeficiente intelectual.
“Uno de los factores es la falta de condiciones que favorezcan la práctica de la lactancia materna, particularmente en los ambientes laborales. Se requiere que las madres y las familias reciban el apoyo que les permitan mantener prácticas adecuadas de alimentación del lactante y del niño pequeño”, manifestó.
Entre las recomendaciones que dio se encuentra la revisión y actualización de leyes y reglamentos actuales.
No más rubéola
Por la tarde, la directora de la OPS fue recibida en Casa Presidencial por el mandatario Juan Orlando Hernández y su esposa Ana García y la ministra Yolani Batres. Etienne certificó ante las autoridades hondureñas la eliminación de la rubéola y la rubéola congénita en Honduras. Esta es una enfermedad viral febril altamente contagiosa que se caracteriza por una erupción maculopapular difusa.
La eliminación de la enfermedad fue posible mediante la introducción de una vacuna antirubéolica en los programas de inmunización.
La directora de la Organización Panamericana de Salud (OPS), Carissa Etienne, se reunió ayer con las autoridades de Salud e hizo hincapié en la importancia de una nueva alimentación en los primeros años de vida de la población.
En Honduras hay unos 600,000 niños que sufren de desnutrición.
En su mensaje, la funcionaria puntualizó que la buena nutrición comienza desde el nacimiento, con la lactancia materna. “Los beneficios de la lactancia materna son tanto para la madre como para el bebé, los beneficios se extienden a lo largo del tiempo”.
Declaró que la lactancia materna está íntimamente relacionada con la incidencia de niños que sufren de problemas de desnutrición.
Sin embargo, menciona que la lucha contra la diabetes y sobrepeso se ha vuelto uno de los mayores desafíos de la salud pública y que requiere de un abordaje intersectorial.
“Sabemos que los beneficios de la lactancia materna son muchos; sin embargo, debemos entender que estamos lejos de tener una cobertura universal de la lactancia”, expresó. La leche materna es, según la OPS, el alimento más equilibrado y contiene todos los nutrientes necesarios para el correcto desarrollo del recién nacido.
Pero también tiene beneficios para su sistema inmunológico y su salud a largo plazo, por ejemplo, previene de la obesidad y favorece un mayor coeficiente intelectual.
“Uno de los factores es la falta de condiciones que favorezcan la práctica de la lactancia materna, particularmente en los ambientes laborales. Se requiere que las madres y las familias reciban el apoyo que les permitan mantener prácticas adecuadas de alimentación del lactante y del niño pequeño”, manifestó.
Entre las recomendaciones que dio se encuentra la revisión y actualización de leyes y reglamentos actuales.
No más rubéola
Por la tarde, la directora de la OPS fue recibida en Casa Presidencial por el mandatario Juan Orlando Hernández y su esposa Ana García y la ministra Yolani Batres. Etienne certificó ante las autoridades hondureñas la eliminación de la rubéola y la rubéola congénita en Honduras. Esta es una enfermedad viral febril altamente contagiosa que se caracteriza por una erupción maculopapular difusa.
La eliminación de la enfermedad fue posible mediante la introducción de una vacuna antirubéolica en los programas de inmunización.
