30/04/2024
12:50 AM

Jóvenes sampedranos llevan una década encarnando la Pasión de Jesús

San Pedro Sula, Honduras.

El arresto, azotes, insultos y todo el suplicio que vivió Jesucristo antes de morir en la cruz se representan desde hace 10 años en las calles del barrio Barandillas gracias a las dramatizaciones que cada Miércoles Santo realiza un grupo de jóvenes de la iglesia Cristo Salvador.

Alrededor de dos manzanas de este populoso barrio sampedrano son recorridas con el propósito de llevar el mensaje del sacrificio de Jesús manifestado en las 15 estaciones del viacrucis.

Todo comienza durante la Santa Cena, última ocasión en la que Jesús de Nazaret se reunió con sus discípulos para compartir el pan y el vino antes de su muerte.

La dramatización que dura cerca de tres horas continúa con la traición de Judas, su sentencia a muerte, las caídas de Jesús bajo el peso de la cruz, el llanto de la Verónica en el camino hacia el monte Calvario y el sufrimiento vivido en la crucifixión.

Foto: La Prensa

Las 8 y 9 calles, 4, 5 y 6 avenidas, del barrio Barandillas, sirvieron de escenario del sufrimiento el día en el que el Hijo de Dios dio su vida por los pecadores.
Ante la mirada de decenas de fieles sucede la muerte de Jesús, para luego ser finalmente llevado al sepulcro a la espera de su resurrección.

Contener las lágrimas era imposible para quienes durante el acto reavivaron las humillaciones, el dolor y las torturas que recibió el Hijo de Dios al dar su vida por los pecadores. “Se parte el alma al presenciar, y de cierta forma vivir, todo el sufrimiento del Hijo de Dios”, lamentó María López con lágrimas en sus ojos.

Esto es parte del trabajo que con empeño hacen unas 65 personas entre niños, jóvenes y adultos, el cual planean con varios meses de antelación.

Foto: La Prensa



Juan Mendoza, coordinador del viacrucis, dijo que desde la escenografía hasta el vestuario son fabricados por feligreses en apoyo a este acto que se ha convertido en una tradición.

“El gran sacrificio que Jesús hizo por nosotros en la cruz, se dice fácil, pero no recordamos la esencia, todo lo que sufrió y soportó por amor a nosotros”, agregó.

Luis Flores, quien por segundo año consecutivo interpreta a Jesucristo, confesó que no fue sencillo en un principio poder recrear el suplicio que resistió el Hijo de Dios; sin embargo, la experiencia le ha dejado una gran enseñanza. “Sentí un enorme compromiso, pero es un placer para mí ponerme en los zapatos de Jesús y sentir un poco de lo que sintió él ese día”.

Foto: La Prensa