San Pedro Sula, Honduras.
Los niños de la aldea Casa Quemada por fin recibirán sus clases en un sitio apropiado tras haberse inaugurado ayer el jardín de niños “Fuente de Bendición Rafael H. Nodarse”.
El lugar fue fundado hace ocho meses por la maestra voluntaria María Luz Reyes, quien actualmente atiende 17 pequeños, pero ha tenido períodos en que hasta 26 ocupan sus aulas. Ya han egresado unos 100 de preparatoria, cuyas edades oscilan entre 6 y 5 años. La profesora recordó que “de la nada” empezó la labor de docente porque llevó la matrícula a la Dirección Distrital de Educación, donde le facilitaron el material para que pudiera dar las clases a los niños porque los padres de familia solo compran cuadernos.
“Empecé con ocho niños en el corredor de mi casa y hace unos meses invité a Tadeo Nodarse a una clausura. Él vino y nos dijo que mandaría a construir el kínder que llevaría el nombre de su padre”, comentó.
Reyes no recibe sueldo por el trabajo que hace. El empresario Tadeo Nodarse expresó su satisfacción al ver que los niños ya reciben una educación digna. “Les hice esta promesa y lo cumplí porque la educación y salud es importante”. El empresario destacó la labor de voluntariado de Reyes.
Los niños de la aldea Casa Quemada por fin recibirán sus clases en un sitio apropiado tras haberse inaugurado ayer el jardín de niños “Fuente de Bendición Rafael H. Nodarse”.
El lugar fue fundado hace ocho meses por la maestra voluntaria María Luz Reyes, quien actualmente atiende 17 pequeños, pero ha tenido períodos en que hasta 26 ocupan sus aulas. Ya han egresado unos 100 de preparatoria, cuyas edades oscilan entre 6 y 5 años. La profesora recordó que “de la nada” empezó la labor de docente porque llevó la matrícula a la Dirección Distrital de Educación, donde le facilitaron el material para que pudiera dar las clases a los niños porque los padres de familia solo compran cuadernos.
“Empecé con ocho niños en el corredor de mi casa y hace unos meses invité a Tadeo Nodarse a una clausura. Él vino y nos dijo que mandaría a construir el kínder que llevaría el nombre de su padre”, comentó.
Reyes no recibe sueldo por el trabajo que hace. El empresario Tadeo Nodarse expresó su satisfacción al ver que los niños ya reciben una educación digna. “Les hice esta promesa y lo cumplí porque la educación y salud es importante”. El empresario destacó la labor de voluntariado de Reyes.
