A los 19 años llegó a Estados Unidos con la idea de cumplir el anhelado sueño americano y con mucho esfuerzo ahora, José Bustillo, es ejemplo de que sí se puede lograr.
Este hondureño inició a trabajar en McDonald’s lavando platos y ahora es analista financiero de una empresa muy reconocida a nivel mundial.
'Vivía con mi mamá y mi hermana en San Francisco de Becerra, un pequeño municipio del departamento de Olancho. La única idea que tenía de Estados Unidos era la que construimos a través de la televisión: edificios grandes, trabajo y dinero. Pero cuando llegué me di cuenta de que la realidad no era esa', dijo Bustillo.
Además, de trabajar en este restaurante de comida rápida también se desempeño en una fábrica empacando cajas, limpiando baños y haciendo camas en un hotel y alrededor de la mitad del dinero que ganaba lo enviaba a Honduras.
'Me esforcé para aprender inglés y así ingresar en la universidad. Algunas personas me dijeron que mejor siguiera trabajando porque estudiar es muy caro en Estados Unidos, un sueño imposible de alcanzar, pero cuando tengo una meta no paro hasta que la logro'.
Su esfuerzo y dedicación le ayudó a ganar una beca para matricularse en la carrera de Comunicaciones y Economía en Saint Peter’s University, lo cual al inicio fue complicado ya que su inglés no era tan fluido. Bustillo comenta que se sentaba en la parte de atrás porque le daba temor que le hicieran preguntas y no saber responder.
Además lea: Abogado de EEUU responde preguntas sobre peticiones de asilo
Estudiaba de 8:00 am a 2:00 pm, por la tarde trabajaba en un restaurante. 'En ese trabajo hice amigos estadounidenses, italianos y latinos, con ellos hablába en inglés, lo que me ayudó a mejorar el idioma. Y con esfuerzo, terminé mis licenciaturas en dos años'.
Cinco años después de llegar a Estados Unidos obtuvo la ciudadanía, con la esperanza de llevar a su familia con él.
Afirma que lamenta la situación política actual que atraviesa Estados Unidos.'Hay mucha incertidumbre por la revocación del TPS (Estatus de Protección Temporal). Siento mucha pena porque la mayoría de las personas que vienen acá trabajan y se esfuerzan tanto que merecen una oportunidad'.
No deja de soñar con reunirse con su madre y llevarla a vivir con él. 'Quiero que ella disfrute lo que he logrado. Es por ella que yo estoy donde estoy', finalizó.
Nota proporcionada por OIM ONU Migración
