La Ceiba, Honduras
Las tomas de carreteras iniciadas el jueves anterior por seguidores de la Alianza de Oposición comienzan a provocar desabastecimiento de productos alimenticios y pérdidas de estos por falta de refrigeración.
Contenedores de diferentes empresas de alimentos, frutas y leche se mantienen parados en las orillas del corredor que de la zona atlántica conduce a El Progreso, luego a San Pedro Sula y el resto del país.
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Conductores permanecen en el sitio para evitar que la carga sea saqueada. Mientras eso ocurre, los dueños de pulperías, abarroterías y supermercados se quejan del desabastecimiento, por lo que urgen que se abra el paso.
La mayoría de las gasolineras de La Ceiba han cerrado debido a que ya se les agotó el combustible. Ayer era posible conseguir gasolina, pero había extensas filas de carros y motocicletas.
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“La otra semana será más crítica, estamos al mínimo, esperamos que haya una negociación y la ciudad se pueda abastecer de víveres y combustible”, dijo Luis Rojas, presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Atlántida.
En Colón, la situación es crítica desde el pasado viernes, porque no se ha permitido el ingreso de alimentos ni productos al comercio. En Trujllo, por ejemplo, el cilindro de gas está costando 500 lempiras. Los ganaderos están cuajando la leche y el derivado lo están vendiendo a 10 lempiras la libra en algunos sectores.
Las tomas se dan en las comunidades de El Pino y San Juan Pueblo. En Jutiapa se obstaculiza la ruta hacia el Bajo Aguán. Han colocado carros, árboles y bultos de piedras y arena. También hay quema de llantas.
 Ayer se cumplieron cinco días de acciones de protesta de los seguidores de la Alianza de Oposición en varias zonas del valle de Sula y litoral atlántico de Honduras.
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Valle de Sula
En la autopista entre San Pedro Sula y El Progreso, Santa Rita y noroccidente, las tomas continuaron ayer. En la entrada a La Lima y a la colonia Guadalupe en San Manuel, Cortés, el paso fue interrumpido a medias.
En ambos puntos de la autopista, los jóvenes colocaron barricadas con piedras y llantas encendidas, dejaron una vía libre para que la circulación de los vehículos no se detuviera en su totalidad. La falta del transporte interurbano obligó a los viajeros utilizaran taxis y carros de paila para llegar a sus destinos.
En el corredor entre El Progreso y Santa Rita, Yoro, el cierre fue total. Lo mismo ocurrió en varios puntos de Santa Bárbara y Copán, los manifestantes se mantuvieron por varias horas en las calles.
