Santa Bárbara, Honduras
El Paseo Real de las Chimeneas Gigantes cumplió 15 años de deleitar a miles de hondureños y extranjeros que visitan las calles del pintoresco pueblo de Trinidad.
El tema de este año fue dedicado a los animales en peligro de extinción y una mención especial al grupo teatral La Siembra que cumple también 15 años de hacer arte dramático.
Delmer López, uno de los coordinadores del majestuoso evento, aseguró que es este año llegó el doble de turistas que en años anteriores.
Las calles de Trinidad se convirtieron ayer en el escenario perfecto de enormes esculturas de animales que ya desaparecieron y otros que están en peligro por culpa de la mano del hombre. Muchos extranjeros y nacionales se tomaron fotografías.
 Las impresionantes esculturas llamaron la atención de cientos de personas que llegaron a Trinidad, Santa Bárbara, para apreciarlas.
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Hubo esculturas de monos, pingüinos, osos, leones, tigres, elefantes, guaras, entre otras especies en peligro de extinción. “Esta actividad y la cantidad de turistas que llegaron nos llenan de orgullo porque se menciona a Santa Bárbara y Trinidad como la capital hondureña de la cultura popular. En cada escultura está plasmada la labor de trabajo de muchos jóvenes que se sienten orgullos de sus tradiciones”, dijo López.
Dinora Casasola, una turista guatemalteca, dijo ayer que nunca había visto tanta maravilla junta. “Esto es un verdadero monumento a la naturaleza, aquí hay arte, aquí hay tradición. Honduras es maravillosa”, dijo mientras se perdía en las miradas en la Calle Real de Chimeneas.
Las esculturas fueron quemadas ayer a eso de las 11:30 pm, como es la tradición en Trinidad.
Durante esta actividad hay música y baile, una festividad que sin duda alguna enorgullece a los santabarbarenses.
Para su edición 2014, el tema que se manejó fue el Mundo Moderno. Las figuras representaron desde temas políticos y sociales hasta personajes populares como El Chavo del 8, como un homenaje.
