El año próximo, después de la socialización y consultas en los municipios, el Gobierno, con apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), ampliará el sistema de canales de alivio para aumentar la capacidad hidráulica y proteger el valle de Sula.
Ingenieros del Centro de Estudios y Desarrollo del Valle de Sula (CEDVS), después de realizar estudios técnicos con apoyo del BID, establecieron que es necesario dragar y ampliar el canal Maya, canal Marimba, canal Campín, quebrada Chasnigua y el río Chamelecón, construir muros y reparar bordos de tierra.
Con estas obras, según el análisis costo-beneficio del estudio, resultarán favorecidas directa e indirectamente 87,890 personas de La Lima y evitarán daños anuales de aproximadamente $14.5 millones por las inundaciones causadas por fenómenos naturales.
De acuerdo con la información técnica del BID, estas y otras obras y un Plan de Gestión Ambiental Social (PGAS) forman parte del programa para incrementar la resiliencia ante inundaciones en el valle de Sula, el cual tendrá un financiamiento de $20,000,000.
Ingenieros de CEDVS, con la participación de autoridades de las entidades ejecutoras Secretaría de Infraestructura y Transporte (SIT), Secretaría de Desarrollo Comunitario, Agua y Saneamiento (Sedecoas) y el Fondo Hondureño de Inversión Social (Fhis), presentaron el programa ante el alcalde de La Lima, Cortés, Santos Laínez; Martin Cruz, presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de La Lima; Alexa Solórzano, gobernadora, y representantes de otras entidades y ciudadanos del municipio.
Al presentar el programa, Yasser Cálix, jefe de análisis de proyectos de CEDVS, advirtió que el valle de Sula continuará vulnerable ante las inundaciones provocadas por eventos climáticos, que en los próximos años serán más inclementes por la agresividad del cambio climático.
“Según los estudios recientes, ya no se está hablando de cambio climático, se habla de un fenómeno más grave que se llama ebullición global (...). Para los próximos diez años, la temperatura a nivel global aumentaría en un grado, esto va a producir que las aguas superficiales de todos los océanos estén más calientes, generen más vapor y las corrientes de aire frío estén concentradas (...). Cuando se combinan masas aire frío con más de aire caliente tenemos huracanes”.
Cálix expuso que las obras que ejecutará el Gobierno ayudarán a aumentar la capacidad hidráulica “del sistema de defensa” del valle de Sula para disminuir el riesgo de inundaciones, pero aclaró que estas “soluciones son de corto plazo” y no se trata de una solución integral que demanda “inversiones estratosféricas”.
“Hemos definido la estrategia, hemos priorizado cuáles son las obras que generarían el mayor impacto en el menor tiempo posible”, manifestó Cálix.
Esta sería la primera vez desde que se construyeron los canales entre 2002-2004 que un Gobierno invertirá en la ampliación del sistema de protección hidráulica del valle de Sula para evitar nuevas inundaciones. Administraciones anteriores invirtieron en reparaciones de los bordos y dragados de los canales.
Antes de comenzar las obras, que deberán cumplir las Normas de Desempeño Ambiental y Social (NDAS), las entidades del Gobierno y el BID presentarán ante las comunidades el Análisis Ambiental Social y el Plan de Gestión Ambiental Social para analizar los impactos y planes de medidas de prevención o mitigación.
Haylin Suárez, directora noroccidental de la SIT, explicó ante las autoridades, empresarios y ciudadanos que las instituciones involucradas en este plan de resiliencia están “en los últimos procesos” y esto ha “llevado un año entero para ver estos proyectos casi realidad”.
“Hoy, esto es el comienzo, es la primera etapa de proyectos macro que tenemos que van ayudar a La Lima y San Manuel, que han sido bastante afectados (...). Hemos estado trabajando arduamente con el BID, un banco que ha estado dispuesto a apoyarnos con este tipo de proyectos de mitigación (...). Ya estamos prácticamente en el proceso de socialización, después va al Congreso y de ahí a licitación. Se tardan aproximadamente seis meses porque son fondos internacionales. Empezaríamos en enero y febrero del otro año”, dijo.
