Para algunas personas su lugar de trabajo puede llegar a convertirse en un “centro de tortura” en el que viven un suplicio a diario debido al constante hostigamiento del que son víctimas de compañeros o de jefes y solo su necesidad de un empleo les da fuerzas para no renunciar.
El bullying laboral es un fenómeno a veces difícil de comprobar o detectar en los lugares de trabajo, pero que deja huellas en quienes lo sufren y que afecta el ambiente de trabajo y muchos hondureños lo sufren.
El hostigamiento laboral puede llegar a causar efectos graves en las personas, dijo Valeska Martínez, inspectora laboral de la Secretaría de Trabajo en la zona norte.
“Hay gente que ha venido aquí llorando y con crisis nerviosa debido al hostigamiento laboral, el cual puede provocar distintos efectos en la persona. Puede llegar un momento en el que la víctima de acoso ya no resista más”.
Martínez reveló la cantidad de personas que llegan a la Secretaría de Trabajo a denunciar porque sufren bullying laboral. “En el sistema electrónico se registra que del 28 de febrero de 2011 al 28 de febrero de 2013 hemos recibido 45 denuncias y la mayoría son de parte de hombres”.
La inspectora está consciente que la cifra es baja, pues el hostigamiento laboral se da mucho en los trabajos, pero la mayoría de personas, por distintas causas, como conservar su empleo o pensar que no podrá demostrar el abuso, prefiere callar.
“Los hostigamientos laborales se dan de jefe a subordinado o a veces entre los mismos compañeros de trabajo, lo que se conoce actualmente como bullying laboral, o sea que discriminan o maltratan a alguien por su género, apariencia física, por su edad, etcétera.
Estas son circunstancias que son difíciles de comprobar porque se trata de cosas subjetivas.
Muchas veces se hace la investigación y las personas no encuentran testigos, porque el agresor busca el momento en que nadie escucha o lo ve para actuar. Esto provoca que las personas que sufren el hostigamiento estén bajo un estrés emocional o psicológico terrible”, agregó.
Lo más común
Hay diferentes maneras de hostigamiento en el trabajo, según Martínez, pero hay uno que se presenta en la mayoría de los casos.
“El bullying laboral más común en Honduras es el maltrato verbal, por ejemplo decirle a una persona que no sirve para nada, que nunca hace nada bien, ofenderlo o humillarlo en su lugar de trabajo”.
La inspectora de la Secretaría de Trabajo ha identificado el sector donde más se presenta este tipo de problemas. “Hemos identificado que la mayoría de casos vienen del sector comercio, como las tiendas. Antes, la incidencia cuando empezaron las maquilas en 1996 y 1997 era bastante grande, había una cultura de maltrato y hostigamiento, pero la mayoría de maquilas que opera actualmente en el país son de capital americano y las que causaban ese tipo de problemas han desaparecido”.
Martínez dijo que el hecho de que existan más denuncias por parte de los hombres se debe a un aspecto cultural.
“Hay más denuncias de los hombres, porque a pesar de toda la liberación que se puede hablar, lo cierto es que en nuestro país siempre hay cierto sometimiento y miedo a hablar. Hay mujeres que son acosadas y no hablan ni interponen las denuncias por temor a perder su fuente de empleo”. Agregó que esta situación se complica aún más en los casos de acoso sexual.
“Las provocaciones o insinuaciones sexuales pueden usarse para ofrecerle un mejor puesto o simplemente ella puede ser víctima de un jefe o compañero que disimuladamente la acosa.
La mujer piensa que su reputación puede verse afectada o dirán que ella provoca las situaciones y que es la culpable. Aunque existan las leyes la mentalidad en el país aún está cerrada”, explicó.
La inspectora aconseja a los empleados que son víctimas de bullying que lo denuncien y no guarden silencio, pues eso solo agravará su problema.
“Independientemente del tipo de acoso laboral, la gente debe tener valor de hacer las denuncias ante las autoridades. No debemos permitir ser acosados o que se violenten nuestros derechos independientemente de nuestro género, condición social, raza o preferencias sexuales, todos merecemos ser respetados”.
Las causas
Para la psicóloga Fanny Flores, el bullying laboral “es cualquier tipo de hostigamiento, maltrato, burla, agresión física e insultos. Significa todo tipo de situaciones en las cuales otra persona está en desventaja y se le esté maltratando física, mental o psicológicamente”.
Flores detalló las causas del bullying laboral.
“Hay personas que tienen puestos en los que se encargan del manejo de personal, pero no tienen la capacidad ni la humanidad para hacerlo, ahí es donde las empresas deben tener en cuenta que antes de darle a alguien un cargo deben ser capacitados.
También se presenta entre compañeros y algunos tienden a ser manipuladores y actúan de manera desleal y sabotean el trabajo de otros”.
La psicóloga aconsejó que se deben tomar acciones desde la primera ocasión en que sucede un abuso.
“No se debe dejar pasar ni una de estas situaciones de bullying laboral pues provocará que se repita. Hay que informar al supervisor inmediatamente y si no resuelve ir a otra autoridad superior en la compañía. Si aún así no se resuelve, la víctima del bullying puede acudir a instancias legales, porque ya sería un nivel en el cual la persona es ultrajada en varios sentidos”.
La experta señaló que las personas que sufren bullying pueden buscar ayuda psicológica.
“Quien es víctima de hostigamiento puede buscar ayuda para saber cómo afrontar los abusos y superar la situación. El agresor es difícil que se someta a tratamiento porque no reconoce su condición de abusador, pues se siente cómodo en su posición”.
Norman Portillo, director regional de la Secretaría de Trabajo en San Pedro Sula, reveló que el próximo viernes realizarán un foro para mejorar la respuesta a las denuncias interpuestas por empleados.
“Están invitados empresarios, sector obrero y abogados entre otros para abordar el tema de las denuncias de trabajadores y ver de qué manera podemos mejorar nuestros procedimientos”.
