29/04/2024
12:23 PM

Delegación de San Pedro viaja a conocer al Papa

San Pedro Sula, Honduras.

Pensaron que por su profesión solo impartirían clases a niños y jóvenes en las aulas de clases, pero el Todopoderoso tenía otros planes para ellos.

Argelia de Jiménez (56) y Humberto Jiménez (59), ambos maestros de profesión, tienen 37 años de casados. El compromiso de permanecer juntos los llevó a participar en un retiro matrimonial hace más de 15 años.

El encuentro espiritual cambió sus vidas de una forma positiva, ya que gracias a este y motivados por el fallecido Saturnino Senis comenzaron a orientar a matrimonios en crisis.

La ayuda que brindaban comenzaba a verse reflejada en matrimonios que se daban una segunda oportunidad, hasta que monseñor Ángel Garachana, obispo de la Diócesis, les pidió orientar a todo tipo de parejas, es decir, no solo a los unidos legalmente.

Es así que con ayuda de cinco parejas, incluyendo a los Jiménez, nació el Movimiento Familiar Vino Nuevo dentro de la Iglesia.

Los residentes de la colonia Universidad captan a unas 14 parejas cada tres meses para darles charlas una vez a la semana, orientadas a reforzar los lazos de unión y los valores en la familia.

Aunque cada pareja enfrenta diferentes problemas, la mayoría tiene conflictos por vicios e infidelidades.

El consejo primordial que les dan es mantener el diálogo entre ellos.

La gran labor que los Jiménez realizan sin pedir nada a cambio será recompensada con la oportunidad de participar en el octavo Encuentro Mundial de las Familias (EMF) a celebrarse en Filadelfia, Estados Unidos, del 22 al 27 de septiembre.

Emoción

“Vamos con una ilusión muy grande a aprender mucho con todos los temas que habrá para enriquecernos y poder compartirlos con las parejas”, dice Argelia.

El papa San Juan Pablo II hizo posible el encuentro mundial de las familias en 1994 en Roma para explorar el papel fundamental que desempeñan las familias en la sociedad y darles el espacio de hablar acerca de los retos y las bendiciones que tienen.

El lema del evento mundial es “El amor es nuestra misión: la familia plenamente viva”. Este reunirá a más de un millón y medio de personas de todas partes del mundo. Los días 26 y 27, el encuentro se engalanará con la presencia del papa Francisco. Algo que emociona inmensamente a los Jiménez, quienes viajan mañana a Estados Unidos.

“Aunque sea de lejos quiero verlo, esa es la emoción más grande. Al verlo solo en la televisión o en fotografías me llena, él transmite amor, verlo con la dulzura que habla, me da mucha esperanza”.

La semana del EMF estará dividida en tres partes: un congreso teológico del 22 al 25 de septiembre, un festival artístico con el papa Francisco en el que habrá diversos testimonios de familias de todos los continentes, y la misa final en el parque Benjamin Franklin, de Filadelfia.

“Poder estar aunque sea de largo, sentir y poder ver su presencia es emocionante como católicos, es nuestro líder, es el representante de Cristo”, manifiesta Humberto. Coincide con Argelia sobre la paz que el pontífice transmite con solo verlo y oírlo.
Delegados de todas partes del mundo asisten al EMF.

Nuevas generaciones

De las diferentes Diócesis de Honduras viajarán unas 25 personas. De San Pedro Sula, al matrimonio Jiménez lo acompañaran el padre José Canales, párroco de la catedral San Pedro Apóstol, y el padre Josué Hernández, asesor diócesano de la pastoral familiar.

“Es un evento muy religioso, pero también muy científico y académico. Me consta porque para mí es la segunda vez que participo en un encuentro. Muchos profesores de universidades de alto prestigio en Estados Unidos participan”, señala Canales.

El párroco destacó sobre la falta de valores en las familias hondureñas que traen consigo graves consecuencias. “Todo lo positivo y negativo que vemos en la sociedad tiene su origen en la familia. De eso no hay duda. No ha habido un cultivo en la familia como tal donde no falte uno de los padres. Tenemos la tarea de educar a las nuevas generaciones”.

Los EMF se celebran cada tres años, desde su creación se han desarrollado en Roma, Río de Janeiro, Manila, Valencia, Ciudad de México y Milán.