El Instituto Nacional de Jubilaciones y Pensiones para Empleados y Funcionarios del Poder Ejecutivo (Injupemp) tiene los días contados.
Andrés Torres Rodríguez, director de esa institución, afirmó que a la institución solo le quedan apenas siete años de vida, pese a que en este momento pasa por una situación de “bonanza”.
A partir de 2020, el Injupemp enfrentará un proceso de deterioro, dijo el funcionario en una audiencia con los diputados de la Comisión de Presupuesto del Congreso Nacional.
Torres Rodríguez y su equipo de trabajo presentó al Congreso un informe sobre las finanzas del Injupemp en el que resalta que los activos de ese instituto ascendieron a 22,129.9 millones de lempiras en 2012, lo que representa un crecimiento de 2,096 millones respecto a 2011 cuando mantenía 20,033.9 millones.
Una de las recomendaciones para evitar una futura crisis sería elevar de 7 a 9% la cotización de participantes del Instituto Nacional de Jubilaciones, ya que las reservas comenzarán a decaer en 2020.
En un estudio actuarial, el Injupemp presenta un déficit de 11 mil millones de lempiras, en tanto el efectuado por la Comisión Nacional de Bancos y Seguros
este sería de L49 mil millones.