La firma del ministro del Trabajo, Felícito Ávila.
¿Está consciente de que el ajuste salarial no cubre el costo de la canasta básica?
Hay que dimensionar que es un salario mínimo que debe de pagarse a un trabajador, no el que debe estar establecido. Cuando uno hace una observación acerca de esto, dice ‘mire, necesitamos más empleo en Honduras’, porque cuando haya dos o tres salarios mínimos en una familia, se puede tener la oportunidad de tener una canasta básica cubierta; pero solo con un salario mínimo no es posible. El salario mínimo es el techo, lo que pasa es que hay que hacer que no sirva como salario promedio, sino más bien como el salario base y nadie debe estar por debajo de ese salario.
Me parece que ha habido algunas interpretaciones incorrectas al considerar que el salario mínimo es realmente el que va a cubrir una canasta básica en Honduras. La ley permite declarar que debe ser la base, y por lo cual nadie debe estar por debajo de eso y además, entre uno o dos salarios que pudiésemos tener en una familia, podemos tener la mejor oportunidad para resolver la canasta básica.
¿Que hará el Ministerio con los patronos que no cumplen con el pago de salario mínimo?
Tenemos un acuerdo con la empresa privada y los trabajadores para constituir comisiones que van a permitir, no solamente vía inspección, porque podemos coaccionar para que esto se cumpla, pero hay que inducir a la empresa para que tenga el grado de cumplimiento; y en esto hay un acuerdo en la firma del convenio, que todos los que estén en deuda con el pago del salario mínimo, deben cubrirlo, porque ese es uno de los desafíos que tenemos en estos momentos.
¿Qué opina sobre la contrata de extranjeros para recolectar la cosecha de café?
Ese es un problema bastante complejo porque se trata de trabajadores del campo; se trata de ciclos en los que los trabajadores quisieran tener mayor oportunidad de poder hacer sostenibles estas actividades, sin embargo, creo que hay cosas que hay que señalar con exactitud y una de ellas es que no debe haber contratación de mano de obra infantil, sea nacional o extranjera, y segundo, es que el sector productivo tiene que promover algunas iniciativas que le permitan sostenibilidad a ciertos empleos en el campo, para que haya mayor oportunidad de empleo de los trabajadores, que no sean utilizados únicamente para la recolección, sino para otras actividades que favorezcan a las comunidades.
¿Qué posibilidades de inversión trae el acuerdo salarial?
Vemos muchísimas ventajas para la inversión y para los trabajadores, porque ellos van a retener su fuente de empleo y los inversionistas van a tener la oportunidad de poder -a dos años, y tres en maquila- programar lo que le va a significar el costo de mano de obra.
¿Qué beneficios se derivan de haber alcanzado este acuerdo salarial sin tanto problema como en años anteriores?
Creo que quienes van a resolver los problemas del país son los trabajadores y los empresarios, porque generan mayores oportunidades no solo de ingresos sino de desarrollo. Iniciamos bien el año, especialmente con la estabilidad económica del país.
En el tema de la canasta básica los empresarios se han comprometido a formar su propia red que les va a facilitar productos de la canasta básica a un costo más bajo de lo que está en el mercado; les van a llevar los productos para que puedan obtenerlos a precios más bajos.
Hay más medidas que facilitan realmente el ingreso de los trabajadores. Se espera que esto comience a implementarse una semana después de la firma, así que la siguiente semana empezamos a trabajar en eso.
¿Cómo ayuda este acuerdo a la generación de empleo en el país?
Las expectativas se dan a partir de la inversión. Si tenemos inversión va a haber más empleo, si hay más empleo hay más ingresos y si tenemos el acompañamiento del Infop, vamos a tener mejores oportunidades de calidad de mano de obra y mayores ingresos. Esto es una cadena. Se han hecho proyecciones, es retomar de nuevo todo el tema de la inversión y de la confianza que debe haber en Honduras. Se proyecta que vengan nuevas empresas al país o que las empresas actuales generen mayores espacios, tal vez con más crecimiento para que haya mayor empleo.
Todavía no manejamos cifras concretas de creación de empleo, pero tenemos buenas promesas de parte del sector empresarial, en el sentido de poder afianzar el apoyo que corresponda en cuanto a que haya empresas que en lugar de irse para Nicaragua u otro país, se queden en Honduras.
¿Cómo nos deja el ajuste salarial en comparación con el resto de los países de Centroamérica?
En cuanto a condiciones laborales, nos coloca muy bien, porque si bien es cierto tenemos un salario que es competitivo, también tenemos capacidad de demostrar al mundo que sí hay una buena relación obrero-patronal capaz de resolver los problemas y garantizarle a la inversión su seguridad jurídica, y a los trabajadores, los derechos que les corresponden.
¿Se vuelve más competitivo el país?
Se mejora a partir de que esto conlleva a que hay que mejorar la mano de obra y al hacer eso hay mejor ingreso, y al haber mejor ingreso es porque la empresa tiene más capacidades de poder producir y colocar su producto en el ambiente de comercio internacional.
¿Qué resultados se han obtenido con el empleo por hora?
Si se hace una medición de la ocupación en el país, sí hay avances, sí ha habido ocupación, pero en este caso lo más importante es que todo empleo permanente no sufra ni se trastoque para que pueda continuar generando capacidad de empleo digno. Cuando hay empleo permanente hay empleo digno, y eso es lo que se busca.
¿Es verdad que con el acuerdo salarial algunos patronos han decidido cancelar empleos temporales?
Estamos investigando eso. Esperemos que las contrataciones se hayan hecho en el marco de la ley y no necesariamente violentándola.
¿Qué legado considera que le deja al país este acuerdo salarial?
Nos deja un legado positivo, capacidad de diálogo, visión de país y compromiso con Honduras. Eso es lo que nos deja.
Vea noticias relacionadas
