La mano dura y discriminatoria del estado sureño de Alabama ya se hizo sentir contra el primero de varios hondureños que habitan en esa parte estadounidense. Por ello la Cancillería de la República giró instrucciones al consulado en Nueva Orleans para que vele por los derechos de los compatriotas que allí residen.
El hondureño de 26 años llamado José Matute es el primer detenido después de que la jueza Sharon Lovelace permitiera a las autoridades la aplicación de la ley HB 56, la que es considerada como la ley estatal más antiinmigrante hasta la fecha.
El consulado general de Honduras en Nueva Orleans, que dirige Elka Herrera, es el encargado en brindar la protección consular debida a los hondureños que residen en los estados de Louisiana, Mississippi, Arkansas, Alabama, Missouri y Kentucky.
Debido a la magnitud del problema que están enfrentando los hondureños en Alabama, la Secretaría de Relaciones Exteriores giró instrucciones al consulado general de Honduras en Nueva Orleans para que inmediato atienda a los hondureños que viven en ese estado, conoció LA PRENSA a través de un comunicado de Relaciones Públicas.
Aunque las comunicaciones oficiales en la Cancillería se han dificultado debido a los viajes al exterior que realizan tanto el canciller Arturo Corrales como el vicecanciller, Alden Rivera, se conoció que dentro de las instrucciones giradas al consulado en Nueva Orleans está en contactar de inmediato a las autoridades en Alabama para conocer si hay más hondureños detenidos a causa de la ley HB 56.
Huyen de Alabama
Por miedo a ser arrestados y posteriormente deportados a sus países de origen, miles de migrantes han comenzado a abandonar el estado de Alabama, ubicado en el sur de Estados Unidos y con una población de unos 5 millones de habitantes, de los cuáles sólo el 4% es de la comunidad latinoamericana.
Las esperanzas de los migrantes que aún residen en Alabama es que se bloquee la Ley HB 56 tras el anuncio del Gobierno de Estados Unidos en que se frene la ley considera como discriminatoria. En el caso del hondureño Matute, el primer detenido tras la puesta en vigor de la HB 56, fue puesto en custodia de las instituciones migratorias para luego ser deportado a Honduras.
Tras la aplicación de la ley el 29 de septiembre pasado, el Centro Nacional para las Leyes de Inmigración habilitó la línea telefónica 1-800-982-1620, en donde les ofrecerán ayuda a los indocumentados que sean detenidos bajo argumentos de la HB 56.
LA PRENSA conversó por telefónica con la cónsul Elka Herrera, quien prometió referirse al tema después y revelar el plan que estarían ejecutando para proteger a los miles de hondureños que viven en Alabama y que estarían dejando el lugar por temor a ser detenidos y luego deportados.
Gobierno presenta apelación
Ocho días después de su entrada en vigor, el gobierno del presidente Barack Obama presentó una apelación ante la Corte de Apelaciones del 11 Circuito en Atlanta, Georgia, para frenar la Ley HB 56 de Alabama mientras una corte de distrito emite un fallo final definitivo.
Entre otras medidas, la Ley HB 56, considerada por defensores y detractores como la más dura en su tipo en el país, criminalizó la estadía indocumentada, otorgó poderes extraordinarios a las policías para detener a individuos si tiene dudas razonables que se trata de indocumentados y obliga a las escuelas a verificar el estado migratorio de los alumnos nuevos y sus padres o apoderados.
La moción presentada por el Departamento de Justicia pide a la Corte de Apelaciones del 11 Circuito la suspensión inmediata de la ley, y argumentó que el tema migratorio es competencia del Gobierno Federal.
“Ni la Constitución ni las leyes federales de migración permiten un esquema estatal diseñado para echar a los extranjeros del estado”, señala el documento presentado por la oficina del Procurador Eric Holder.
