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Honduras y La Ceiba lloran a Guillermo Anderson

  • 06 agosto 2016 /

Consternación por el adiós al cantautor hondureño Guillermo Anderson.

La Ceiba, Honduras

La guitarra, la marimba y las maracas ya no volverán a sonar, uno de sus grandes ejecutores ya no estará para afinarlas. El cantautor Guillermo Anderson (54) se nos fue para siempre.

La muerte de Guillermo, quien llevó su música por América, Europa y Asia, sorprendió ayer por la mañana a Honduras, en particular a los ceibeños que conservaban la esperanza de que iba a superar el cáncer de tiroides que lo apartó de los escenarios desde noviembre del año pasado.

Duelo
Presidente lamenta su muerte
”Honduras dice adiós hoy a uno de sus hijos que más la amó, Guillermo Anderson. Dios lo reciba en su santo seno”, publicó el presidente Juan Orlando Hernández en su cuenta oficial de Twitter.
El intérprete de En mi país murió a eso de las 8:30 am en el hospital Vicente D’Antoni, adonde permanecía internado desde el domingo, luego de haber sido trasladado desde Guatemala en un avión de la Fuerza Aérea de Honduras, tras permanecer desde enero de este año en tratamiento.
“Se nos fue”, dijo su esposa Lastenia Godoy a la agencia Efe al confirmar el deceso de Anderson, cuya muerte ha conmocionado a los hondureños por el legado de su música.

La salud del artista empezó a empeorar el jueves. “Y hoy (ayer sábado), las cosas se nos complicaron y no pudimos hacer más. Guillermo se nos fue”, dijo Elías Canahuati, médico de cabecera y cuñado.

Desde que fue trasladado a esta ciudad, Anderson daba signos de querer seguir viviendo.

“Había padecido un par de metástasis cerebrales, esos eran los que se estaban tratando en Guatemala, pero el deterioro general de Guillermo no permitía que se le pudieran dar los tratamientos y obviamente sino seguíamos dándoselos, la enfermedad lo iba a abatir y eso fue lo que ocurrió”, explicó.

El autor de El encarguito murió rodeado de su familia, sus padres, esposa, hijas y cuñados.

“Hasta el miércoles y jueves teníamos algunas bromas, dentro de sus dificultades, pero él estuvo con esa actitud positiva que siempre mostró, cuando estuvimos alrededor de él y cuando se acercaba al pueblo hondureño. Él falleció rodeado de su familia. Guillermo era un hermano, se nos fue un ángel de la tierra”, agregó consternado el galeno.

Homenaje
Varios canales de televisión y radio en el país dedicaron una programación especial en honor a Guillermo Anderson.
A pesar de estar convaleciente, Anderson no perdió su alegría y optimismo. “Sabiendo lo difícil que estaba su proceso, siempre estuvo animado, pero Dios tuvo su voluntad. Dios necesita un cantautor y nos lo quitó a nosotros para llevárselo al cielo”.

Tras conocerse la muerte del creador del grupo Colectivartes, el centro hospitalario adonde pasó sus últimos días, se llenó de periodistas, amigos y seguidores del gran exponente de la música hondureña.

Guillermo escogió morir en la misma tierra que lo vio nacer un 26 de febrero de 1962.

Una imagen de la Virgen María cargada por una de sus hijas cuando salía del hospital denotaba la fe y la devoción que mantuvo unida a la familia en los momentos más difíciles.

Foto: La Prensa

Idda de Anderson llora la muerte de su hijo, ella estaba en el hospital cuando el artista falleció.

Foto: La Prensa

El cuerpo del cantautor es velado en la funeraria San José.
Legado

El embajador cultural por excelencia de Honduras ante el mundo se fue dejando un gran legado artístico.
Era un amante del ambiente y la naturaleza, las que fueron sus fuentes de inspiración para muchas de sus canciones.

Con su inseparable guitarra y auténtica voz, Guillermo le daba vida a las letras.

Su música
Su pasión por Honduras expresado en canciones lo pinta a cual mejor acuarela con su tema “En mi país”, la mejor declaración de amor a su tierra.
“Siempre luchó contra el cáncer, lastimosamente él partió hacia el más allá. Siempre estuvo con nosotros en la Fundación Pro Cáncer apoyándonos en los eventos con conciertos y otras actividades. Así es la vida y todo ocurre en el momento menos esperado, Dios es el que determina ese camino y deseamos que Dios lo tenga en su gloria”, dijo el doctor Óscar Moreno.

El cuerpo de Anderson es velado en la funeraria San José y será sepultado mañana.

Anderson fue un enamorado del mar, del Caribe, con el que nació a su lado y navegó en cayucos hechos a mano por pobladores de las comunidades garífunas, de quienes también decía que eran parte de su razón de ser, de su vida.

Por eso en la mayoría de sus canciones no falta el sonido del tambor, el caracol y la maraca, y en los videos el baile de los garífunas que viven en toda la región. Guillermo solamente se retiraba de La Ceiba por sus giras artísticas que le llevaron desde Estados Unidos a Argentina, de España a Holanda o Alemania, de Taiwán a Japón, y a cualquier rincón de Honduras.

En algunas ocasiones sorprendía a sus compatriotas apareciendo casi de incógnito en la celebración de un festival gastronómico como el de Cantarranas, confundido con su gente y degustando de la cocina hondureña y sus postres.

Guillermo, con estudios sobre Literatura Latinoamericana en EUA, hacía música de lo cotidiano, de la niñez, los jóvenes, los abuelos, los ríos, el bosque, los pantanos, las frutas y las flores; del sol, la luna, del amor y la patria.

Escribió canciones dedicadas a los inmigrantes que con sus remesas sostienen la economía. Muchos de los hondureños que ahora son padres y abuelos crecieron escuchando las canciones infantiles que escribió Guillermo hace más de 30 años inspiradas en la flora y fauna de Honduras.

La muerte del que probablemente es el mejor artista popular de Honduras en las últimas cuatro décadas enluta a todo el país.

Foto: La Prensa

Guillermo fue un apasionado por la naturaleza y la cultura.

Foto: La Prensa

Una colección de fotos muestran la sencillez, el amor a sus hijas y a la música.
Su música

1- En mi país

2- El encarguito

3- Dale play a la esperanza

4- Pobre marinero

5- Todo está aquí

6- Solo calales

7- Así te quiero

8- Cuando llega el carnaval

9- Malena

10- La fuerza que tenés

11- Te soñaba

12- Misquita linda

13- Cortaron el árbol

14- La Ceiba para todos

15- Lluvia con sol

16- Aló mamá

17- Cada paso

18- Llevarte al mar

19- Cipota de barrio

20- María Dolores