San Pedro Sula, Honduras.
Angustiados están muchos padres de familia del Instituto Tecnológico en Administración de Empresas (Intae) debido a la situación de inseguridad que afecta a los estudiantes del centro educativo.
LA PRENSA conversó ayer con algunos jefes de familia que se encontraban en busca del traslado para sus hijos, sin importarles lo avanzado que se encuentra el año lectivo.
“Tengo mucho temor y ya no quiero tener a mi hija aquí”, refirió la madre de una alumna que cursa el primer año de ciclo común.
Durante la mañana de ayer, tres padres de familia llegaron al Intae en busca del traslado para sus muchachos, y otro buen número afirman estar analizando la misma medida.
Seguridad
Jazmín Zapata, presidenta de la sociedad de padres de familia del colegio, considera que el problema se deriva de la inseguridad a la que se enfrentan los estudiantes al momento de culminar su jornada estudiantil.
“Necesitamos más patrullajes en los alrededores del colegio; adentro no hay ningún problema, pero sabemos que al salir es difícil que se puedan controlar hechos como los que estamos viviendo, por eso solicitamos la colaboración de la Policía para que refuerce la seguridad exterior”, dijo.
Los casos
La preocupación de los padres surgió luego de que el pasado viernes se confirmara la muerte de Brenda Lizeth Ramos Urbina, estudiante de la carrera de Informática en ese instituto. Ella desapareció el 13 de julio y encontrada estrangulada esa misma noche. Actualmente está desaparecida Madison Jaeli Hernández. Los familiares de Hernández, quien cursa el primer año de Administración de Empresas, indicaron que desapareció el jueves 7 de julio.
Romeo Palma, subdirector del Intae, expresó a LA PRENSA que lo acontecido en las últimas semanas con estudiantes del centro es algo que se escapa de sus manos, ya que una vez que estos salen de las aulas lo que pueda llegar a suceder es ajeno al instituto.
José Carballo, director del José Trinidad Reyes (JTR), señaló que una situación parecida vivieron durante 2015 en el colegio, año en el que reportaron la desaparición y muerte de seis de sus alumnos, entre varones y mujeres.
Angustiados están muchos padres de familia del Instituto Tecnológico en Administración de Empresas (Intae) debido a la situación de inseguridad que afecta a los estudiantes del centro educativo.
LA PRENSA conversó ayer con algunos jefes de familia que se encontraban en busca del traslado para sus hijos, sin importarles lo avanzado que se encuentra el año lectivo.
“Tengo mucho temor y ya no quiero tener a mi hija aquí”, refirió la madre de una alumna que cursa el primer año de ciclo común.
Durante la mañana de ayer, tres padres de familia llegaron al Intae en busca del traslado para sus muchachos, y otro buen número afirman estar analizando la misma medida.
Seguridad
Jazmín Zapata, presidenta de la sociedad de padres de familia del colegio, considera que el problema se deriva de la inseguridad a la que se enfrentan los estudiantes al momento de culminar su jornada estudiantil.
“Necesitamos más patrullajes en los alrededores del colegio; adentro no hay ningún problema, pero sabemos que al salir es difícil que se puedan controlar hechos como los que estamos viviendo, por eso solicitamos la colaboración de la Policía para que refuerce la seguridad exterior”, dijo.
Los casos
La preocupación de los padres surgió luego de que el pasado viernes se confirmara la muerte de Brenda Lizeth Ramos Urbina, estudiante de la carrera de Informática en ese instituto. Ella desapareció el 13 de julio y encontrada estrangulada esa misma noche. Actualmente está desaparecida Madison Jaeli Hernández. Los familiares de Hernández, quien cursa el primer año de Administración de Empresas, indicaron que desapareció el jueves 7 de julio.
Romeo Palma, subdirector del Intae, expresó a LA PRENSA que lo acontecido en las últimas semanas con estudiantes del centro es algo que se escapa de sus manos, ya que una vez que estos salen de las aulas lo que pueda llegar a suceder es ajeno al instituto.
José Carballo, director del José Trinidad Reyes (JTR), señaló que una situación parecida vivieron durante 2015 en el colegio, año en el que reportaron la desaparición y muerte de seis de sus alumnos, entre varones y mujeres.
