Tegucigalpa, Honduras.
El embajador de Honduras en Washington, Jorge Milla Reyes, asegura que no violó ningún reglamento al apoyar la gestión del traslado de su novia enferma en un vuelo privado solicitado a la Fuerza Aérea de Estados Unidos.
Ese polémico vuelo ha desembocado en una investigación sobre el supuesto abuso de autoridad y tráfico de influencias en el servicio exterior hondureño.
El vuelo fue solicitado a la Fuerza Aérea de EUA para trasladar desde Honduras a ese país a la novia del embajador en condición delicada de salud.
La versión fue confirmada por un funcionario en el Poder Ejecutivo, el que explicó que hay un convenio con Estados Unidos para usar este vuelo de emergencias, pero sin abusos.
“El avión no se alquiló, el embajador usó influencias y definitivamente esto se pudo usar para la necesidad de un migrante o una persona sin recursos. Pero la que se estaba muriendo era su prometida”, dijo a LA PRENSA el funcionario.
Milla Reyes le pidió a la Fuerza Aérea estadounidense que le trasladara a su novia que según el funcionario no se iba a negar ante la petición del embajador de Honduras.
El embajador explicó, según fuentes de Casa Presidencial, que toda la gestión la hizo la novia y que él solo entró al final del proceso.
Cooperación
LA PRENSA consultó al embajador Milla Reyes, asignado en Washington D.C. sobre el polémico vuelo privado, el que afirmó que nunca fue alquilado y más bien es un programa de cooperación.
“Es de cooperación humanitaria del Departamento de la Fuerza Aérea de EUA que usa un equipo de oxigenación pulmonar llamado Ecmo (Extracorporeal membrane oxygenation). Es un programa para ciudadanos de todo el mundo y solo está disponible para personas cuyo historial clínico lo requiera. En el caso que nos ocupa fueron los médicos hondureños que la trataron y recomendaron buscar ese equipo. Su familia lo hizo y calificó para acceder al programa. Yo ni siquiera sabía que existía este programa”, explicó Milla.
Sobre las supuestas influencias que utilizó, el diplomático fue enfático y dijo que su obligación es poner sus mejores esfuerzos cuando de resolver casos humanitarios se trate, de todos, no de uno en particular.
“Los funcionarios de EUA no responden a solicitudes de favores, son apegados a su manual. En este caso, la familia de la paciente había solicitado la asistencia del programa y tan pronto lo supe hice lo que hacemos en todos los casos de emergencias donde tenemos compatriotas involucrados”, agregó el diplomático, quien envió un correo pidiendo a la autoridad que considerara la solicitud.
“No violenté la ley”
El embajador confirmó que su prometida “estaba inconsciente en el hospital, con respiración asistida y perdiendo lentamente condiciones vitales. Muriendo lentamente”.
Al consultársele si está en riesgo su cargo por la gestión que realizó, afirmó que no, porque no ha violentado ninguna ley, reglamento o procedimiento.
“Claro que no. Hice lo que se ha hecho en todos los casos parecidos, pero mi puesto está en riesgo permanente.
Es un cargo complejo que obliga a tomar decisiones delicadas y en algún momento algo puede salir mal. Pero estoy aquí para hacer cosas, no para ver el cambio de las estaciones. En todo caso, eso es una decisión del presidente Hernández”, indicó el embajador.
Milla Reyes fue nombrado como embajador en EUA en 2014, en sustitución del diplomático de carrera Jorge Ramón Hernández Alcerro. Ni la Secretaría de Relaciones Exteriores ni la Casa Presidencial se han pronunciado al respecto.
“Lo que sucedió es que una compatriota nuestra estaba a punto de morir por falta de equipo médico, sus familiares supieron del programa y solicitaron. Como embajador hice como en todos los casos, apoyé esa solicitud. El programa aceptó a la paciente y la trasladó a EUA con los medios que ellos decidieron y de los que solo ellos disponen”, reiteró.
Milla Reyes aseguró que haría lo mismo por cualquier compatriota que lo necesite. En este caso fue su prometida la que solicitó al programa. Agregó que va a explorar las posibilidades de obtener un equipo Ecmo para algún hospital público en Honduras que salve vidas.
El embajador de Honduras en Washington, Jorge Milla Reyes, asegura que no violó ningún reglamento al apoyar la gestión del traslado de su novia enferma en un vuelo privado solicitado a la Fuerza Aérea de Estados Unidos.
Ese polémico vuelo ha desembocado en una investigación sobre el supuesto abuso de autoridad y tráfico de influencias en el servicio exterior hondureño.
El vuelo fue solicitado a la Fuerza Aérea de EUA para trasladar desde Honduras a ese país a la novia del embajador en condición delicada de salud.
| Polémica
Surgió cuando empleados de la embajada supuestamente denunciaron el abuso del embajador
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“El avión no se alquiló, el embajador usó influencias y definitivamente esto se pudo usar para la necesidad de un migrante o una persona sin recursos. Pero la que se estaba muriendo era su prometida”, dijo a LA PRENSA el funcionario.
Milla Reyes le pidió a la Fuerza Aérea estadounidense que le trasladara a su novia que según el funcionario no se iba a negar ante la petición del embajador de Honduras.
El embajador explicó, según fuentes de Casa Presidencial, que toda la gestión la hizo la novia y que él solo entró al final del proceso.
Es mi prometida. Yo no gestioné el vuelo, su familia lo solicitó al programa de asistencia humanitaria Jorge Milla Reyes, Eembajador de Honduras en EUA
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LA PRENSA consultó al embajador Milla Reyes, asignado en Washington D.C. sobre el polémico vuelo privado, el que afirmó que nunca fue alquilado y más bien es un programa de cooperación.
“Es de cooperación humanitaria del Departamento de la Fuerza Aérea de EUA que usa un equipo de oxigenación pulmonar llamado Ecmo (Extracorporeal membrane oxygenation). Es un programa para ciudadanos de todo el mundo y solo está disponible para personas cuyo historial clínico lo requiera. En el caso que nos ocupa fueron los médicos hondureños que la trataron y recomendaron buscar ese equipo. Su familia lo hizo y calificó para acceder al programa. Yo ni siquiera sabía que existía este programa”, explicó Milla.
Sobre las supuestas influencias que utilizó, el diplomático fue enfático y dijo que su obligación es poner sus mejores esfuerzos cuando de resolver casos humanitarios se trate, de todos, no de uno en particular.
“Los funcionarios de EUA no responden a solicitudes de favores, son apegados a su manual. En este caso, la familia de la paciente había solicitado la asistencia del programa y tan pronto lo supe hice lo que hacemos en todos los casos de emergencias donde tenemos compatriotas involucrados”, agregó el diplomático, quien envió un correo pidiendo a la autoridad que considerara la solicitud.
No he violentado ninguna ley, pero mi puesto está en riesgo permanente. Es una decisión del presidente Jorge Milla
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El embajador confirmó que su prometida “estaba inconsciente en el hospital, con respiración asistida y perdiendo lentamente condiciones vitales. Muriendo lentamente”.
Al consultársele si está en riesgo su cargo por la gestión que realizó, afirmó que no, porque no ha violentado ninguna ley, reglamento o procedimiento.
“Claro que no. Hice lo que se ha hecho en todos los casos parecidos, pero mi puesto está en riesgo permanente.
Es un cargo complejo que obliga a tomar decisiones delicadas y en algún momento algo puede salir mal. Pero estoy aquí para hacer cosas, no para ver el cambio de las estaciones. En todo caso, eso es una decisión del presidente Hernández”, indicó el embajador.
Milla Reyes fue nombrado como embajador en EUA en 2014, en sustitución del diplomático de carrera Jorge Ramón Hernández Alcerro. Ni la Secretaría de Relaciones Exteriores ni la Casa Presidencial se han pronunciado al respecto.
“Lo que sucedió es que una compatriota nuestra estaba a punto de morir por falta de equipo médico, sus familiares supieron del programa y solicitaron. Como embajador hice como en todos los casos, apoyé esa solicitud. El programa aceptó a la paciente y la trasladó a EUA con los medios que ellos decidieron y de los que solo ellos disponen”, reiteró.
Milla Reyes aseguró que haría lo mismo por cualquier compatriota que lo necesite. En este caso fue su prometida la que solicitó al programa. Agregó que va a explorar las posibilidades de obtener un equipo Ecmo para algún hospital público en Honduras que salve vidas.
