Centenares de internos del centro penal de San Pedro Sula están cambiando sus vidas a través del aprendizaje de diferentes oficios.
Con el apoyo de la Pastoral Penitenciaria de la Iglesia Católica hombres y mujeres han aprendido a hacer muebles, zapatos, hamacas, pinturas y hasta pan y muestran así que pueden cambiar.
Francisco Saavedra, coordinador de los internos, dice que quieren que la sociedad se de cuenta que pueden rehabilitarse y no ser una carga.
Claudia María Zepeda, administradora de la panadería a la que llamaron Liberpan dice que desean apoyo para poder ampliar su mercado y apelan al apoyo de la empresa privada para aumentar las ventas.
Este jueves realizaron una exposición para vender en las afueras del penal y mandarán sus productos también al Bazar de el Sábado expocentro.
Este jueves realizaron una exposición en las afueras del penal.
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Los reclusos han demostrado que tienen creatividad con los trabajos que elaboran.
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Hamacas, sillas y hasta respaldares de cama, ellos elaboran todo tipo de cosas.
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Las canastas son uno de los productos populares que tienen mucha venta.
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