Tegucigalpa, Honduras.
Aunque la mañana de ayer anunció que la integración de las cuatro salas la haría hasta el lunes, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Rolando Argueta, firmó su primer oficio PCSJ No.021-216 en el que estipula cómo trabajarán los 14 magistrados durante este año.
La presidencia de la Sala Constitucional quedó integrada por los magistrados Lidia Álvarez (presidenta), Jorge Zelaya, Edwin Ortez, Reyna Hércules y Jorge Abilio Serrano. En un año la ley dicta las rotaciones dentro de cada sala.
En la Sala Penal, Argueta nombró a José Olivio Rodríguez (coordinador), Rafael Bustillo y Alma Consuelo Guzmán. En la Sala de lo Civil integró a Reynaldo Cáceres (Castellanos), Miguel Pineda Valle y María Fernanda Castro.
“La integración de las salas es efectiva a partir del 12 de feberero de 2016 hasta el 12 de febrero de 2017”, dijo el presidente Argueta. Se espera que a partir del próximo lunes los magistrados ya comiencen a conocer los casos que maneja cada sala y además sean asignados como jueces naturales a varios procesos judiciales pendientes.
Expectativas
En su primer día de labores algunos de los magistrados expusieron sus expectativas para los próximos siete años después de haber pasado por un arduo proceso de postulación ante la Junta Nominadora y elección en el Congreso Nacional.
“Reitero que me he preparado toda la vida para llegar a ocupar este alto cargo. Debo señalar que dentro de mis expectativas está la aplicación de una justicia expedita e imparcial. Debemos separarnos de todo aquello que pueda generar un conflicto; aunque hay actividades que se desarrollan de manera conjunta con otras instituciones del Estado”, expresó la magistrada María Fernanda Castro.
La magistrada Reina Auxiliadora Hércules manifestó que asumió el reto muy conciente de la tremenda responsabilidad que eso conlleva.
“Quiero que toda la sociedad tenga la certeza que mis funciones van a estar siempre apegadas al principio de la legalidad, objetividad e imparcialidad”, dijo Hércules.
Aspiraciones conjuntas
El magistrado Wilfredo Méndez Romero también expuso sus aspiraciones como alto juez de Honduras junto a sus compañeros con los que compartirá el trabajo por varios años.
“Ningún hondureño, no importa su condición social, su género ni el color de su piel, su religión, se sienta excluido de poder ir en demanda de justicia a cualquiera de los órganos jurisdiccionales del país. El principio de igualdad imperará para aquellos que comparecen como partes en las diferentes acciones procesales”, afirmó Méndez.
De la misma manera, la magistrada Lidia álvarez le aseguró a la sociedad que se sienten con mucha satisfacción después del largo proceso por el que tuvieron que pasar para llegar a la Corte Suprema.
“Nuestras funciones estarán apegadas al principio de independencia y con más respeto a la Constitución y a la ley”, prometió álvarez, quien fue nombrada como presidenta de la Sala Constitucional, cargo estipulado por un año.
Aunque la mañana de ayer anunció que la integración de las cuatro salas la haría hasta el lunes, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Rolando Argueta, firmó su primer oficio PCSJ No.021-216 en el que estipula cómo trabajarán los 14 magistrados durante este año.
La presidencia de la Sala Constitucional quedó integrada por los magistrados Lidia Álvarez (presidenta), Jorge Zelaya, Edwin Ortez, Reyna Hércules y Jorge Abilio Serrano. En un año la ley dicta las rotaciones dentro de cada sala.
En la Sala Penal, Argueta nombró a José Olivio Rodríguez (coordinador), Rafael Bustillo y Alma Consuelo Guzmán. En la Sala de lo Civil integró a Reynaldo Cáceres (Castellanos), Miguel Pineda Valle y María Fernanda Castro.
“La integración de las salas es efectiva a partir del 12 de feberero de 2016 hasta el 12 de febrero de 2017”, dijo el presidente Argueta. Se espera que a partir del próximo lunes los magistrados ya comiencen a conocer los casos que maneja cada sala y además sean asignados como jueces naturales a varios procesos judiciales pendientes.
Expectativas
En su primer día de labores algunos de los magistrados expusieron sus expectativas para los próximos siete años después de haber pasado por un arduo proceso de postulación ante la Junta Nominadora y elección en el Congreso Nacional.
“Reitero que me he preparado toda la vida para llegar a ocupar este alto cargo. Debo señalar que dentro de mis expectativas está la aplicación de una justicia expedita e imparcial. Debemos separarnos de todo aquello que pueda generar un conflicto; aunque hay actividades que se desarrollan de manera conjunta con otras instituciones del Estado”, expresó la magistrada María Fernanda Castro.
La magistrada Reina Auxiliadora Hércules manifestó que asumió el reto muy conciente de la tremenda responsabilidad que eso conlleva.
“Quiero que toda la sociedad tenga la certeza que mis funciones van a estar siempre apegadas al principio de la legalidad, objetividad e imparcialidad”, dijo Hércules.
Aspiraciones conjuntas
El magistrado Wilfredo Méndez Romero también expuso sus aspiraciones como alto juez de Honduras junto a sus compañeros con los que compartirá el trabajo por varios años.
“Ningún hondureño, no importa su condición social, su género ni el color de su piel, su religión, se sienta excluido de poder ir en demanda de justicia a cualquiera de los órganos jurisdiccionales del país. El principio de igualdad imperará para aquellos que comparecen como partes en las diferentes acciones procesales”, afirmó Méndez.
De la misma manera, la magistrada Lidia álvarez le aseguró a la sociedad que se sienten con mucha satisfacción después del largo proceso por el que tuvieron que pasar para llegar a la Corte Suprema.
“Nuestras funciones estarán apegadas al principio de independencia y con más respeto a la Constitución y a la ley”, prometió álvarez, quien fue nombrada como presidenta de la Sala Constitucional, cargo estipulado por un año.
