Nueva York, Estados Unidos.
El hondureño Alfredo Hawit se declaró no culpable en una corte de Nueva York por los cargos que le acusa Estados Unidos en el escándalo de corrupción conocido como el “Fifagate”.
Estados Unidos trasladó al suspendido presidente de la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (Concacaf), y vicepresidente de la Fifa, a Nueva York, a tres días para que finalizara el plazo otorgado por las leyes suizas.
Ayer compareció ante el juez Robert Levy en una audiencia de primera vista en la que se le notificaron los 12 cargos por los que se le acusan y en donde se declaró no culpable.
Hawit quedó detenido en Estados Unidos y la posibilidad de salir en libertad bajo fianza se podrá definir en una nueva audiencia este día. Para lograr salir de la detención, Hawit deberá cancelar una fianza de cuatro millones de dólares.
La Fiscalía del Distrito Este de Nueva York señala a Hawit de haber recibido (de parte de sociedades de mercadotecnia deportiva) varios millones de dólares en sobornos a cambio de los derechos de comercialización y difusión de torneos de fútbol organizados en América Latina.
Enfermo
Hawit (64) llegó vestido de traje, pálido, fatigado y con aspecto enfermo, y siguió la audiencia con la ayuda de un intérprete. Fue su abogado Justin Weddle quien habló por él en un tribunal federal de Brooklyn, donde será juzgado por asociación delictiva, fraude y lavado de dinero, entre otros.
Su abogado afirmó que sufre “graves problemas de salud”, tiene una pancreatitis y necesita una dieta especial y que la pasó mal en la prisión de Suiza, adonde fue arrestado el 3 de diciembre, junto con el paraguayo Juan Ángel Napout, presidente de la Conmebol, a petición de Estados Unidos.
La Fiscalía federal de Nueva York ya adelantó, en una carta enviada al juez Levy, que pedirá una fianza de cuatro millones de dólares, de los cuales 500,000 serán en efectivo para que el acusado obtenga la libertad provisoria, advirtiendo que plantea “un serio riesgo de huida”.
Weddle pidió que Hawit cumpliera prisión domiciliaria monitoreado electrónicamente en casa de uno de sus hijos, en Miami, y que no se impusiera fianza. En total, las causas abiertas en Estados Unidos por el escándalo de corrupción en la Fifa, que estalló en mayo pasado y tuvo una segunda oleada de acusaciones en diciembre, incluyen a 39 personas, la mayoría altos dirigentes del fútbol del continente americano, y dos compañías de marketing.
Alfredo Hawit se había opuesto a su extradición a Estados Unidos en su primera audiencia ante la Policía cantonal de Zúrich, tras su arresto, pero el pasado 6 de enero de este año cambió de parecer.
El hondureño Alfredo Hawit se declaró no culpable en una corte de Nueva York por los cargos que le acusa Estados Unidos en el escándalo de corrupción conocido como el “Fifagate”.
Estados Unidos trasladó al suspendido presidente de la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (Concacaf), y vicepresidente de la Fifa, a Nueva York, a tres días para que finalizara el plazo otorgado por las leyes suizas.
Ayer compareció ante el juez Robert Levy en una audiencia de primera vista en la que se le notificaron los 12 cargos por los que se le acusan y en donde se declaró no culpable.
Hawit quedó detenido en Estados Unidos y la posibilidad de salir en libertad bajo fianza se podrá definir en una nueva audiencia este día. Para lograr salir de la detención, Hawit deberá cancelar una fianza de cuatro millones de dólares.
La Fiscalía del Distrito Este de Nueva York señala a Hawit de haber recibido (de parte de sociedades de mercadotecnia deportiva) varios millones de dólares en sobornos a cambio de los derechos de comercialización y difusión de torneos de fútbol organizados en América Latina.
Enfermo
Hawit (64) llegó vestido de traje, pálido, fatigado y con aspecto enfermo, y siguió la audiencia con la ayuda de un intérprete. Fue su abogado Justin Weddle quien habló por él en un tribunal federal de Brooklyn, donde será juzgado por asociación delictiva, fraude y lavado de dinero, entre otros.
Su abogado afirmó que sufre “graves problemas de salud”, tiene una pancreatitis y necesita una dieta especial y que la pasó mal en la prisión de Suiza, adonde fue arrestado el 3 de diciembre, junto con el paraguayo Juan Ángel Napout, presidente de la Conmebol, a petición de Estados Unidos.
La Fiscalía federal de Nueva York ya adelantó, en una carta enviada al juez Levy, que pedirá una fianza de cuatro millones de dólares, de los cuales 500,000 serán en efectivo para que el acusado obtenga la libertad provisoria, advirtiendo que plantea “un serio riesgo de huida”.
Weddle pidió que Hawit cumpliera prisión domiciliaria monitoreado electrónicamente en casa de uno de sus hijos, en Miami, y que no se impusiera fianza. En total, las causas abiertas en Estados Unidos por el escándalo de corrupción en la Fifa, que estalló en mayo pasado y tuvo una segunda oleada de acusaciones en diciembre, incluyen a 39 personas, la mayoría altos dirigentes del fútbol del continente americano, y dos compañías de marketing.
Alfredo Hawit se había opuesto a su extradición a Estados Unidos en su primera audiencia ante la Policía cantonal de Zúrich, tras su arresto, pero el pasado 6 de enero de este año cambió de parecer.
