La Virtud, Ocotepeque, Honduras.
La crisis energética está afectando a varias zonas de Honduras y una de ellas es Ocotepeque, adonde los apagones parecen infinitos, al extremo que llegan a quedar en la ciudad hasta dos días completos sin este servicio.
Según los habitantes de la zona, la situación es crítica y han llegado al extremo de tomar por “día bueno” los días que les cortan la energía seis horas.
“Por dar un ejemplo reciente, el jueves anterior no hubo suministro eléctrico durante más de 14 horas en Ocotepeque. Estamos siendo afectados gravemente. Se nos arruinan los productos, la clientela baja, tenemos que cerrar los negocios, hay que pagar planilla aunque no puedan trabajar los empleados, se tienen que usar plantas de energía eléctrica y eso dispara nuestros gastos de operación”, indicó Juan Carlos Polanco, presidente de la Cámara de Turismo en Ocotepeque. “Hemos estado sin energía hasta dos días”, afirmó.
Temporada alta
Polanco explicó que todo negocio es afectado de forma negativa por los apagones.
“Los hoteles, negocios y restaurantes no pueden atender a clientes con tarjetas de crédito ni facturar con sus sistemas electrónicos, las heladerías no pueden trabajar y pierden productos”, declaró.
El presidente de la Cámara de Turismo dijo que les preocupa que viene diciembre y continúa el problema de los apagones.
“La oscuridad fomenta la inseguridad. Viene la Navidad y eso nos hace estar en incertidumbre, porque en diciembre los negocios se tratan de recuperar, pero si no hay energía será un desastre”, señaló Polanco.
Daños
En Ocotepeque también denuncian que se están dañando masivamente artículos eléctricos por el voltaje irregular.
Fanny Santos, empresaria hotelera de la ciudad, es solo una de las tantas personas afectadas.
“Solo con un apagón esta semana se me quemaron siete televisores LCD en el hotel. La pieza para reparar cada uno cuesta L4,000, más la mano de obra, sale igual que comprarlos nuevos. Ese gasto es devastador. Eso pasa en muchos negocios y casas. En otros apagones también se me han quemado licuadoras, refrigerados y tres microhondas y la Enee no repone lo dañado”, manifestó Santos.
Afectados
Arnulfo Rodríguez, alcalde de La Virtud, Lempira, contó que los prolongados cortes de electricidad también les han causado pérdidas económicas y problemas a los habitantes del lugar.
“Los apagones nos están afectando severamente. El comercio, los talleres, las oficinas públicas, las clínicas y centros de salud, es incalculable lo que hemos perdido. Embutidos, productos lácteos, etcétera, se arruinan”, dijo Rodríguez. El alcalde de La Virtud expresó que varios días al mes pasan sin energía.
“Cada mes al menos 10 días pasamos sin energía. Cortan la energía desde las 7:00 am hasta las 6:00 am los días que hacen interrupciones”, aseguró.
Rodríguez agregó que “están abandonados”.
“Aquí si se va la energía el viernes las cuadrillas llegan hasta el lunes, porque dicen que los de la Enee que no les pagan horas extras.
Tampoco atienden las fallas en el suministro cuando ya no son horas de oficina. Además pasamos sin servicio y el cobro es más caro”, dijo.
La crisis energética está afectando a varias zonas de Honduras y una de ellas es Ocotepeque, adonde los apagones parecen infinitos, al extremo que llegan a quedar en la ciudad hasta dos días completos sin este servicio.
Según los habitantes de la zona, la situación es crítica y han llegado al extremo de tomar por “día bueno” los días que les cortan la energía seis horas.
“Por dar un ejemplo reciente, el jueves anterior no hubo suministro eléctrico durante más de 14 horas en Ocotepeque. Estamos siendo afectados gravemente. Se nos arruinan los productos, la clientela baja, tenemos que cerrar los negocios, hay que pagar planilla aunque no puedan trabajar los empleados, se tienen que usar plantas de energía eléctrica y eso dispara nuestros gastos de operación”, indicó Juan Carlos Polanco, presidente de la Cámara de Turismo en Ocotepeque. “Hemos estado sin energía hasta dos días”, afirmó.
Temporada alta
Polanco explicó que todo negocio es afectado de forma negativa por los apagones.
“Los hoteles, negocios y restaurantes no pueden atender a clientes con tarjetas de crédito ni facturar con sus sistemas electrónicos, las heladerías no pueden trabajar y pierden productos”, declaró.
El presidente de la Cámara de Turismo dijo que les preocupa que viene diciembre y continúa el problema de los apagones.
“La oscuridad fomenta la inseguridad. Viene la Navidad y eso nos hace estar en incertidumbre, porque en diciembre los negocios se tratan de recuperar, pero si no hay energía será un desastre”, señaló Polanco.
 Juan Orlando Hernández llegó ayer La Ceiba.
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En Ocotepeque también denuncian que se están dañando masivamente artículos eléctricos por el voltaje irregular.
Fanny Santos, empresaria hotelera de la ciudad, es solo una de las tantas personas afectadas.
“Solo con un apagón esta semana se me quemaron siete televisores LCD en el hotel. La pieza para reparar cada uno cuesta L4,000, más la mano de obra, sale igual que comprarlos nuevos. Ese gasto es devastador. Eso pasa en muchos negocios y casas. En otros apagones también se me han quemado licuadoras, refrigerados y tres microhondas y la Enee no repone lo dañado”, manifestó Santos.
Afectados
Arnulfo Rodríguez, alcalde de La Virtud, Lempira, contó que los prolongados cortes de electricidad también les han causado pérdidas económicas y problemas a los habitantes del lugar.
“Los apagones nos están afectando severamente. El comercio, los talleres, las oficinas públicas, las clínicas y centros de salud, es incalculable lo que hemos perdido. Embutidos, productos lácteos, etcétera, se arruinan”, dijo Rodríguez. El alcalde de La Virtud expresó que varios días al mes pasan sin energía.
“Cada mes al menos 10 días pasamos sin energía. Cortan la energía desde las 7:00 am hasta las 6:00 am los días que hacen interrupciones”, aseguró.
Rodríguez agregó que “están abandonados”.
“Aquí si se va la energía el viernes las cuadrillas llegan hasta el lunes, porque dicen que los de la Enee que no les pagan horas extras.
Tampoco atienden las fallas en el suministro cuando ya no son horas de oficina. Además pasamos sin servicio y el cobro es más caro”, dijo.
