San Pedro Sula, Honduras.
Los pobladores de las colonias Sitradima, Bosques de Jucutuma, Real del Campo II y San José del Boquerón sienten dolor de cabeza todas las mañanas que les toca transitar por la carretera de Ticamaya hacia el bulevar del este de San Pedro Sula porque en muchos tramos hay baches o montones de tierra inestables.
“Ya es demasiado, aquí vienen muchos aldeanos a llenar de tierra los agujeros para conseguir su dinerito; pero la lluvia hace que el problema empeore con el paso del tiempo”, expresa Ada López, vecina de Bosques de Jucutuma, quien pasa a diario por allí junto con su familia.
Cientos de vehículos corren el riesgo de impactar con otros por el tráfico que se crea en el intento de evadir los baches.
Según los transportistas de la zona, la última vez que pavimentaron la carretera fue hace más de dos años. El material con que lo hicieron no duró mucho. “El problema es que el material es muy débil y por aquí pasa cualquier cantidad de camiones, furgones y maquinaria que transporta azúcar. Por eso se daña fácil. Además, se dan vuelta esos camiones y quedan los hoyos que inician el problema”, explica Óscar Medina, motorista.
En esta temporada, el tránsito de camiones de carga aumenta y empeora el estado de la calle que conduce también a Choloma.
Delincuencia
Además del problema vial, los vecinos de dicho sector se quejan por la ola delictiva que les aqueja desde hace varios años.
En 2014 se registro la muerte de tres taxistas en el corredor hacia Ticamaya a causa de supuestos mareros que cobraban impuesto de guerra.
En los últimos días, los ciudadanos reportaron la aparición de dos damas que fueron secuestradas y violadas por desconocidos que luego de ultrajarlas las dejaron abandonadas en el desvío a la Rivera Hernández, cerca del predio de Tránsito.
“Varios delincuentes amedrentan a los pobladores de esa zona y la Policía hace operativos esporádicos”, comenta un docente de la zona.
En ese sentido, los pobladores piden a las autoridades que manden policías para que los resguarden durante las 24 horas.
Solicitan también la instalación de alumbrado público en el corredor.
Los pobladores de las colonias Sitradima, Bosques de Jucutuma, Real del Campo II y San José del Boquerón sienten dolor de cabeza todas las mañanas que les toca transitar por la carretera de Ticamaya hacia el bulevar del este de San Pedro Sula porque en muchos tramos hay baches o montones de tierra inestables.
“Ya es demasiado, aquí vienen muchos aldeanos a llenar de tierra los agujeros para conseguir su dinerito; pero la lluvia hace que el problema empeore con el paso del tiempo”, expresa Ada López, vecina de Bosques de Jucutuma, quien pasa a diario por allí junto con su familia.
Cientos de vehículos corren el riesgo de impactar con otros por el tráfico que se crea en el intento de evadir los baches.
Según los transportistas de la zona, la última vez que pavimentaron la carretera fue hace más de dos años. El material con que lo hicieron no duró mucho. “El problema es que el material es muy débil y por aquí pasa cualquier cantidad de camiones, furgones y maquinaria que transporta azúcar. Por eso se daña fácil. Además, se dan vuelta esos camiones y quedan los hoyos que inician el problema”, explica Óscar Medina, motorista.
En esta temporada, el tránsito de camiones de carga aumenta y empeora el estado de la calle que conduce también a Choloma.
Delincuencia
Además del problema vial, los vecinos de dicho sector se quejan por la ola delictiva que les aqueja desde hace varios años.
En 2014 se registro la muerte de tres taxistas en el corredor hacia Ticamaya a causa de supuestos mareros que cobraban impuesto de guerra.
En los últimos días, los ciudadanos reportaron la aparición de dos damas que fueron secuestradas y violadas por desconocidos que luego de ultrajarlas las dejaron abandonadas en el desvío a la Rivera Hernández, cerca del predio de Tránsito.
“Varios delincuentes amedrentan a los pobladores de esa zona y la Policía hace operativos esporádicos”, comenta un docente de la zona.
En ese sentido, los pobladores piden a las autoridades que manden policías para que los resguarden durante las 24 horas.
Solicitan también la instalación de alumbrado público en el corredor.
