Rescatar la niñez en situación de calle es el propósito del proyecto Catrachos al Cambio que pretende crear un centro de desintoxicación en la ciudad este año.
Cerca de 40 menores que han hecho de las calles su hogar están siendo apoyados por este programa que les ofrece alimentación y recreación; sin embargo, no cuentan con un espacio para terapias.
Según las estadísticas que maneja el personal de Catrachos al Cambio, el 95 por ciento de los menores que deambulan en las calles tienen adicción por las drogas sicotrópicas.
Lo lamentable es que los afectados son niños y jóvenes de entre los 10 y 18 años.
“No se pueden desintoxicar porque no hay un centro donde albergarlos y darles terapia para que ellos puedan recuperarse”, expresó Yvette Aramendía, directora de los Programas Sociales Municipales.
Presentan plan
El proyecto para rescatar a los menores fue presentado a la Corporación Municipal pero se requerían fondos del Banco Interamericano del Desarrollo, BID.
“El BID nos pidió que iniciemos de nuevo los trámites y lo estamos haciendo. No hemos parado de trabajar”, manifestó Aramendía.
Para hacer los planos del centro se cuenta con el apoyo de la carrera de arquitectura de la Universidad de SPS.
Para este proyecto hay disponible un espacio en el terreno ubicado en la 20 calle, en el predio donde también está la Policía Municipal.
Ahí se pretende construir una área especial de desintoxicación de jóvenes con área de salud ocupacional para actividades recreativas.
“Aún se está trabajando en el presupuesto, creemos que estará listo en los próximos días. Lo que sí es seguro es que será de bajo costo”, señaló.
En el centro habrá espacio para desintoxicar a 10 menores y dar atención a unos 40 o 50 con terapias.
“No hay ninguna clínica de desintoxicación para niños en Honduras, ya tenemos un protocolo médico para tratar a los menores”, indicó Aramendía.
Los menores en situación de calle son beneficiados con el programa a través de clases de alfabetización por las mañanas y por las tardes terapia grupal, deportes y alimentación.
“Necesitamos el centro porque los menores regresan a las calles sin opciones a mejorar su situación”, agregó.
Ayudan a indigentes
En el mismo predio donde se busca levantar esta obra, las autoridades municipales contemplan construir un dormitorio para indigentes.
Lo que pretenden es que las personas que deambulan en la calle tengan un lugar donde dormir, comer y bañarse.
Ambas obras pretenden levantarse este año y contarán con el apoyo de la municipalidad de San Pedro Sula.
