Las investigaciones del accidente del Airbus 320 de Taca en el aeropuerto de Toncontín establecieron que la responsabilidad recae en el piloto César D’Antonio por haber tomado la decisión de aterrizar en condiciones no apropiadas en esos momentos, publicó El Salvador.com.
El director ejecutivo de la Autoridad de Aviación Civil de El Salvador, René Rodríguez, reveló ayer las conclusiones de las pesquisas del accidente aéreo que dejó cinco personas muertas y ochenta heridos el 30 de mayo de 2008.
Rodríguez declaró que “lo equivocado aquí fue la decisión de aterrizar y esa decisión es del piloto al mando, aunque la torre de control le dé una indicación de aterrizar”.
El ejecutivo sostuvo que si se considera que las condiciones son demasiado peligrosas, “el piloto al mando está en su decisión de no aterrizar por la seguridad de los pasajeros”.
En el caso del accidente en Honduras, Rodríguez dijo que la torre de control le aprobó el aterrizaje, pero le advirtió de las condiciones húmedas de la pista.
El director de Aviación Civil de El Salvador libró a la aerolínea Taca de toda responsabilidad en el accidente.
Taca analiza informe
En un comunicado, Taca Airlines dijo que “es respetuosa de las conclusiones de la investigación realizada para conocer las causas probables del accidente del vuelo 390, ocurrido el 30 de mayo de 2008 en el aeropuerto Toncontín de Tegucigalpa, Honduras, informadas por el director de la Autoridad de Aviación Civil de El Salvador, en su calidad de coordinador de la comisión investigadora”.
El documento informa que la aerolínea analiza los contenidos en lo que se refiere a los principales hallazgos de la indagación, la causa probable y los factores que contribuyeron con el accidente. También analizará ampliamente las recomendaciones planteadas.
La aerolínea señala que “cabe mencionar que desde el momento del suceso, Taca Airlines inició su propia investigación de los hechos y fortaleció los aspectos operacionales desde y hacia el aeropuerto Toncontín; aspectos que hoy coinciden con las recomendaciones contenidas en las citadas conclusiones”.
A propósito de las investigaciones, Claudia Arenas Bianchi, directora de Comunicaciones de Taca, expresó: “Si bien la investigación ha terminado con la presentación de este informe, quedan presentes aspectos que nos siguen preocupando en la aerolínea, como el dolor que el accidente produjo a muchas familias, incluidas las del personal de Taca, así como la recuperación física y emocional de las personas que todavía no se han restablecido totalmente”.
Señaló que por ello, desde el primer momento, “nuestra prioridad fue atender los aspectos relacionados con los casos de pérdidas humanas, de salud y materiales de las personas que viajaban en el avión o que se encontraban en tierra”.
La ejecutiva de Taca reconoció las labores de apoyo de miembros de la comunidad hondureña y el personal de las áreas de la empresa para atender la emergencia en todos sus aspectos.
