San Pedro Sula, Honduras
“Les ofrecemos a los hondureños trabajar por un Estado con equilibrio y equidad, además de una distribución más justa de las riquezas”, respondió Andrés Pavón, candidato presidencial de Faper-UD (Frente Amplio del Pueblo en Resistencia y Unificación Democrática), al preguntarle sobre su plan de gobierno en una entrevista concedida a Diario LA PRENSA.
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Sobre la Asamblea Nacional Constituyente, el presidenciable dijo que está de acuerdo con consultar al pueblo sobre algunos asuntos, pero aclaró que con eso no se iba a paliar el hambre de los hondureños, por lo que no es una prioridad para él.
-¿En qué basa su campaña política?
En tres ejes: seguridad humana, salud y mejorar el sistema de educación. La intención es desarrollar políticas públicas donde el ser humano se vuelva la prioridad del Estado. Para esto es necesario aproximar las instituciones del Gobierno a la comunidad con el fin de que el pueblo asuma un papel protagónico y que él mismo se encargue de supervisar y evaluar el desempeño de la acción estatal en cada zona.
-¿Cómo espera convencer a la gente de que vote por Faper-UD?
Este es un buen momento para que el pueblo reflexione que aún hay solución y el remedio se llama Andrés Pavón. Tenemos más gente en el norte que el Partido Alianza Patriótica y que el Partido Anticorrupción. Hemos ido ganando terrenos y esperamos atraer más votantes en las semanas que nos faltan. El problema que tenemos en este momento es que el hondureño que vive en el sector marginal quiere que los políticos, cuando lo visitan, le lleven algo y no tenemos dinero. El que sí tiene les hace una casa en cinco días, aunque sea de madera, y luego paga más en publicidad que lo que costó las casas que hizo. Lamentablemente, la gente cree que ese candidato es el que va a resolver los problemas que tienen.
-¿Cómo combatiría la delincuencia?
Dividiremos el país en circuitos comunitarios, los cuales incluirán de 25 a 35 barrios. Hablamos de comunitarismo en materia de seguridad y eso solo se logra si la Policía está cerca de la comunidad. Además se deben mejorar las condiciones de los policías para evitar que caigan en la corrupción. Somos del criterio que si los niveles de inseguridad son muy altos, como en este momento, cuando se registran 85 homicidios por cada 100 mil habitantes, los militares deberán seguir en las calles, pero será necesario monitorear si hay un descenso de muertes, pues, en caso contrario, eso nos diría que solo estamos gastando con la medida.
-¿Qué propone para hacer más efectivo el sistema de educación?
Comenzaremos con poner Internet en lugares donde los jóvenes puedan hacer sus tareas e instalar quioscos para que las impriman, todo de forma gratuita. Además calificaremos y capacitaremos a los docentes porque no es posible que a estas alturas no puedan usar una computadora.
La crisis en educación es grande. El 65% de la infraestructura de los 32 mil centros escolares que hay se encuentran en pésimo estado. Para resolver eso se ocupan 13 mil millones de lempiras. Por otro lado, Honduras gasta en combatir la corrupción más de 40 mil millones, según el Foro Social de la Deuda Externa (Fosdeh). Si combatimos la corrupción, ese dinero quedará para otros proyectos como el de educación. Somos el partido con menos personas señaladas por la Dirección Ejecutiva de Ingresos como deudores públicos; solo cinco tuvieron problemas y cuatro de ellos los resolvieron porque las deudas eran de cinco mil lempiras. Hay candidatos de otros partidos que tenían deudas arriba de los 100 millones de lempiras. Lo anterior solo refleja que en nuestra línea política no queremos corruptos ni con sus socios.
-¿Cómo piensa sanear la economía del país?
Existe una deuda de 165 mil millones de lempiras, entre la externa y la interna, el gasto público anda por 86 mil millones de lempiras para este año y tenemos una recaudación fiscal que ronda los 66 mil millones de lempiras, provocando un déficit de más de 14 mil millones de lempiras. Sabemos que financieramente este país está en crisis y para reducirla tenemos que generar un control del gasto y, aunque las alcaldías tienen independencia, estas seguramente van a contribuir económicamente con el Gobierno para salir de la crisis.
Otra medida es que ningún empleado público va a ganar más de seis salarios mínimos. Si eso pasa, será un abuso de autoridad. Eso nos va a reducir el gasto. Minimizaremos el costo de la factura petrolera. Tenemos estudios que establecen que creando sistemas de energía renovable o biocombustible reduciremos la factura en 10%, lo que estaría generándole al país mejores oportunidades mediante un control más equitativo del presupuesto nacional. A largo plazo proponemos la construcción del ferrocarril interoceánico. Con todo esto pensamos que de 8 a 12 años llevaría recuperar las finanzas del país. Le apostamos al socialismo participativo. No estamos hablando de un socialismo que viene a tener control de los medios de producción; estamos hablando de un modelo donde el Estado simplemente es un ente regulador del sistema productivo. Hablamos de la inversión público-privada, pero el concepto de nosotros es diferente porque el 50% será para el pueblo, 30% del empresario y 20% del Estado.
-En sus visitas a los departamentos, ¿cuál ha detectado que es la mayor preocupación de la gente?
El desempleo. La población económicamente activa anda arriba de las 3,800,000 personas. De esas, más de un millón no tiene empleo. Es una tasa altísima. El resto de la población vive de una economía del rebusque, no controlada por el Estado, lo que provoca evasión fiscal. Esta economía informal muchas veces es utilizada por algunos sectores para traficar con productos que entran al país sin regulación.
-¿Estaría de acuerdo con una Constituyente?
No queremos reformar la Constitución para quedarnos en el poder, aunque seremos buenos gobernantes, lo que deseamos es que el partido continúe gobernando en el marco de la alianza Faper-UD.
Creemos en la participación del pueblo, pero hay que decirle al pueblo que la Constituyente no le va a resolver el problema del hambre, de la vivienda ni de la educación. Es más un pacto político.
-¿Quién inició el pleito político, Salvador Nasralla o usted?
Salvador Nasralla es un incidente político. Después del 24 de noviembre desaparecerá. Hemos tenido problemas en el marco del protagonismo. Me sacó la tarjeta roja el otro día, por eso le mandé hacer la tarjeta rosada con un payaso atrás.
Él comenzó con las acusaciones cayendo en la calumnia y difamación, pues decía que los nacionalistas nos había dado siete millones de lempiras por vender el partido Faper-UD, que fuimos cómplices de la elección del Fiscal General, que estábamos coludidos en la creación de la Policía Militar y comenzó a decirnos de todo, dejándonos tres opciones: la primera, ir al Ministerio Público a pedir que él probara eso, pero al final nos pareció una niñería en asuntos políticos, ya que, si nos metimos en esto, debemos tener tolerancia; la otra se la dejábamos a Dios o rompíamos el silencio y decidimos hablar. Lo que hicimos fue reaccionar. La población se inquietó mucho por la famosa frase de que si le apostábamos al circo nos iba a llevar, lo que ustedes ya han escuchado, y eso me lo aplauden algunos sectores y otros me condenan de vulgar.
Hasta ahora, un sicólogo nos dijo cuál era el problema que había. Resulta que hay tres candidatos más jóvenes. El menor es Juan Orlando Hernández, lo sigue el del Pinu y luego yo, pero el del Pinu no le parece, dice que es buena gente.
Y llegamos a la conclusión de que hay una especie de platonismo de Salvador hacia Juan Orlando y Andrés Pavón, un amor platónico que no ha resuelto y eso no es cuestionarle la hombría a Salvador.
-¿Tiene algún tipo de amistad política con Juan Orlando Hernández?
Solo lo he tratado cuatro veces y en política lo he visto ocasionalmente en algunos foros. Nunca me ha atacado; sin embargo, ataco el sistema que él defiende, pero como persona merece mis respetos.
Lo mismo me pasa con Xiomara Castro, pues le tengo cierta simpatía y cariño, pero estoy en contra de la intención de querer presentarse como una imagen nueva cuando son parte de la tradición. Romper la tradición significa no votar por los partidos Liberal, Nacional y Libre.
Puntos de vista
Delincuencia El político dijo que, en Honduras, 88 mil personas han perdido la vida desde 1990 hasta la fecha, 55 mil mujeres viudas, 200 mil huérfanos, 45 mil delincuentes que matarán. Esta situación la ha generado el modelo de democracia “que nos han vendido. Queremos revertir la situación”, agregó.
Representantes “Se necesitan 64 mil personas entre UD y Faper para representar en las mesas. Se hizo el mapeo y se tienen 42 mil capacitados. Nos faltan 20 mil. Estamos trabajando en el sector norte, donde más necesitamos gente. Nos faltan representantes en Cortés, Yoro, Colón y Atlántida”.
Salarios Pavón dijo que reducirá el salario de los empleados públicos, “creo que este no debe pasar de seis salarios mínimos. Esta cantidad le permite a la gente vivir decorosamente, pero el problema es que aquí hay funcionarios que ganan más de 200 mil lempiras. Eso es un robo al pueblo”.
Los Planes
Seguridad
Reducir Andrés Pavón asegura que dará prioridad a reducir la impunidad en el país, la cual actualmente es del 98%, según el candidato.
Educación
Seguimiento Consultará al pueblo para que decida si quiere a Marlon Escoto como ministro y mejorar los centros de estudio.
Empleo
Tecnología Se instalará Internet gratis en los lugares donde los jóvenes puedan hacer sus tareas e imprimir gratuitamente sus trabajos.
Protección social
Agilizar Es necesario que los trabajadores gocen de un buen servicio de salud, pues pagan por eso, pero lamentablemente no es tan efectivo.
Salud
Hospitales Comenzarán haciendo el hospital de Comayagüela e impulsando la atención primaria. Tienen apoyo de otros países.
EconomÍa
Gastos Quieren minimizar el gasto de la factura petrolera creando sistemas de energía renovable o de biocombustible.
Seguridad jurídica
Mejorar Se debe ofrecer a la empresa privada extranjera y nacional un ambiente de seguridad.
