Yoro, Honduras.
La muerte de 17 personas en un accidente vial en el departamento de Yoro pintó de tragedia el feriado de la semana morazánica que hasta las 10:30 am del viernes transcurría con normalidad.
El bus de la empresa Transportes Garmendia, marca Toyota Coaster, placa AAL 0083 que cubría la ruta entre la aldea La Trinidad de Yorito y Yoro, se movilizaba a esa hora sin mayores inconvenientes.
“Yo no sé qué pasó, solo supe que el bus se dio vuelta”, recordó una de las sobrevivientes segundos después del choque del bus y una unidad del Cuerpo de Bomberos de Yoro a inmediaciones del sector de Platanares, en el desvío de Yorito, departamento de Yoro.
La mirada de la mujer, aún perdida por el impacto que hizo volcar tanto el bus como el camión, le impedía entender que en ese instante nueve personas (tres niños, dos hombres y cuatro mujeres) habían fallecido. “Murieron tres miembros de una familia, a las demás personas no las conozco”, decía nerviosa.
Los primeros cuerpos de socorro llegaron al lugar, así como varios habitantes del sector para intentar ayudar a los 21 heridos.
Los minutos eran vitales y mientras se trataba de salvar vidas, las ambulancias y carros particulares empezaban el traslado de los afectados a los hospitales públicos de Yoro y El Progreso.
Una cruda realidad recibía a los familiares de las víctimas que llegaban al lugar a la espera de un milagro.
Llanto, lamentos y rabia eran algunos de los sentimientos que acompañaban la desolación de aquellos que encontraban sin vida a sus parientes.
Laureano Gómez, un reconocido dirigente campesino de la zona, y Cresencia Rodríguez fueron los primeros nombres que trascendieron de los desafortunados en el accidente, y a ellos poco a poco se fueron sumando otros 15 identificados a lo largo de un viernes trágico.
En la lista de muertos en el sitio figuraban cinco miembros de una misma familia, entre ellos los pastores José de la Cruz Aguilar y su esposa Digna Elba Cabrera de Aguilar, su nuera Merlyn Contreras y los hijo de ésta identificados como Merlyn Rocío y Ángel Geovany, todos residentes en el sector de Las Lomitas.
A ellos se sumaban tambien los nombres de otras cinco personas que perecieron en diferentes hospitales cercanos.
El traslado
Las autoridades de socorro en el lugar iniciaron el traslado de los heridos más graves en helicóptero al hospital Mario Rivas de San Pedro Sula. El primer vuelo llegó a eso de la 1:00 pm con cuatro heridos y casi dos horas más tarde se conoció que tres de ellos, todos menores de edad, habían perdido la vida. Con ellos se elevó a 17 el número de víctimas por el accidente.
Un segundo helicóptero arribó con tres afectados más a eso de las 4:00 pm. Los trasladados eran Erick Francisco Figueroa (21), conductor de la unidad de bomberos, Eli Urbina (15) y Maycol Antonio Soto (16).
Derecho de vía
Jorge Alberto Rodríguez, vocero de la Policía, dijo que según el informe de Tránsito la unidad del Cuerpo de Bomberos le quitó el derecho de vía al bus de la empresa Garmendia.
Denis Garmendia, dueno del bus, relató que “el ayudante dijo que los bomberos se fueron de lado al llegar a la curva y como venían a exceso de velocidad perdieron el control y por eso se estrellaron”. Lamentó la muerte de los pasajeros que eran sus clientes y vecinos de las aldeas La Trinidad y Las Lomitas.
El coronel de bomberos, Reynaldo Mejía, dijo que según testigos fue el bus el que quiso rebasar en la curva a otro carro y le quitó el derecho de vía a la unidad que iba a un puesto de socorro de la aldea La Trinidad para dar atención en el feriado.
La muerte de 17 personas en un accidente vial en el departamento de Yoro pintó de tragedia el feriado de la semana morazánica que hasta las 10:30 am del viernes transcurría con normalidad.
El bus de la empresa Transportes Garmendia, marca Toyota Coaster, placa AAL 0083 que cubría la ruta entre la aldea La Trinidad de Yorito y Yoro, se movilizaba a esa hora sin mayores inconvenientes.
“Yo no sé qué pasó, solo supe que el bus se dio vuelta”, recordó una de las sobrevivientes segundos después del choque del bus y una unidad del Cuerpo de Bomberos de Yoro a inmediaciones del sector de Platanares, en el desvío de Yorito, departamento de Yoro.
La mirada de la mujer, aún perdida por el impacto que hizo volcar tanto el bus como el camión, le impedía entender que en ese instante nueve personas (tres niños, dos hombres y cuatro mujeres) habían fallecido. “Murieron tres miembros de una familia, a las demás personas no las conozco”, decía nerviosa.
Los primeros cuerpos de socorro llegaron al lugar, así como varios habitantes del sector para intentar ayudar a los 21 heridos.
Los minutos eran vitales y mientras se trataba de salvar vidas, las ambulancias y carros particulares empezaban el traslado de los afectados a los hospitales públicos de Yoro y El Progreso.
Una cruda realidad recibía a los familiares de las víctimas que llegaban al lugar a la espera de un milagro.
Llanto, lamentos y rabia eran algunos de los sentimientos que acompañaban la desolación de aquellos que encontraban sin vida a sus parientes.
Laureano Gómez, un reconocido dirigente campesino de la zona, y Cresencia Rodríguez fueron los primeros nombres que trascendieron de los desafortunados en el accidente, y a ellos poco a poco se fueron sumando otros 15 identificados a lo largo de un viernes trágico.
En la lista de muertos en el sitio figuraban cinco miembros de una misma familia, entre ellos los pastores José de la Cruz Aguilar y su esposa Digna Elba Cabrera de Aguilar, su nuera Merlyn Contreras y los hijo de ésta identificados como Merlyn Rocío y Ángel Geovany, todos residentes en el sector de Las Lomitas.
A ellos se sumaban tambien los nombres de otras cinco personas que perecieron en diferentes hospitales cercanos.
El traslado
Las autoridades de socorro en el lugar iniciaron el traslado de los heridos más graves en helicóptero al hospital Mario Rivas de San Pedro Sula. El primer vuelo llegó a eso de la 1:00 pm con cuatro heridos y casi dos horas más tarde se conoció que tres de ellos, todos menores de edad, habían perdido la vida. Con ellos se elevó a 17 el número de víctimas por el accidente.
Un segundo helicóptero arribó con tres afectados más a eso de las 4:00 pm. Los trasladados eran Erick Francisco Figueroa (21), conductor de la unidad de bomberos, Eli Urbina (15) y Maycol Antonio Soto (16).
Derecho de vía
Jorge Alberto Rodríguez, vocero de la Policía, dijo que según el informe de Tránsito la unidad del Cuerpo de Bomberos le quitó el derecho de vía al bus de la empresa Garmendia.
Denis Garmendia, dueno del bus, relató que “el ayudante dijo que los bomberos se fueron de lado al llegar a la curva y como venían a exceso de velocidad perdieron el control y por eso se estrellaron”. Lamentó la muerte de los pasajeros que eran sus clientes y vecinos de las aldeas La Trinidad y Las Lomitas.
El coronel de bomberos, Reynaldo Mejía, dijo que según testigos fue el bus el que quiso rebasar en la curva a otro carro y le quitó el derecho de vía a la unidad que iba a un puesto de socorro de la aldea La Trinidad para dar atención en el feriado.
