25/04/2024
02:29 AM

Compran botes de plástico y los convierten en escobas

Durante 9 años, la empresa Terra Polyester, con fábricas en Choloma, Cortés, ha captado varios miles de toneladas de plástico y las ha transformado en productos exportables.

    San Pedro Sula, Honduras

    En la calle son basura, en los ríos o en las playas, una amenaza contra la vida marina, pero en las manos de Edwin Contreras, los botes y otros recipientes de plástico son materia prima para fabricar escobas, trapeadores y hasta camisetas de equipos de fútbol.

    20,000
    toneladas métricas
    Terra Polyester, fundada en 2009, tiene capacidad para reciclar 20,000 toneladas métricas de plástico al año.
    Contreras es el jefe de compras de Terra Polyester, una empresa que convierte mensualmente más de 200 toneladas de desechos de tereftalato de polietileno (PET) hasta en materia textil para la fabricación de ropa en Estados Unidos y Europa.

    “Encontrar botes de plástico, es encontrar dinero. Hace poco anduve en un pueblo pintoresco y recogí como diez botellas de plástico para reciclarlas en esta empresa”, dice. “La mayor parte de los hondureños desconocen el valor que tienen los botes de plástico y el problema que causan si estos llegan al mar”.

    Contreras, quien siempre se encuentra caminando entre inmensas montañas de recipientes de diferentes tamaños y colores, es el primer eslabón de la cadena que convierte la basura despreciada por los hondureños en productos exportables por Terra Polyester.

    En esta empresa, los trabajadores, como Contreras compran los botes de plástico, los lavan con soda cáustica y trituran hasta convertirlos en pequeñas hojuelas que tienen como destino diferentes mercados.

    “La hojuela puede ser exportada o es convertida en fibra de poliéster, escobas y trapeadores”, explica Christian Enamorado, gerente de logística de la compañía situada en una zona libre de Choloma, Cortés.

    La empresa fabrica fibra textil que exporta a EEUU.
    Las botellas de PET, una vez convertidas en pequeñas hojuelas, los trabajadores de Terra Polyester las someten a un un proceso industrial de extrusión para fabricar filamento textil.

    Cerca de las máquinas fabricantes y alisadoras, los empleados estiban los fardos del poliéster que envían al exterior a las manufactureras de tejidos de varios países.

    “Nosotros vendemos el poliéster a Estados Unidos y Europa. Allá fabrican los tejidos y después la ropa. Nosotros no sabemos cuáles empresas confeccionan la ropa”, aclara Enamorado.

    Sin embargo, cita como ejemplo que recientemente el club de fútbol Real Madrid de España anunció que sus jugadores vestirán en la temporada 2018/2019 una camiseta hecha con materia prima derivada de los botes de plástico.

    El Real Madrid ha tomado esta decisión para colaborar con 4Ocean, una empresa de Estados Unidos que promueve la eliminación de la basura plástica de los océanos.

    Charis Becker Gutiérrez, compañero de trabajo de Contreras y Enamorado, mientras observa la fibra de poliéster color verde, dice que increíblemente “todo esto se puede hacer con los botes de plástico, pero muchas personas no saben que esto es dinero”.

    “Esta fibra es color verde porque la hicimos con botellas de refrescos color verde”, dice.

    Terra Polyester, ubicada cerca de los peajes de San Pedro Sula, además de la nave donde transforma los botes en poliéster, cuenta con otra sección donde, gracias a la magia industrial, muele los tapones de diferentes colores de los refrescos y los convierte en base de las escobas y trapeadores que los hondureños compran en los supermercados.
    “Para fabricar una base de trapeador, necesitamos 50 tapones”, dice otro empleado en el momento que prepara las máquinas.

    Crecimiento
    En 2015, los inversionistas de Terra Polyester decidieron adquirir más tecnología para crear una industria vertical que ahora les permite fabricar desde filamento hasta el marcado del producto final: escobas y trapeadores.
    En la fabricación de las bases de escobas y trapeadores, los trabajadores de Terra Polyester utilizan PET y HDPE (High Density Polyethylene, polietileno de alta densidad) que extraen de los botes de leche, jabón líquido, champú y productos cosméticos desechados por los consumidores.

    En las cabezas de las escobas, por medio de una máquina insertan las cerdas plásticas que cobran diferentes colores por los tintes industriales que aplican.

    Terra Polyester tiene capacidad instalada para procesar al mes más de 1,500 toneladas de botes de plástico, tanto de PET y HDPE, sin embargo, no logra obtener toda la materia prima en el mercado local.

    “Compramos botes desechables en Honduras y hasta tenemos que importar de otros países. Nosotros tenemos capacidad para comprarle a los países de Centroamérica”, dice Enamorado.

    Terra Polyester, una empresa de inversionistas hondureños y extranjeros, y todos los trabajadores se han propuesto “ayudar a limpiar el mundo para tener un mejor futuro”, dice Contreras. “Cuando mis amigos me preguntan cómo estoy, siempre les respondo que limpiando el mundo”.

    En esta empresa, los empleados están convencidos de que los hondureños deben “aprender a reciclar para evitar que el plástico llegue a los mares” y afecte la vida marina.

    Charis Becker Gutiérrez muestra poliéster hecho con botes verdes.
    Utila tendrá tres calles de concreto y botes de plástico

    Utila, la isla más pequeña de Islas de la Bahía, le está dando el ejemplo a Honduras al pavimentar sus calles con concreto y plástico molido obtenido de las botellas desechables que llegan a través del mar y por medio de la actividad comercial.

    Troy Bodden, alcalde de Utila, le informó a LA PRENSA que la primera calle que pavimentaron mide 180 metros de longitud por 3.5 metros de ancho y la segunda es de 300 metros de largo por 3.5 metros de ancho.

    Causas
    Los hondureños deben reciclar: Si los hondureños no reciclan y lanzan los desechos de plástico a los ríos y las calles ponen en riesgo el Sistema Arrecifal Mesoamericano, el arrecife transfronterizo más grande del mundo. Este se encuentra en el Mar Caribe.
    “La tercera calle (de 500 metros) será comenzanda entre la primera y segunda semana de octubre”, dijo.La Municipalidad de Utila utiliza una mezcla compuesta por 28% plástico molido y 78 de concreto.
    Al utilizar plástico molido, la Municipalidad ejerce una doble acción: frena la contaminación del mar y ahorra dinero porque compra menos material de construcción.

    “No tenemos definido una cantidad de kilómetros a pavimentar. Comenzamos recogiendo todo el plástico que ingresa a la isla, también la basura que trae la marea a la playa. Recolectamos plástico en la playa y el plástico que viene en los barcos cargueros”, explicó.

    Bodden dijo que la Municipalidad “ha creado bastante conciencia en las escuelas y cayitos de Utila, y en toda la isla las personas recolectan y embolsan las botellas que entregan en el centro”.

    Con PET y HDPE fabrican los trapeadores y escobas.
    los hondureños deben reciclar:
    Si los hondureños no reciclan y lanzan los desechos de plástico a los ríos y las calles ponen en riesgo el Sistema Arrecifal Mesoamericano, el arrecife transfronterizo más grande del mundo. Este se encuentra en el Mar Caribe.