25/04/2024
11:19 PM

Tres meses sin agua tienen vecinos de la San Juan de San Pedro Sula

Una constructora rompió un tubo principal y desde entonces no reciben el líquido como corresponde, denuncian

    San Pedro Sula, Honduras

    Preocupados por un posible brote de enfermedades producto de la falta de agua están más 30 familias de la zona 3 de la colonia San Juan.

    Los pobladores están molestos, ya que permanecen sin el vital líquido desde hace tres meses cuando comenzaron los trabajos de construcción de un quinel ubicado a un costado de la colonia.

    “Hemos enviado muchas solicitudes a las autoridades de Aguas de San Pedro, pero siempre nos dicen que nos van a resolver y ni siquiera llegan a nuestra colonia a verificar el problema”, contó Dennis Mejía morador de la San Juan.

    Indicó que el servicio solo les llega por un par de horas en la noche. “Tenemos que desvelarnos para recolectar un poco de agua que nos sirva, tan siquiera, para lavar los platos o usarla en el inodoro, comentó en tono molesto el poblador.

    Expresó que debido a la escasez se han visto en la necesidad de acarrear agua de las colonias aledañas y en casos extremos de comprarla a carros cisterna a costos elevados.

    Mejía contó que tiene más de siete años de vivir en el sector y jamás había sentido un racionamiento de agua a esos niveles.

    Claudia Méndez, quien también es afectada por la falta de agua, explicó que el racionamiento se debe a que la empresa encargada de la construcción del canal de alivio, rompió el tubo madre que abastece a la zona de la San Juan hace tres meses. “Desde que se rompió el tubo estamos sufriendo la falta de agua, por lo que le pedimos a la concesionaria que nos resuelva lo más pronto posible esta situación porque ya estamos cansados de gastar de nuestras bolsas para comprar agua a precios elevados”, dijo. Iveth Herrera, pobladora del sector expresó que no es posible que las autoridades de Aguas de San Pedro los tengan sufriendo por la falta de agua.

    “No es justo que tenga que buscar fuera de mi casa donde lavar hasta los pepes de mis hijos, estamos viviendo una calamidad por la falta del vital líquido, dijo en tono molesto la vecina.

    También aprovechó para hacer un llamado a la Enee para que les cambie varias lámparas que permanecen quemadas desde hace dos años. “Esperamos que las autoridades de la estatal se apiaden de nosotros y nos cambien los bombillos”.