Tegucigalpa, Honduras.
El accidente del martes de la aeronave comercial Gulfstream G200 en el aeropuerto Toncontín fue en el mismo sitio donde hace 10 años se estrelló un Airbus 320, lo cual causó la muerte de cinco personas.
En el vuelo procedente de Austin, Texas, Estados Unidos, que se accidentó ayer no murió nadie, pero hizo recordar la tragedia del 30 de mayo de 2008 en el mismo lugar.
Las similitudes de los accidentes fueron varias, pues al igual que pasó con la aeronave de ayer, en 2008 el vuelo 390 de Taca se partió en dos por el impacto del choque.
Tanto el avión de ayer como el Airbus 320 de hace 10 años lograron aterrizar en el aeropuerto internacional de Toncontín, pero se salieron de la pista, pues las aeronaves no se detuvieron a tiempo.
Error humano
Tras extensas investigaciones, se determinó que el accidente del Airbus 320 de 2008 fue responsabilidad del piloto César D’Antonio.
Según el informe, se señaló al piloto “por haber tomado la decisión de aterrizar en condiciones no apropiadas en esos momentos”.
Conforme a los reportes, en el accidente del Airbus 320 “la torre de control le aprobó el aterrizaje, pero le advirtió de las condiciones húmedas de la pista”.
En su informe, la dirección de Aviación Civil de El Salvador libró a la aerolínea Taca de toda responsabilidad en ese accidente. Sobre el informe, Taca se pronunció diciendo que “es respetuosa de las conclusiones de la investigación realizada para conocer las causas probables del accidente del vuelo 390”, aseguró la aerolínea.
Las víctimas del accidente ocurrido en 2008 fueron Harry Brautigam, presidente del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE); Jeanne Chantal Neele, esposa de Bryan Michael Nele, exembajador brasileño en Honduras; Cesare D’Antonio Mena, capitán del avión, y dos personas que iban por la zona en un pick-up y quedaron atrapados bajo el avión.
El accidente del martes de la aeronave comercial Gulfstream G200 en el aeropuerto Toncontín fue en el mismo sitio donde hace 10 años se estrelló un Airbus 320, lo cual causó la muerte de cinco personas.
En el vuelo procedente de Austin, Texas, Estados Unidos, que se accidentó ayer no murió nadie, pero hizo recordar la tragedia del 30 de mayo de 2008 en el mismo lugar.
Las similitudes de los accidentes fueron varias, pues al igual que pasó con la aeronave de ayer, en 2008 el vuelo 390 de Taca se partió en dos por el impacto del choque.
Tanto el avión de ayer como el Airbus 320 de hace 10 años lograron aterrizar en el aeropuerto internacional de Toncontín, pero se salieron de la pista, pues las aeronaves no se detuvieron a tiempo.
Error humano
Tras extensas investigaciones, se determinó que el accidente del Airbus 320 de 2008 fue responsabilidad del piloto César D’Antonio.
Según el informe, se señaló al piloto “por haber tomado la decisión de aterrizar en condiciones no apropiadas en esos momentos”.
Conforme a los reportes, en el accidente del Airbus 320 “la torre de control le aprobó el aterrizaje, pero le advirtió de las condiciones húmedas de la pista”.
En su informe, la dirección de Aviación Civil de El Salvador libró a la aerolínea Taca de toda responsabilidad en ese accidente. Sobre el informe, Taca se pronunció diciendo que “es respetuosa de las conclusiones de la investigación realizada para conocer las causas probables del accidente del vuelo 390”, aseguró la aerolínea.
Las víctimas del accidente ocurrido en 2008 fueron Harry Brautigam, presidente del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE); Jeanne Chantal Neele, esposa de Bryan Michael Nele, exembajador brasileño en Honduras; Cesare D’Antonio Mena, capitán del avión, y dos personas que iban por la zona en un pick-up y quedaron atrapados bajo el avión.
