Tegucigalpa, Honduras.
La ex primera dama Rosa Elena Bonilla de Lobo, quien enfrenta cargos por malversación de caudales públicos y lavado de activos, obtuvo en marzo de 2017 otra lujosa residencia en una exclusiva zona de Miami, Florida, por un valor de 433,700 dólares, un poco más de 10.4 millones de lempiras.
Esta es la segunda vivienda que la esposa del expresidente Lobo posee en el estado de la Florida, pero con la diferencia de que la primera, adquirida el 22 de mayo de 2013, está a nombre de ella y su esposo Porfirio Lobo Sosa, y en esta última solo aparece ella como única propietaria, según documentos oficiales del Condado de Miami Dade a los que tuvo acceso Diario LA PRENSA.
El inmueble está ubicado en una zona de alta plusvalía en el exclusivo sector de Grand Bay North, Miami, Florida, el cual colinda con varios lagos artificiales e imponentes complejos residenciales.
Se trata de un townhouse ubicado dentro de un grupo de viviendas de dos niveles y con parqueo para dos vehículos, construidas unas al lado de las otras y que comparten una pared común.
La dirección exacta del inmueble es 0388 North West 88 Ter, Florida, 33178-0000, según consta en el documento de registro inmobiliario del Condado de Miami Dade.
Los escritos establecen que la propiedad la
adquirió Rosa Elena Bonilla Ávila el 15 de marzo de 2017 por un valor de 433,700 dólares, que al cambio oficial equivalen a un poco más de 10.4 millones de lempiras.
La señora Bonilla ávila está denunciada por el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) y la Unidad Fiscal Especial contra la Impunidad de la Corrupción (Ufecic) por la sustracción irregular de 12.3 millones de lempiras trasladados de una cuenta de cheques del Despacho de la Primera Dama a una cuenta personal abierta en un banco de esta ciudad.
El lujoso townhouse lo compró la ex primera dama exactamente hace 11 meses y 20 días, es decir, el 15 de marzo del año pasado, cuando ya habían surgido las primeras denuncias por irregularidades en el programa Uniformando y calzando a los niños de Honduras.
En 2016, el CNA ya había denunciado la compra irregular de uniformes y zapatos para escolares pobres del país, en la que supuestamente hubo una sobrevaloración de más de siete millones de lempiras.
Por este caso, Rosa Elena y su secretario privado Saúl Escobar Puerto están denunciados por malversación de caudales públicos y falsificación de documentos públicos.
Firmas
Mediante una búsqueda avanzada en la web y el cotejo de documentos de los registros inmobiliarios del Condado de Miami Dade, el equipo de investigación de Diario LA PRENSA pudo confirmar que la compra del townhouse se hizo con todas las formalidades de ley y estuvo a cargo de Nicolás Chami, abogado y notario público del estado de Florida.
Al final del documento se puede apreciar la firma legible que ha utilizado en todos sus actos públicos la señora Rosa Elena Bonilla. La rúbrica fue comparada con la estampada en el documento oficial de compra de la primera vivienda y ambas coiciden plenamente.
Llama la atención que en el documento de registro inmobiliario solo aparece a nombre de la ex primera dama y sin la firma de su esposo Porfirio Lobo Sosa.
En la información general, Bonilla se identifica solo como “ mujer casada” y única beneficiaria, sin proporcionar el nombre de su pareja.
En mayo de 2013, la expareja presidencial adquirió una primera vivienda en el sector de Doral Breeze, en el noreste de Miami, por un valor de 603,725 dólares, unos 12.7 millones de lempiras, ocho meses antes de que Lobo entregara el poder. En aquel momento, Lobo aseguró que se adquirió con préstamo bancario.
Una fuente del Ministerio Público informó que por ahora no se ha solicitado el aseguramiento de esos bienes.
La ex primera dama Rosa Elena Bonilla de Lobo, quien enfrenta cargos por malversación de caudales públicos y lavado de activos, obtuvo en marzo de 2017 otra lujosa residencia en una exclusiva zona de Miami, Florida, por un valor de 433,700 dólares, un poco más de 10.4 millones de lempiras.
Esta es la segunda vivienda que la esposa del expresidente Lobo posee en el estado de la Florida, pero con la diferencia de que la primera, adquirida el 22 de mayo de 2013, está a nombre de ella y su esposo Porfirio Lobo Sosa, y en esta última solo aparece ella como única propietaria, según documentos oficiales del Condado de Miami Dade a los que tuvo acceso Diario LA PRENSA.
El inmueble está ubicado en una zona de alta plusvalía en el exclusivo sector de Grand Bay North, Miami, Florida, el cual colinda con varios lagos artificiales e imponentes complejos residenciales.
Se trata de un townhouse ubicado dentro de un grupo de viviendas de dos niveles y con parqueo para dos vehículos, construidas unas al lado de las otras y que comparten una pared común.
La dirección exacta del inmueble es 0388 North West 88 Ter, Florida, 33178-0000, según consta en el documento de registro inmobiliario del Condado de Miami Dade.
| El documento calza la firma de la expareja presidencial y corresponde a la vivienda en el sector de Doral Breeze, Miami.
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La señora Bonilla ávila está denunciada por el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) y la Unidad Fiscal Especial contra la Impunidad de la Corrupción (Ufecic) por la sustracción irregular de 12.3 millones de lempiras trasladados de una cuenta de cheques del Despacho de la Primera Dama a una cuenta personal abierta en un banco de esta ciudad.
El lujoso townhouse lo compró la ex primera dama exactamente hace 11 meses y 20 días, es decir, el 15 de marzo del año pasado, cuando ya habían surgido las primeras denuncias por irregularidades en el programa Uniformando y calzando a los niños de Honduras.
En 2016, el CNA ya había denunciado la compra irregular de uniformes y zapatos para escolares pobres del país, en la que supuestamente hubo una sobrevaloración de más de siete millones de lempiras.
Por este caso, Rosa Elena y su secretario privado Saúl Escobar Puerto están denunciados por malversación de caudales públicos y falsificación de documentos públicos.
| El segundo documento es de la casa de Grand Bay North y aparece como única firmante y beneficiaria Rosa Bonilla.
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Mediante una búsqueda avanzada en la web y el cotejo de documentos de los registros inmobiliarios del Condado de Miami Dade, el equipo de investigación de Diario LA PRENSA pudo confirmar que la compra del townhouse se hizo con todas las formalidades de ley y estuvo a cargo de Nicolás Chami, abogado y notario público del estado de Florida.
Al final del documento se puede apreciar la firma legible que ha utilizado en todos sus actos públicos la señora Rosa Elena Bonilla. La rúbrica fue comparada con la estampada en el documento oficial de compra de la primera vivienda y ambas coiciden plenamente.
Llama la atención que en el documento de registro inmobiliario solo aparece a nombre de la ex primera dama y sin la firma de su esposo Porfirio Lobo Sosa.
En la información general, Bonilla se identifica solo como “ mujer casada” y única beneficiaria, sin proporcionar el nombre de su pareja.
En mayo de 2013, la expareja presidencial adquirió una primera vivienda en el sector de Doral Breeze, en el noreste de Miami, por un valor de 603,725 dólares, unos 12.7 millones de lempiras, ocho meses antes de que Lobo entregara el poder. En aquel momento, Lobo aseguró que se adquirió con préstamo bancario.
Una fuente del Ministerio Público informó que por ahora no se ha solicitado el aseguramiento de esos bienes.
