San Pedro Sula, Honduras
Autoridades migratorias de Estados Unidos y México deportaron el año pasado 21,158 hondureños menos que en 2016, según informes de la Secretaría de Relaciones Exteriores de Honduras.
En 2016, ambos países devolvieron 69,370, y en 2017, fueron 47,832 personas, es decir, hubo una reducción de 31%, un porcentaje importante en el historial migratorio de Honduras en la última década.
La cantidad total de hondureños deportados desde Estados Unidos, México, Centroamérica, Europa y Sudamérica bajó a 48,022, contra 69,370 registrados en 2016. Hubo una diferencia de 21,348.
Según las cifras de la Secretaría de Relaciones Exteriores, la suma de deportados de 2017 equivale a 63% de la cantidad contada en 2015 (75,875).
Las autoridades norteamericanas enviaron a los hondureños por vía aérea a los aeropuertos de Tegucigalpa y San Pedro Sula, mientras las mexicanas los transportaron por tierra en autobuses hasta la costa norte.
La reducción de la cantidad de retornados, según el Gobierno de Honduras, obedece a que el flujo migratorio a Estados Unidos se ha disminuido gracias a que el país ha logrado mejorar los índices de seguridad y ahora ofrece mejores condiciones económicas.
Flujo
Entre 2011 y 2015, de acuerdo con el Centro de Investigaciones Pew, con sede en Washington, los hondureños y otros centroamericanos emigraban hacia el norte por dos motivos fundamentalmente: para mejorar sus condiciones económicas y a causa de la violencia en sus países de origen.
Investigaciones de ese centro indican que en ese período se incrementó el éxodo originado en los países del Triángulo del Norte (Guatemala, Honduras y El Salvador) del istmo principalmente a Estados Unidos.
“El número de inmigrantes en los Estados Unidos procedentes de El Salvador, Guatemala y Honduras aumentó en un 25% de 2007 a 2015, en contraste con un crecimiento más modesto en general de la población extranjera en el país y sobre un declive del vecino México”, publicó en el informe Aumento en los inmigrantes estadounidenses de El Salvador, Guatemala y Honduras supera el crecimiento de otros lugares, recién publicado.
Ese informe consigna que “durante estos mismos años, la población inmigrante total de Estados Unidos aumentó en un 10%, entretanto, el número de los inmigrantes mexicanos en Estados Unidos disminuyó en un 6%”.
Menores. Un comunicado del Gobierno recién informó que la Fuerza de Tarea para la Niñez Migrante, que instauró el presidente Juan Orlando Hernández en 2014 con el objetivo de reducir los índices de migración irregular hacia los países del norte, logró bajar en 30.8% el flujo de familias que viajan en busca del sueño americano en 2017.
“Hemos logrado que en tres años Honduras sea el único país que redujo significativamente los flujos migratorios de manera irregular hacia los países del norte del continente, y responde a las estrategias que Juan Orlando desde el Gobierno ha impulsado y nos permite ver avances importantes y significativos”, dijo la primera dama, Ana García de Hernández, quien encabeza la Fuerza de Tarea.
A juicio de esa instancia, es “de resaltar la disminución de 3,720 niños, niñas y adolescentes, que representa un 42% menos con relación al año 2016, que en 2017 dejaron de transitar las rutas migratorias.
Estos son resultados de las acciones que el Gobierno ha emprendido en materia de prevención de la migración irregular de niños no acompañados, informaron las autoridades.
La Fuerza de Tarea está conformada por la primera dama, Ana García de Hernández, y la participación de las autoridades de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Dirección de Migración, Dirección del Sistema de Protección de Derechos Humanos, Secretaría de Derechos Humanos, Dinaf, Secretaría de Desarrollo e Inclusión Social, Fiscalía Especial de la Niñez y la Dirección General de Protección al Hondureño Migrante.
