Tegucigalpa, Honduras
El gobierno de Honduras presentó una estrategia que busca volver accesibles los pagos para adquirir una vivienda mediante el programa denominado “Proyecto de impulso al sector vivienda social y vivienda media”.
El objetivo del proyecto presentado ante la banca nacional y los desarrolladores de proyectos por el presidente Juan Orlando Hernández, es incrementar los bonos que el gobierno da a los interesados y reducir las tasas de interés anual de 13% a 9.7%, es decir 3.3% exclusivamente para la clase media.
Los beneficios según su ingreso
Las familias que tienen ingresos de entre 5,000 y 20,000 lempiras reciben actualmente un bono de 60,000 para el ciudadano común y de 90,000 para los trabajadores del sector maquila. A partir de 2018 este bono será de 110,000 lempiras, es decir, 50,000 lempiras más, informó Sergio Amaya, comisionado de Convivienda.
Para las familias que tienen un ingreso de entre 20,000 y 30,000 lempiras (entre 830 y 1,200 dólares) y que en este momento reciben 50,000 lempiras de bono, pasará a 100,000 (unos 4,000 dólares), es decir que se está duplicando el beneficio.
Los que ganan entre 30,000 y 40,000 lempiras, en este momento reciben una bonificación de 45,000 y a partir del próximo año será de 90,000 lempiras (3,700 dólares).
Mientras que el segmento de 40,000 a 60,000 lempiras, que es donde se ubica la vivienda media, no recibirá un subsidio directo, pero sí le dará una tasa preferencial de 9.7%.
En el caso de la vivienda social, el precio podrá ser de 450,000 a 800,000 lempiras (18,750 a 33,000 dólares) y la vivienda media podrá tener un costo de entre 800,000 y 2,000,000 de lempiras (33,000 a 83,000 dólares).
Los operadores de justicia
En estos proyectos los operadores de justicia, como los policías, militares, empleados del Ministerio Público (MP), del Poder Judicial y del Cuerpo de Bomberos, tendrán un trato preferencial.
“Los operadores de justicia por su condición de actividad y por los riesgos que corren hemos querido darles un trato diferente”, dijo Amaya.
Por lo tanto, las familias que tienen un ingreso de entre 5,000 y 20,000 lempiras, de 60,000 pasarían a recibir un bono de 130,000 lempiras para comprar su vivienda, es decir un beneficio mayor de 70,000 lempiras, unos 3,000 dólares.
Según presidente Juan Orlando Hernández explicó que los interesados podrán acceder al proyecto siguiendo tres pasos básicos:
1. Hacer la solicitud y presentar su comprobante de ingresos
La solicitud debe efectuarse en un banco, presentando los documentos de identidad y acreditando que no tiene vivienda propia, además mostrar los comprobantes de sus niveles de ingreso.
2. Acreditar que está laborando y puede pagar
El interesado debe acreditar que está trabajando para una empresa pública o privada, además debe garantizar que tiene solvencia necesaria para poder pagar la cuota mensual establecida.
3. Las familias escoigen las viviendas que deseen
Las familias interesadas pueden obtar a viviendas de dos o tres habitaciones de entre 30 a 50 metros cuadrados, con posibilidades de poder ampliarlas y las zonas las definen los desarrolladores privados.
El plan del gobierno busca construir unas 40,000 soluciones habitaciones en cuatro años, es decir, 10 mil cada año iniciando en 2018 y reducir el déficit habitacional que según la Comisión Nacional de Vivienda y Asentamientos Humanos (Convivienda), es de aproximadamente 300,000 casas.
Amaya explicó que, por ejemplo, los interesados en una vivienda de 450,000 lempiras ahora recibirán un bono de 110,000 lempiras, pagarán una prima de 22,500 lempiras que representa el 5% del total. La tasa de interés anual se mantiene en 9.7% y el plazo de pago a 20 años, pero la cuota le baja de 3,473.72 a 3,001.11 lempiras, es decir, que el ahorro es de 472.62 lempiras.
En el caso de la vivienda para los operadores de justicia, en una vivienda de 450,000 lempiras, por el bono que reciben la cuota bajaría de 3,473.72 a 2,812.06, es decir 666.66 lempiras.
Para una casa valorada en 1,000,000 de lempiras, la prima del 10% del valor de la vivienda, que serían 100,000 lempiras, no tiene bono, la tasa de interés anual baja a 9.7% y por ende la cuota se reduce de 10,544.18 a 8,507.07, es decir 2,037.11 lempiras, a una plazo de 20 años.
“Andamos buscando el impacto en la vivienda de ingresos medios, que es bastante fuerte, porque más de 2,000 lempiras en un crédito puede incluir a muchas más personas”, apuntó Amaya.
¿Dónde están los proyectos?
De momento, los proyectos habitacionales se han desarrollado por medio del Banco Hondureño para la Producción y la Vivienda (Banhprovi), la banca privada y las cooperativas, pero se está buscando en involucrar nuevos esquemas de financiamiento, incluyendo a los institutos de previsión.
Para el 2018, se prevé la construcción de unas 1,500 viviendas para familias que tienen un ingreso de hasta 5,000 lempiras, que en este caso es el 80% de la inversión es del Estado.
María Lydia Solano, directora ejecutiva de la Asociación Hondureña de Instituciones Bancarias (Ahiba), vio positiva la iniciativa, sobre todo porque se mantiene el compromiso del subsidio.
“El subsidio tiene que existir, no se puede parar, cuando el subsidio se detiene, que es algo que nos pasó en otros gobiernos, se pierde la confianza”, expresó Solano.
Destacó que sin apoyo del gobierno, una persona que gana un salario mínimo no va a poder ahorrar para dar una prima de una vivienda.
Asimismo, indicó que en 20 años de crédito se van a presentar problemas humanos, como la pérdida de empleo y la persona se va a retrasar, por lo cual se debe reformar la ley para que las cuotas atrasadas se pasen al final del crédito.
La mayoría de los proyectos se podrían desarrollar en las principales ciudades del país con diseños de casa con una, dos y hasta tres habitaciones, sala, cocina y patio.
El presidente Juan Orlando Hernández catalogó este jueves como un gran paso subir de 60,000 a 110,000 lempiras el bono para la vivienda social.
Indicó que entre las necesidades básicas del ser humano están tener una vivienda, pero hablando con trabajadores de la maquila en Choloma, Cortés, ellos no miraban como una necesidad básica tener su propia casa.
Llegó a la conclusión que era tan difícil que estos trabajadores pudieran tener su propia casa que se acostumbraron a pagar alquiler y renunciaron a tener lo propio. Desde ese momento se comenzaron a promover los bonos por parte del Estado, empezando con 60,000 lempiras y luego para estimular más al sector de la maquila decidieron subirlo a 90,000.
Luego se dieron cuenta del difícil acceso a los créditos y se hizo la relación entre Banhprovi y la banca nacional y a la vez se comenzaron a ver muchos modelos de otros países y se llegó esta iniciativa. “Yo quiero invitar a los bancos, a las cooperativas a que miren esto como una fuente importante de ingresos, pero también de un crecimiento sostenido de nuestra economía”, demandó Hernández.
Reflexionó que “no estuviéramos dando este paso sino hubiéramos logrado consolidar los niveles macroeconómicos que tenemos hoy”.
Aseguró que la disciplina en el manejo de las finanzas del país permite tener recursos por el orden de 1,600 millones de lempiras, el doble que estaba disponible en bonos el año pasado. “Llevar estos bonos a los 110,000 es una gran paso”, dijo el mandatario, porque lo primero que piensa la gente al momento de comprar una vivienda es cuál es la cuota que puede pagar.
Al mismo tiempo refirió que ahora se está atendiendo el segmento medio, que no recibe un bono, pero sí se le aplica un apoyo para bajar la tasa de interés. Hernández dijo que le están apostando a un sector que ha crecido agresivamente y va crecer más, porque generará 60,000 nuevos empleos directos solo con este programa y 240 indirectos.
