Yankel Antonio Rosenthal Coello, de 48 años, empresario, político hondureño, exministro de Inversiones y presidente del Club Deportivo Marathón, se declaró culpable de “un cargo por intentar participar en transacciones monetarias en propiedades derivadas de actividades ilegales”, delito que lleva un plazo máximo de 10 años de prisión, según datos de la Fiscalía de Nueva York.
Igual que Yankel Rosenthal, el abogado Andrés Acosta, de 42 años, también se declaró culpable del mismo delito. Rosenthal Coello, que goza de libertad condicional, será sentenciado el 19 de enero de 2018, y Acosta unos días antes, el 12 de enero.
El empresario anunció que aceptaba su responsabilidad en un comunicado. A continuación el comunicado:
Joon Kim, fiscal de los Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York, anunció que junto a Yankel Rosenthal Coello también se declaró culpable su abogado Andrés Acosta García por participar en transacciones monetarias en propiedades derivadas de delitos de narcotráfico entre 2004 y septiembre de 2015.
Comunicado de la familia Rosenthal
Los antecedentes
El 7 de octubre de 2015, la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos (OFAC, por sus siglas en inglés) acusó a tres empresarios hondureños y siete compañías como Traficantes de Narcóticos Especialmente Designados conforme a la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeros del Narcotráfico (Ley Kingpin) “por desempeñar un papel significativo en el tráfico internacional de narcóticos”.
De acuerdo al comunicado del Departamento del Tesoro, Jaime Rolando Rosenthal Oliva, 81 años, así como su hijo Yani Benjamín Rosenthal Hidalgo, 52 años, –quien se declaró culpable el pasado 26 de julio- y su sobrino Yankel Antonio Rosenthal Coello, de 49 años, “proveen servicios de lavado de dinero y otros para apoyar actividades de tráfico internacional de narcóticos de múltiples traficantes de drogas centroamericanos y de sus organizaciones criminales”.
Como resultado de la acción de la OFAC, todos los Rosenthal y de las entidades que están bajo la jurisdicción de los Estados Unidos o que están en control de personas estadounidenses están congelados, y personas estadounidenses están generalmente prohibidas de realizar transacciones con ellos.
Con la acción, por primera vez la OFAC designaba a un banco conforme a la Ley Kingpin. “El Banco Continental S.A. ha servido como parte integral de las operaciones de lavado de dinero de los Rosenthal y ha facilitado el lavado de ganancias procedentes del narcotráfico de múltiples organizaciones centroamericanas de narcotráfico”, señala la acusación.
Adicionalmente, fueron designadas las compañías Shelimar Investment, Ltd., Desland Overseas, Ltd., y Preyden Investments, Ltd., todas con sede en las Islas Vírgenes Británicas. La OFAC también identificó a tres entidades estadounidensesubicadasen Florida como propiedades bloqueadas con base a la Ley Kingpin –Inversiones Continental USA., Corp.; Shelimar Real Estate Holdings II, Inc.; y Shelimar Real Estate Holdings III, Inc.