18/04/2024
01:53 AM

Atlántico y el oriente se unen con el corredor agrícola

  • 26 junio 2017 /

La nueva vía está lista en un 95% y comprende 180 kilómetros desde Bonito Oriental hasta Juticalpa, Olancho.

    Tegucigalpa, Honduras

    La expansión productiva de los departamentos de Atlántida, Colón, Yoro y Olancho ahora es una realidad con la rehabilitación y pavimentación del corredor agrícola, que viene a mejorar el acceso desde los centros de producción hasta los diferentes mercados en el país.

    El tramo da ahora una mayor accesibilidad. Desde Bonito Oriental hasta Juticalpa son dos horas de trayecto, lo que reduce los tiempos de viaje, baja los costos y mejora la seguridad al transitar por una vía en perfectas condiciones. Apenas dos tramos están en proceso de finalización. Uno que se ubica cerca de Carbonales, en Colón, y el otro en la zona de Gualaco, Olancho.

    Inicia
    El programa de rehabilitación agrícola. El estudio se realizó ese año, cuando se hizo el estudio de factibilidad económica del proyecto, que ha favorecido a productores y pobladores.

    “Estamos contentos con la obra porque ahora sí vemos que es una realidad. Esto es bueno porque llegamos más rápido; por ejemplo, a Tegucigalpa; es una carretera en perfecto estado. Además de comercializar más fácilmente los productos sin temor a pérdidas, sobre todo con los lácteos”, explicó Carolina Molina, vecina de Bonito Oriental.

    El nuevo tramo crea expectativas porque los productores aseguran que se mejora la competitividad y beneficia la producción de banano, café, aceite de palma africana, maíz, frijoles, comestibles, hortalizas, frutas, lácteos y se integran las diferentes regiones del país.

    El resto del tramo está en perfecto estado y conecta a Colón con Olancho, en dos horas.

    El tramo

    Son aproximadamente 180 kilómetros de carretera, que incluyen la rehabilitación de los puentes y seguridad vial, con la colocación de señales en todo el corredor.

    Asimismo, el proyecto incluye un mantenimiento rutinario que se hará a través de microempresas de mantenimiento con pobladores indígenas de la zona.

    El costo total del proyecto asciende a 44 millones de dólares, de los cuales el Banco Interamericano de Desarrollo financió con 40 millones y cuatro de contrapartida que da el Gobierno.

    En lo que es el tramo entre Gualaco y San Francisco de La Paz cruza una zona que es poblada por miembros de la comunidad pech, por lo que se consensuó con sus integrantes el manejo de la obra de infraestructura por los impactos sobre el medio ambiente, en este caso por el movimiento de tierras, transporte de materiales, pavimentación, instalación de campamentos y otras actividades.

    “Se tomó en cuenta el respeto a las poblaciones indígenas en el proyecto, pero como en este tramo no estábamos abordando tramos nuevos no se requirieron estudios de impacto ambiental. Todo marchó en consenso y eso facilitó la obra”, explicó uno de los ingenieros del proyecto.

    Manejo ambiental. Lo que sí se incluyó fueron los diseños de ingeniería que incluyen la elaboración de Planes de Manejo Ambiental y Social (PMAS), que incluirán medidas de prevención y mitigación correspondientes a los diferentes impactos esperados, que incluyen: manejo de aguas, manejo de suelos y control de erosión, así como el manejo y disposición final de residuos sólidos, conservación, restauración y compensación de cobertura vegetal, señalización y manejo de tránsito.

    Todo esto bajo la responsabilidad de la Unidad de Gestión Ambiental (UGA) de la Secretaría de Infraestructura y Servicios Públicos (Insep).

    El proyecto mejoró la vía, se reforzaron las bases y se aplicó un riego asfáltico doble, donde se utilizó maquinaria pesada, en su mayor parte motoniveladoras y compactadoras. Se espera que las dos fallas detectadas en la obra se solventen en los próximos días para oficialmente inaugurar este tramo, que es una obra esperada en la zona.