San Pedro Sula, Honduras.
Miradas inocentes y desprotegidas se observan en varias calles de la Capital Industrial, en rostros de menores que con tan solo aprender hablar ya empiezan a ganarse la vida. Esta es la realidad que atraviesan muchas niñas y niños que tiene como punto de encuentro los semáforos de calles y avenidas.
Pero muchos de ellos logran salir de ese infortunio gracias a la ayuda de casas hogares o fundaciones que logran cambiarles la vida para darles calor humano y educación.
Testimonios
Roger Antúnez (20 años) es uno de los cientos de beneficiados que desde su fundación, en 1974, ha tenido el Hogar de Niños Emanuel, ubicado en la colonia Bográn de San Pedro Sula.
Roger llegó con 11 años de edad al albergue gracias a la Fundación Sampedrana del Niño. Desde ese momento empezó a recibir todas las atenciones que nunca logró de su familia, pese a tener a su madre viva, quien debido a su situación económica no se sintió con la confianza de sacarlo adelante.
“A mi papá no lo conocí y aunque viva en el hogar nunca he dejado de tener comunicación con mi mamá, casi todas las semanas me visita”, dijo el joven.
Gracias a los conocimientos adquiridos en los años de estudio y con el curso de soldadura de Infop, del cual se graduará en un mes, colaboró con la construcción de una estructura en el hogar y además es el encargado de la limpieza y recolección de los huevos de la granja del lugar.
Paralelo a sus estudios en el Infop, Roger cursa la carrera de Ciencias y Humanidades en el
Instituto Hondureño de Educación por Radio (Iher), que culminará el próximo año.
Instituciones
Al igual que el Hogar de Niños Emanuel, que actualmente tiene 85 albergados, en la ciudad existen otros 12 centros de acogida, que entre todos cuidan a más de 500 menores , quienes van desde días de nacidos hasta los 22 años.
Senderos de Amor es uno de los orfanatos más antiguos de San Pedro Sula, fundado en 1984 por un grupo de feligreses de la Iglesia Católica.
El centro solo atiende a varones, hasta la fecha tiene 51 y 16 de ellos presentan retos especiales.
“Somos el segundo hogar de paso de la ciudad, es decir que además de los niños que viven aquí también velamos por aquellos que han sufrido algún tipo de maltrato y mientras las autoridades solucionan su situación los hospedamos por un lapso de dos o tres días”, manifestó Yadira Sánchez, asistente de dirección del hogar.
Contrario a Senderos de Amor, en la colonia Villa Florencia funciona el hogar Mis Pequeñas Rosas, exclusivo para mujeres , con 29 años al servicio de niñas en riesgo social.
Diana Frade, directora de la institución, señaló que en ella se brinda educación, amor, respeto, salud y alimentación. Además se les ofrece un verdadero hogar con oportunidades de superación, cumpliendo sus sueños para convertirlas en mujeres exitosas.
Asistencia
Muchos de los menores que llegan a los centros de acogida son rescatados de las calles por la Dirección de Niñez Adolescencia y Familia (Dinaf), que en la zona norte trabaja con 38 casas hogar.
Delmy Murcia, jefa regional norte de la Dinaf, explicó que a todos los pequeños enviados a los centros se les da seguimiento para garantizar que reciben la atención adecuada.
Miradas inocentes y desprotegidas se observan en varias calles de la Capital Industrial, en rostros de menores que con tan solo aprender hablar ya empiezan a ganarse la vida. Esta es la realidad que atraviesan muchas niñas y niños que tiene como punto de encuentro los semáforos de calles y avenidas.
Pero muchos de ellos logran salir de ese infortunio gracias a la ayuda de casas hogares o fundaciones que logran cambiarles la vida para darles calor humano y educación.
Testimonios
Roger Antúnez (20 años) es uno de los cientos de beneficiados que desde su fundación, en 1974, ha tenido el Hogar de Niños Emanuel, ubicado en la colonia Bográn de San Pedro Sula.
Roger llegó con 11 años de edad al albergue gracias a la Fundación Sampedrana del Niño. Desde ese momento empezó a recibir todas las atenciones que nunca logró de su familia, pese a tener a su madre viva, quien debido a su situación económica no se sintió con la confianza de sacarlo adelante.
| En cada uno de los hogares a los niños se les fomentan valores por medio del deporte y la realización de actividades como manualidades.
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Gracias a los conocimientos adquiridos en los años de estudio y con el curso de soldadura de Infop, del cual se graduará en un mes, colaboró con la construcción de una estructura en el hogar y además es el encargado de la limpieza y recolección de los huevos de la granja del lugar.
| Antecedentes
En 2013 las llamas consumieron el hogar Nueva Esperanza que estaba a cargo del desaparecido Ihnfa, el hecho casi provoca la muerte de unos 100 menores.
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Instituciones
Al igual que el Hogar de Niños Emanuel, que actualmente tiene 85 albergados, en la ciudad existen otros 12 centros de acogida, que entre todos cuidan a más de 500 menores , quienes van desde días de nacidos hasta los 22 años.
Senderos de Amor es uno de los orfanatos más antiguos de San Pedro Sula, fundado en 1984 por un grupo de feligreses de la Iglesia Católica.
El centro solo atiende a varones, hasta la fecha tiene 51 y 16 de ellos presentan retos especiales.
| También les enseñan computación.
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Contrario a Senderos de Amor, en la colonia Villa Florencia funciona el hogar Mis Pequeñas Rosas, exclusivo para mujeres , con 29 años al servicio de niñas en riesgo social.
| Sépalo
Otros centros que apoyan a niños en riesgo social son Aldeas SOS, Hogar San José, Hogar Crea, Yo Quiero Ser, Amor y Vida, Casa del Niño y la Niña, Casa de la Joven y el Joven.
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Asistencia
Muchos de los menores que llegan a los centros de acogida son rescatados de las calles por la Dirección de Niñez Adolescencia y Familia (Dinaf), que en la zona norte trabaja con 38 casas hogar.
Delmy Murcia, jefa regional norte de la Dinaf, explicó que a todos los pequeños enviados a los centros se les da seguimiento para garantizar que reciben la atención adecuada.
