Tegucigalpa, Honduras.
Al menos 50 millones de lempiras pagó en esta semana la Secretaría de Seguridad a más de un centenar de policías cancelados en los últimos días como parte del proceso de depuración y reestructuración policial.
La semana anterior, decenas de exagentes se tomaron las instalaciones de esa institución de seguridad en el sector de Mateo, Francisco Morazán, exigiendo el pago de sus derechos laborales.
Este grupo de al menos 266 exagentes estaban asignados a la Unidad Metropolitana de Prevención número 2 de Belén y fueron cancelados por la Comisión Especial de Depuración el pasado 22 de noviembre.
Tras los reclamos de los cesanteados, la Secretaría de Seguridad agilizó los trámites administrativos y entre lunes y jueves de esta semana se logró pagar a la mayoría de ellos, desembolsando más de 50 millones de lempiras.
Recuento.
Omar Rivera, miembro de la comisión depuradora, explicó que estos 50 millones se suman a los 250 millones de lempiras desembolsados hasta mediados de diciembre a más de 1,857 agentes oficiales separados de la Policía por motivos de reestructuración.
En suma, el estado de Honduras a través de la Secretaría de Seguridad ha desembolsado en total unos 300 millones de lempiras en pago de prestaciones y otros derechos laborales a 2,091 miembros de la carrera policial separados por diferentes motivos.
De estos 2091 oficiales y agentes apartados de la Policía, la Comisión Especial registra oficialmente que 1601 fueron cancelados por reestructuración, en razón del nuevo andamiaje organizacional de la entidad; 207 fueron despedidos con justa causa sin responsabilidad para el Estado, respetando de forma irrestricta el debido proceso y los derechos humanos de los cesanteados; a 256 se les canceló el acuerdo de nombramiento por retiro voluntario, en aplicación del artículo 109, numeral 1 de la Ley Orgánica de la Policía Nacional”.
El pago se realizó una vez que los exuniformados acreditaron no tener cuentas pendientes con el Estado y obtuvieron su finiquito de la Dirección de Logística de la Policía de haber entregado todo su equipamiento, mobiliario y armamento asignado.
Rivera enfatizó que todos los policías que han sido cancelados como parte del proceso de depuración han recibido sus respectivas indemnizaciones, luego de haber entregado sus armas de reglamento y sus finiquitos.
