San Pedro Sula, Honduras.
Al concluir 2016, los hondureños en el exterior le habrán inyectado a la economía nacional más de 4,117 millones de dólares (L94,600 millones), una cantidad de remesas sin precedentes.
Esta fuerte suma de dinero supera la cantidad de divisas que capta la industria maquiladora por exportaciones en un año y equivale al 56% de la deuda externa (pública y privada) de Honduras, que en agosto contabilizó $7,308.6 millones (L168,000 millones) de acuerdo con cifras del Banco Central de Honduras (BCH).
La firma Fundemos Consultores, en el estudio Honduras Evolución de la Economía en 2016 y Proyecciones para 2017 hecho para Grupo Opsa, plantea que esta vez las remesas crecieron 12.8%, la tasa de progreso más alta observada en el último quinquenio.
Importancia
Dentro de la balanza de pagos (registro de todas las transacciones de un país con el resto del mundo), las remesas comenzaron a ser un factor preponderante desde 2003, cuando cruzaron el umbral de los 1,000 millones de dólares (L23,000 millones).
En la cuenta de transferencias corrientes de la balanza de pagos de 2015, las remesas aportaron $3,649 millones (L60,900 millones) el 90.8% de la suma global ($3,834 millones), según análisis del BCH. En el primer semestre de 2016 continuaron ganando espacio en la cuenta de transferencias corrientes con una aportación de $1,875.5 millones (91.7% del total: $2,045 millones).
Marco Tulio López, profesor de Ingeniería Financiera en la Universidad Tecnológica de Honduras (UTH), califica las remesas “como la principal fuente de divisas del país” porque “representan el 35% de los ingresos de Honduras”.
“Con las remesas, el Gobierno tiene el beneficio de obtener más dólares que pasan a formar parte de las reservas internacionales netas sin aumentar más la deuda externa. De esta forma, se le facilita al Banco Central la administración de la política cambiaria”, explicó López.
Además, estas remesas “son monetizadas, es decir, el Banco Central las paga en efectivo en lempiras y eso hace que exista mucha liquidez en la economía”, agregó.
Más dólares
El crecimiento de las remesas hondureñas es una secuela del repunte de la economía estadounidense (de donde procede el 81% de los envíos) que ha permitido a más inmigrantes encontrar un trabajo.
El 28 de octubre, la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio de los Estados Unidos en su informe Avances informó que el Producto interno bruto (PIB) aumentó un 2.9% en el tercer trimestre de 2016.
El informe Avances arguye que el aumento del PIB obedece, en parte, al crecimiento del gasto de los consumidores en los servicios, en particular en vivienda, servicios públicos y en salud. En los últimos meses, creció el gasto en bienes duraderos, en particular en automóviles. El informe destaca que crecieron exportaciones de bienes y servicios, aumentaron las inversiones y el gasto federal.
El crecimiento de estos sectores económicos se convierte en un aliciente para los hondureños, puesto que son las áreas en las cuales se desempeñan los compatriotas allá.
La Encuesta Semestral de Remesas Familiares, realizada en los aeropuertos de Tegucigalpa y San Pedro Sula entre hondureños que viajan a Estados unidos y publicada en agosto por el BCH, confirma que el 44.7% trabaja en actividades de servicios, 13% en construcción, 12.6% en comercio, 9.9% en la industria, 9.2% en área doméstica, 6.5% es de jubilados y 1% en agricultura.
“La economía en Estados Unidos está mejorando, la gente está comprando más y es más fácil encontrar trabajo”, dijo Vicente Cálix, un hondureño que trabajó entre junio y octubre en Nueva York.
Cálix viajó a Estados Unidos a principios de año y aprovechó para trabajar en una compañía neoyorquina donde devengaba $10.00 (L230) la hora durante cinco días. Semanalmente ganaba $400 (L9,200).
“Trabajé como operario de máquina en una empresa farmacéutica que le maquila vitaminas y medicamentos a otras compañías”, relató.
En un período de cinco meses, Cálix, quien ya está en Honduras, envió a sus familiares en San Pedro Sula $1,500 dólares (L34,500) en tres partes ($500 cada vez -L11,500).
Menos caro
Por cada $500, Cálix pagó una comisión de $10. Él utilizó los servicios de Money Gram y Western Union, dos compañías remesadoras que ahora cobran menos por cada transacción.
Según un análisis del Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (Cemla), los hondureños y centroamericanos comenzaron a pagar menos en 2015 por enviar remesas a sus familiares.
El costo promedio se redujo en 1.50% de 2011 a 2015 para los envíos de $200 y en 1.63% para las remesas de $500. Hace 5 años, los hondureños pagaban 5.61%.
Al concluir 2016, los hondureños en el exterior le habrán inyectado a la economía nacional más de 4,117 millones de dólares (L94,600 millones), una cantidad de remesas sin precedentes.
Esta fuerte suma de dinero supera la cantidad de divisas que capta la industria maquiladora por exportaciones en un año y equivale al 56% de la deuda externa (pública y privada) de Honduras, que en agosto contabilizó $7,308.6 millones (L168,000 millones) de acuerdo con cifras del Banco Central de Honduras (BCH).
| Hace 16 años
En el año 2000, Honduras recibió $484 millones en remesas, equivalentes al 12% de la cantidad captada en 2016.
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Importancia
Dentro de la balanza de pagos (registro de todas las transacciones de un país con el resto del mundo), las remesas comenzaron a ser un factor preponderante desde 2003, cuando cruzaron el umbral de los 1,000 millones de dólares (L23,000 millones).
En la cuenta de transferencias corrientes de la balanza de pagos de 2015, las remesas aportaron $3,649 millones (L60,900 millones) el 90.8% de la suma global ($3,834 millones), según análisis del BCH. En el primer semestre de 2016 continuaron ganando espacio en la cuenta de transferencias corrientes con una aportación de $1,875.5 millones (91.7% del total: $2,045 millones).
 Los hondureños que viven en Miami, Washington, Los Ángeles y Houston ahora pagan menos comisión por enviar dinero. Por cada $200, en MoneyGram pagan $9.99 para hacer el envío.
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“Con las remesas, el Gobierno tiene el beneficio de obtener más dólares que pasan a formar parte de las reservas internacionales netas sin aumentar más la deuda externa. De esta forma, se le facilita al Banco Central la administración de la política cambiaria”, explicó López.
Además, estas remesas “son monetizadas, es decir, el Banco Central las paga en efectivo en lempiras y eso hace que exista mucha liquidez en la economía”, agregó.
Más dólares
El crecimiento de las remesas hondureñas es una secuela del repunte de la economía estadounidense (de donde procede el 81% de los envíos) que ha permitido a más inmigrantes encontrar un trabajo.
El 28 de octubre, la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio de los Estados Unidos en su informe Avances informó que el Producto interno bruto (PIB) aumentó un 2.9% en el tercer trimestre de 2016.
El informe Avances arguye que el aumento del PIB obedece, en parte, al crecimiento del gasto de los consumidores en los servicios, en particular en vivienda, servicios públicos y en salud. En los últimos meses, creció el gasto en bienes duraderos, en particular en automóviles. El informe destaca que crecieron exportaciones de bienes y servicios, aumentaron las inversiones y el gasto federal.
En Western Union se pagan $8.00 por cada 200 dólares que un hondureño envía a su país.
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La Encuesta Semestral de Remesas Familiares, realizada en los aeropuertos de Tegucigalpa y San Pedro Sula entre hondureños que viajan a Estados unidos y publicada en agosto por el BCH, confirma que el 44.7% trabaja en actividades de servicios, 13% en construcción, 12.6% en comercio, 9.9% en la industria, 9.2% en área doméstica, 6.5% es de jubilados y 1% en agricultura.
| $403
Promedio enviado
El 68.3% de los migrantes (encuestados en junio por el BCH) envía un monto promedio de más de $400 cada mes (más de L9,000)
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Cálix viajó a Estados Unidos a principios de año y aprovechó para trabajar en una compañía neoyorquina donde devengaba $10.00 (L230) la hora durante cinco días. Semanalmente ganaba $400 (L9,200).
“Trabajé como operario de máquina en una empresa farmacéutica que le maquila vitaminas y medicamentos a otras compañías”, relató.
En un período de cinco meses, Cálix, quien ya está en Honduras, envió a sus familiares en San Pedro Sula $1,500 dólares (L34,500) en tres partes ($500 cada vez -L11,500).
Menos caro
Por cada $500, Cálix pagó una comisión de $10. Él utilizó los servicios de Money Gram y Western Union, dos compañías remesadoras que ahora cobran menos por cada transacción.
Según un análisis del Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (Cemla), los hondureños y centroamericanos comenzaron a pagar menos en 2015 por enviar remesas a sus familiares.
El costo promedio se redujo en 1.50% de 2011 a 2015 para los envíos de $200 y en 1.63% para las remesas de $500. Hace 5 años, los hondureños pagaban 5.61%.
