Unos problemas oculares podrían vincularse con el Zika, sugiere un estudio de laboratorio

Según un estudio, puede causar la inflamación inusual en los ojos, retinas y nervios ópticos de los infectados en el primer trimestre de embarazo.

Estados Unidos


Unos científicos que exploran cómo el Zika pasa de monas embarazadas a sus fetos creen que la infección podría ser más peligrosa para los embarazos humanos de lo que se pensaba.

'Los resultados que vemos en los embarazos de monas nos hacen creer que, a medida que crezcan, un número mayor de bebés humanos podrían desarrollar patologías de enfermedades relacionadas con el Zika de lo que se entiende actualmente', advirtió el investigador líder, Ted Golos.

Golos es profesor de biociencias comparativas y obstetricia y ginecología en la Universidad de Wisconsin-Madison.

Los investigadores llegaron a sus conclusiones tras infectar a cuatro monas macaco embarazadas con niveles del virus aproximadamente equivalentes a los que contraerían a partir de la picadura de un mosquito. Algunas monas se infectaron en el primer trimestre, y otras en el tercer trimestre del embarazo.

Los científicos encontraron que el virus llegó a los fetos de todas las monas.

'Es un nivel muy alto (una exposición del 100 por ciento) del virus en los fetos, junto con inflamación y lesión en los tejidos en un modelo animal que refleja la infección en los embarazos humanos muy de cerca', dijo Golos en un comunicado de prensa de la universidad.

Tres fetos de mono tenían cabezas pequeñas, pero no suficientemente pequeñas como para ser diagnosticaos con microcefalia, el resultado más dramático del Zika en los recién nacidos humanos.

Pero aunque los fetos de mono no mostraron señales de un desarrollo cerebral anómalo, los investigadores descubrieron una inflamación inusual en los ojos, retinas y nervios ópticos de los infectados en el primer trimestre de embarazo.

'Nuestros ojos son básicamente una parte de nuestro sistema nervioso central. El nervio óptico crece justo a partir del cerebro fetal durante el embarazo', dijo la coautora del estudio, Kathleen Antony, profesora de medicina materna y fetal en la UW-Madison.

'Tiene sentido ver este daño en los embarazos de monos y humanos, como la atrofia coriorretiniana o la microftalmia, en que el ojo completo o partes del ojo no crecen hasta el tamaño esperado', añadió.

Los investigadores afirmaron que estudiar la infección con el Zika en monos es una forma de seguir la progresión de la infección transmitida por los mosquitos en las personas, aunque los estudios con animales no siempre arrojan los mismos resultados en los seres humanos.

Los Institutos Nacionales de la Salud de EE. UU. financiaron esta investigación, en la que también participaron científicos de la Universidad de Duke y de la Universidad de California, en Davis.

El estudio aparece en la edición del 25 de mayo de la revista PLOS Pathogens.