San Pedro Sula.
Dormir bien es la clave para que su organismo funcione de forma óptima, pero si no descansa lo suficiente su día estará lleno de altibajos y su salud comenzará a deteriorarse.
Mauricio Pastrana, licenciado en Psicología, indica que los trastornos del sueño no son una patología grave en sí misma, pero tienen serias implicaciones en la vida diaria: agotamiento físico, bajo rendimiento, sueño diurno y dificultad para cumplir con las obligaciones profesionales, familiares o sociales.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera como una pandemia los trastornos del sueño, que pueden derivar en trastornos neurológicos y cardiovasculares. El tercer viernes de marzo se conmemora el día mundial.
Los trastornos del sueño se pueden agrupar en 4 categorías: problemas para conciliar el sueño y permanecer dormido (insomnio), problemas para permanecer despierto (somnolencia diurna excesiva), problemas para mantener un horario regular de sueño (problema con el ritmo del sueño) y comportamientos inusuales durante el sueño (conductas que lo interrumpen).
Dormir mal afecta el nivel físico y psicológico. Tiene consecuencias negativas sobre el cuerpo y el cerebro, además de que favorece el desarrollo de enfermedades.
La enfermedad más común es el insomnio que es la incapacidad para conciliar el sueño y permanecer dormido la noche.
La narcolepsia es común y se origina por una anomalía cerebral.
Además se puede desarrollar la apnea del sueño la persona hace una pausa en la respiración durante el sueño.
El lema de este año es “Sueño saludable, envejecimiento saludable”. El sueño profundo más una dieta sana y ejercicio es bueno para la salud.
Alimentos
Gloria Montoya, especialista en salud ocupacional y nutricionista, explica que dormir bien es fundamental en la calidad de vida, y se da en cada etapa del crecimiento.
El momento cuando el organismo descansa (duerme) es justo cuando regula procesos hormonales como metabólicos.
“Debe seguir una dieta rica en triptófanos, como almendra, huevo, queso, frijol blanco, lentejas y salmón”. Otros causan problemas para que pueda dormir, como los alimentos excitantes, que son estimulantes del sistema nervioso y causan estados de alerta: café, té negro y verde, canela, chocolate y alcohol.
La especialista brinda estas recomendaciones:
Evite irse a la cama con hambre o después de cenar. Cene 1 o 2 horas antes de acostarse. Tome caldos de cena. La comida debe ser rica en proteínas: carnes blancas, huevo, queso y verduras.
| Antes de irse a acostar tómese una taza de leche tibia con vainilla.
|
| El banano es rico en triptófanos. Antes de irse a la cama ingiera un banano.
|
1. Dormir boca arriba previene el dolor de cuello y espalda. Asegúrese de colocar una almohada debajo de las rodillas para mantener la alineación correcta de la espalda. Coloque una almohada pequeña o toalla enrollada en la curvatura de su espalda.
2. La mejor postura para dormir es de lado. Debe colocar entre sus piernas y rodilla una almohada, ya que le permite mantener la curva natural de la espalda. Cámbiese del lado del que duerme para evitar sufrir molestias durante la noche.
3. La posición fetal también es adecuada para dormir si tiene dolores de espalda. Doble las rodillas hasta que esté cómodo. En este caso, puede colocar también una almohada entre las piernas, lo que le ayudará a mantener la cadera, la pelvis y la columna vertebral alineadas.
4. Para prevenir el dolor de hombros duerma boca arriba con una pequeña almohada debajo del hombro con problemas. Si duerme del otro lado abrácela. La almohada que utilice no debe ser suave y se adapte a la forma de su cabeza para evitar el dolor de cuello.
