Identifique a tiempo si padece de una insuficiencia cardiaca

Las personas con obesidad, hipertensión y diabetes tienen riesgo de padecer de este mal

SAN PEDRO SULA.

Si usted siente falta de aire, sensación de cansancio o hinchazón de pies puede estar padeciendo de insuficiencia cardiaca.

Esta enfermedad se presenta en personas de 65 años, quienes van manifestando varios de los síntomas.

El cardiólogo Francisco Somoza, del hospital Cemesa, indica que el desarrollo de esta enfermedad puede llevar varios años. “La insuficiencia cardiaca se denomina suficiencia cardiaca congestiva que se produce cuando se acumulan líquidos en varias partes del cuerpo. Entonces todavía no lo tiene, pero corre el riesgo de padecerla”.

Los síntomas generalmente se desarrollan con el tiempo y a medida que el corazón se debilita y no puede bombear la sangre que su cuerpo necesita. Generalmente resulta con un corazón agrandado (ventrículo izquierdo), explica Somoza.

¿Se detiene?

En esta enfermedad el corazón no se detiene, sino que no bombea sangre como debe. “Sigue funcionando, pero no satisface las necesidades de sangre y oxígeno”, detalla.

Los riesgos para padecer de esa enfermedad son: un ataque al corazón anteriro que ha dañado el músculo cardiaco. Presión arterial alta, enfermedad de las vías cardiacas y del músculo cardiaco, padecer de diabetes, problemas de tiroides y tener obesidad.

El tratamiento consiste en seguir una dieta equilibrada y se debe bajar de peso. Someterse a un cirugía para colocar dispositivo cardiaco.

El hospital cuenta con personal especializado en cardiología, hemodinámica y cardiología intervencionista para tratar cualquier patología

Sépalo

1. Hace que la sangre se acumule en las venas. El cuerpo no recibe suficiente sangre, alimento y oxígeno. Se acumula líquido en los pulmones. El corazón no bombea la suficiente cantidad de sangre. Se acumula líquidos en el cuerpo que causa hinchazón de pies, tobillos y piernas

2. Entre los síntomas están la falta de aire al estar acostado, sensación de cansancio, agotamiento. Tos o silibancia. Aumento de peso. Confusión o falta de claridad mental.