Frente a esta situación, la activista ha hecho un llamado a las autoridades para que no permitan la liberación de su hijo, pues teme por su integridad y la de sus otros dos hijos menores. Asimismo, Katia ha expresado su deseo de que su hijo reciba un castigo apropiado por sus acciones, para que comprenda que la violencia contra las mujeres no es aceptable y, especialmente, para prevenir que en el futuro se convierta en un feminicida.