A través de los movimientos en internet de Gabriel Soto, la actriz Geraldine Bazán, comenzó a sospechar que su ex esposo le estaban siendo infiel con Irina Baeva, ya que comenzó a relacionar imágenes y lugares que veía en las redes sociales de la actriz rusa, que coincidían con los que veía en las de su marido. Soto terminó por confesarle la infidelidad y en 2018 se divorciaron, tras 10 años de relación.