Cuando se trata de salir a comer en
familia casi siempre resulta toda una odisea. Los lugares grandes y con mucha gente suelen ser de mucho estímulo para los pequeños, quienes se pueden cansar rápido y no tienen mucho espacio para jugar y correr.
Pero siguiendo estos consejos logrará tener una salida más relajada y bajo control.
1. Aunque sean pequeños, conviene prepararles, contándoles adónde van a ir y lo que se espera de ellos.
2. Si va con bebés, intente que el comedor no esté en un piso superior poco accesible. Las escaleras de un restaurante suelen estar muy concurridas con clientes y camareros y, aunque pueda subir el carrito, no será fácil si hay mucho tráfico de personas.
3. El local es importante: conviene que sea un restaurante familiar, de comida casera, donde los niños sean bienvenidos.
4. Actitud relajada: Si un vaso se vuelca, o la comida se cae, no se preocupes. Estas cosas ocurren con niños y no son graves. Estar en un sitio familiar ayudará ya que las familias con niños saben que estas cosas son normales y no son el fin del mundo.
5. El niño nunca aprenderá a comportarse en un restaurante si no va a ellos. Hay que empezar en casa y continuar con la práctica. Asuma que habrá que corregirles varias veces y que muchas veces se comportarán de forma que no le guste, pero la mejor manera de aprender es practicando sobre el terreno.
Pero siguiendo estos consejos logrará tener una salida más relajada y bajo control.
1. Aunque sean pequeños, conviene prepararles, contándoles adónde van a ir y lo que se espera de ellos.
2. Si va con bebés, intente que el comedor no esté en un piso superior poco accesible. Las escaleras de un restaurante suelen estar muy concurridas con clientes y camareros y, aunque pueda subir el carrito, no será fácil si hay mucho tráfico de personas.
3. El local es importante: conviene que sea un restaurante familiar, de comida casera, donde los niños sean bienvenidos.
4. Actitud relajada: Si un vaso se vuelca, o la comida se cae, no se preocupes. Estas cosas ocurren con niños y no son graves. Estar en un sitio familiar ayudará ya que las familias con niños saben que estas cosas son normales y no son el fin del mundo.
5. El niño nunca aprenderá a comportarse en un restaurante si no va a ellos. Hay que empezar en casa y continuar con la práctica. Asuma que habrá que corregirles varias veces y que muchas veces se comportarán de forma que no le guste, pero la mejor manera de aprender es practicando sobre el terreno.
