Grandes problemas que provoca el chupete

El abuso excesivo de éste le puede traer consecuencias negativas en un futuro.

  • 24 mar 2021

SAN PEDRO SULA.

Este accesorio se convierte en infinidad de ocasiones en la salvación de los padres, que no saben cómo conseguir que su hijo se calme. Sin embargo, el uso prolongado del chupete puede provocar algunos problemas en el desarrollo del bebé.

Los bebés tienen un reflejo conocido como el de succión, que hace que se relajen si se les ofrece el chupete al despertarse. También es muy probable que se calmen cuando se les pone el chupete entre las tomas de comida y dejen de llorar e incluso vuelvan a dormirse.

Sin embargo, si el uso del chupete se hace de manera constante, éste puede crear malformaciones tanto en las fosas nasales como en el paladar. Al producirse este hecho, el niño tendrá más facilidades a la hora de sufrir enfermedades como la otitis o las obstrucciones nasales.

Dependencia y malformaciones
Incluso, existe la posibilidad de que, con el paso del tiempo, si los niños alargan el uso del chupete, éste pueda deformar la salida de los dientes y como consecuencia se tenga que buscar la ayuda de un odontólogo, ya que lo más probable es que necesite de una ortodoncia.

Pero además de los problemas físicos que le puede traer el uso del chupete, también existen otra serie de factores negativos que influirán en el pequeño, en este caso en el aspecto psicológico. Y es que al hacer uso del chupete cada vez que se pretende relajar al bebé, lo que conseguirá es que el niño pueda llegar a sentirse solo; sin embargo, si los papás cuando llora le ofrecen consuelo, esta atención mejorara la actitud del niño en un futuro con respecto a las relaciones sociales.

Problemas en el momento de abandonarlo
“El momento ideal para que el bebé abandone el chupete es alrededor de los seis meses, de esa manera no se corre el riesgo de que se produzcan malformaciones dentales, ni en el paladar, que podrían tener como consecuencia problemas en el desarrollo del lenguaje a posteriori” afirma Verónica Minguito Orellano, Logopeda y especialista en atención temprana y psicomotricidad.

Si, además, para conseguir que el bebé concilie el sueño, cada noche una de las rutinas es la de colocarle el chupete para que duerma, éste se volverán indispensable y el pequeño podría llegar a volverse dependiente, por lo que en el caso de que tuviera que dormir sin él, esto le generaría un enorme estrés, sin contar con la cantidad de dificultades que encontraremos cuando queramos quitárselo según vaya creciendo.