California, Estados Unidos.
Aunque en principio solo se marcó como objetivo desprenderse del exceso de peso ganado durante el embarazo de su primera hija, la actriz Blake Lively -casada con el también intérprete Ryan Reynolds y madre de la pequeña James- decidió prolongar la estricta rutina de ejercicio físico que inició poco después de dar a luz al comprobar cómo los cambios experimentados por su ahora tonificada figura le ayudaron a sentirse mejor consigo misma.
'Empecé a entrenar con uno de los mejores instructores que he tenido en mi vida, Don Saladino, y la verdad es que me dejaba exhausta todos los días. Además, habían pasado ocho meses desde que tuve a mi hija y mi cuerpo era totalmente diferente al que lucía antes del embarazo. Ser testigo de los progresos que haces a diario y de cómo tu silueta se va transformando a base de sudor y esfuerzo es genial', confesó la artista al portal E! News.
Durante el último año, la que fuera protagonista de la serie 'Gossip Girl' tuvo que intensificar aún más el ritmo de sus sesiones de gimnasio para preparar el exigente rodaje de su nueva película, 'The Shallows', un proceso que ahora compara con los sacrificios a los que se ven sometidos los participantes de una 'maratón' pese a que no podría estar más satisfecha con los resultados.
'Fue una auténtica locura [tener que ejercitarse a ese nivel], pero al menos en esa ocasión tenía un objetivo claro que me servía para estar motivada y querer superarme en todo momento. Estuve entrenando como si fuera a presentarme a una maratón, pero esto era mucho peor, porque el rodaje consistió en seis semanas consecutivas que fueron frenéticas, trabajando seis días a la semana y 13 horas al día. Cuando terminamos de filmar, noté que en mi cuerpo habían aparecido músculos que no sabía que existían', apuntó.
Sus prolongados encierros en el gimnasio o, de forma más reciente, en el set de rodaje podrían haber resultado fundamentales para que Blake haya podido superar la 'tortura' que le producía ver accidentalmente las últimas escenas de sexo que su famoso marido ha protagonizado en la gran pantalla.
'Era una especie de tortura montarme en un avión y que de repente pongan una película en la que [Ryan Reynolds] sale teniendo relaciones sexuales con otra mujer. Me incomoda bastante ver esas cosas, pero por desgracia me pasa con frecuencia', revelaba en una entrevista anterior.
