Gracias al video que publicó su hija Dylan (27), se puede confirmar que la actriz Robin Wright se ha vuelto a casar a sus 52 años.
La protagonista de House of Cards contrajo matrimonio con Clement Giraudet este fin de semana en una íntima ceremonia que tuvo lugar en el pueblito francés de La Roche-sur-le-Buis y que, por lo que se puede apreciar en la mencionada grabación, estuvo marcada por un aire muy bohemio e informal en vista de los atuendos que lucían los invitados.
Dato
La pareja se conoció en el Festival de Cannes el año pasado y hace unos días disfrutaban juntos de unos días de playa por la costa italiana.
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Aunque era la primera ocasión en que se les relacionaba, el hecho de que en el mencionado encuentro deportivo estuvieran acompañados por Hopper (25), el otro hijo de Robin, parecía confirmar que lo suyo era algo más que un romance pasajero.
La actriz optó por un look de novia muy bohemio, con un vestido blanco de encaje de manga corta que combinó con una cinta anudada en el pelo.
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Meses después comenzaron a circular los primeros rumores acerca de una posible boda, después de que la intérprete fuera fotografiada luciendo lo que parecía ser un anillo de compromiso en el dedo anular.
Hasta la fecha se conoce muy poco sobre la vida privada de Clement, ni siquiera está claro cuál es su edad exacta -aunque sí se sabe que es considerablemente más joven que su flamante esposa-, ya que al poco de que trascendiera su noviazgo con Robin decidió hacer privadas sus redes sociales.
La famosa artista estuvo casada de 1996 a 2010 con Sean Penn, una unión de la que nacieron sus hijos y que estuvo marcada por sus altibajos. En 2012 conoció al actor Ben Foster, más de una década menor que ella, con quien llegó incluso a comprometerse, pero finalmente en agosto de 2015 confirmaron que habían decidido seguir caminos separados.
La pareja no esconde su amor en los lugares públicos.
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Regresa a la TV en tres meses
El 2 de noviembre vuelve a Netflix, la serie House of cards sin Kevin Spacey.
Será aproximadamente unos 12 meses después de que se conociera la conducta inapropiada de Kevin. Wright luchó junto con los encargados de la serie para que tuviera una última temporada lógica, coherente y que no perdiera su esencia incluso sin la presencia de Kevin como Frank Underwood, el político moralmente más corrupto del Partido Demócrata.